"His eyes are like angels but his heart is cold, no need to ask, he's a smooth operator."
✧Pareja principal: Charles y Carlos.
✧Humor, sarcasmo, romance, AU, mucho drama, lenguaje vulgar.
✧Gay.
✧Parejas secundarias: Chestapeen, Chewis, Dando, Yukier...
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Las dos semanas de descanso de Carlos se basaron en que la pareja de enamorados estuvieran yendo a todos los lugares que le gustaban a Charles.
Carlos comía variado y Charles… bueno, el menor comía pasta en cada momento que podía.
La necesidad de estar juntos era cada vez más insaciable, ya sea por amor o pasión, era mucho más difícil separarse del lindo monegasco.
Lo adoraba con una increíble devoción.
—Por favor, por favooor —Carlos estaba abrazando a Charles otra vez.
—Amor, necesito irme a trabajar, te prometo que en cuanto esté desocupado voy a volver —Charles luchaba por zafarse de los brazos del español.
—No, no quiero —y sí, ese chico definitivamente era todo un caso.
Después de casi una hora Carlos soltó al monegasco quién le prometió que volvería rápidamente y con hamburguesas para ambos.
—Podrías no trabajar nunca, solo quédate conmigo —dijo Carlos.
—No, y sí me sigues presionando menos llegaré rápido.
Carlos se fue a su cama rápidamente, definitivamente si algo le daba miedo era Charles enojado, su lindo monegasco era adorable pero también una furia con las amenazas.
—No se vale —Carlos dijo con un puchero.
—Claro que sí —el ojiverde sonrió y le dió un beso— vuelvo a las 5:00, te amo.
Salió rápidamente para después correr a su coche e ir hasta el otro lado de la ciudad, odiaba realmente los lunes porque siempre era un caos el inicio de semana.
Carlos se quedó frío al escuchar las palabras de Charles, y es que él antes le había dicho te quiero.
Pero su corazón latió muy fuerte al recordar el "te amo" de su precioso ángel de ojos verdes.
Carlos sonrió y se dejó llevar por el sueño un rato más, eran las 6:00 de la mañana y se pondría a hacer ejercicio más tarde.
El español despertó a las 8:00 entonces empezó su rutina, hacer ejercicio, ducharse, hacer algo para desayunar y limpiar el desorden que tenía Charles.
Amaba limpiar, le relajaba demasiado y vaya que su amado novio era un tornado dejando todo por todas partes.
Luego de hacer la limpieza el español se dió cuenta que casi no había comida en la nevera y fue a hacer las compras.
Claro que compró demasiadas cosas pero era para que su amorcito no tuviera que batallar con nada, incluso había bromeado con Charles de comprarle un supermercado solo para él.
Eran las 3:55 de la tarde cuando el español había acabado de ordenar todas las compras, entonces el teléfono de la habitación de Charles sonó y fue a contestar.
