Palidezco y las piernas me tiemblan. Analice cada facción de Amelia, ahí, parada frente a la puerta de mi casa pidiendo hablar. El corazón se me había detenido y la bilis había subido a mi garganta, instalándose como perro en su casa.
No creo poder moverme tampoco. ¡Mierda, Mierda! ¿Que hace aquí? ¿Se entero de lo de Jamie y yo? Baje un poco la mirada y podía notar su panza creciente, un pequeño o pequeña integrante más de la familia Dornan.
¡Auch! Duele...
Después de unos varios segundos sin saber a que atenerme, asentí lento con la cabeza y ella paso a mi casa, cómoda, segura... Por Dios, ojalá no sea nada de lo que pienso.
Verla me hacia sentir esa sensación que había dejado de sentir hace a penas unos días donde intente convencerme de que nada malo había pasado, las cosas fueron sin querer, sin intención de lastimar a nadie... Aunque parece que la única que se lastimo fui yo.
Suspire.
Mire su panza una vez mas... Debe tener unos tres o dos meses, es pequeña pero contiene un mundo entero ahí. Un mundo donde yo no tengo cabida, mucho menos estadía. La tristeza y la culpa se mezclaban y hacían que mi cuerpo entero temblara y quería gritar, correr, huir. Pero no puedo, luego sentí confusión y rabia, mucha... Recordé las palabras de Jamie en el mensaje y me alegra no haberle creído, decía algo como:
"Dakota, tienes que escucharme. Amelia no esta embarazada, si, pero no de mi. Estamos intentando rehacer nuestra vida con otras personas, ya sabes como es el medio... Por favor, créeme."
Odio esta sensación y odio haberme mentido en este juego absurdo aunque... Si, extraño a Jamie, si lo quiero y lo quiero tanto que duele saber que nunca va a poder ser, no de esta manera.
-¿Estas bien? -Pregunto con una voz baja y cautelosa. -Estas pálida.
-Si, perdón.
Había dejado que mis pensamientos me ahogaran y no se cuanto tiempo estuvimos en silencio.
-¿Por qué te perdonas exactamente? -Me miro acusadora.
¡Mierda! Sabe todo...
-¿Quieres algo de tomar? -Pregunte con apenas un hilo de voz.
-Si, agua sin gas. -Dijo y avance a la cocina.
No se como llegue las piernas simplemente me temblaban y no había nada que hacer con eso. Saque del estante de los vasos uno y camine hasta la nevera para sacar el agua.
-Gracias. -Dijo cuando le entregue el vaso.
Amelia miraba todo detenidamente, como si se sorprendiera por algo. Me gustaría saber que piensa, en este momento quisiera esconderme bajo la tierra y no aparecer mas por lo menos hasta que olvide que una vez estuve con Jamie.
Me ardían los pómulos, las manos me sudaban y me costaba hablar así que si, eran todas las señales de que estaba completa y absolutamente nerviosa; necesito saber que hace aquí.
-Sigues pálida. -Me dijo tomando un poco de agua del vaso.
-Creo que no me esperaba esta... Visita. -suspire.
-Lo se. -sonrió. -sentí la necesidad de venir.
Sintió la necesidad de venir. ¡Okey! Esto no debe ser tan malo como creo, igual no se que podría estar haciendo ella aquí, conmigo, en mi casa.
-Esta hermosa tu panza. -Dije sonriendo, aunque estoy segura de que no sonó como me gustaría.
Si, me dolía.
ESTÁS LEYENDO
Adicto a ti. || Dakota Johnson y Jamie Dornan.
FanfictionEs prohibido. Es una Locura. Es adictivo Es tenerlo y no tenerlo. Es lo que nos paso.