Lalatina Dustiness Ford

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*Ding, dong.*

El timbre de la puerta sonó mientras pasaba por la cocina.

La tía Wiz estaba haciendo el desayuno así que tenía las manos ocupadas. 

— Yo voy

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— Yo voy. 

Entonces, conteste el llamado.

Cuando intenté ver quién es capaz de venir un domingo por la mañana, me encontré con una persona extremadamente conocida desde el otro lado.

— ¿Kazuma Parker?

— ¿S-si?, ¿señorita Dustiness?

Era Lalatina Dustiness Ford, hija del director de la preparatoria que llevaba su mismo apellido y donde asistía, o bueno, donde antes asistía.

Estaba frente a la luz radiante de la preparatoria

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Estaba frente a la luz radiante de la preparatoria.

Lalatina era una belleza sin igual, tenía un semblante digno de una dama adinerada gracias a su gran melena rubia que llegaba a las caderas y daba ese toque de nobleza cada vez que se alzaba sobre el aire. Tampoco se podía ignorar la altura que supera fácilmente a la mía y más que eso, el físico maduro de grandes pechos y cadera generosa. 

Ahora, que hacía esta belleza por aquí.

Me rasque la cabeza ante el misterio de su aparición.

— Que bueno que me conozcas. Eso hace más fácil las cosas.

Sería imposible no conocerte.

Aparte de ser la hija del director, es la vicepresidente del consejo estudiantil. Debido a ser un grado mayor no compartíamos salón, pero su popularidad era conocida por toda la escuela.

— Bien, Kazuma Parker, vengo por parte del consejo estudiantil y la dirección de la escuela. No me gusta decir esto, pero si no regresas mañana, serás expulsado.

Vaya forma de darme el mensaje. Sin pelos en la lengua.

— No reportaste ausencia por enfermedad ni cualquier evento adverso, así que se te dio un mes máximo para que regreses antes de tener que darte esta documentación. Realmente la escuela debería hacer los papeles, pero la presidenta por algún motivo me pidió darte el mensaje en persona.

¡Una bendición para este sorprendente Spider-man!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora