Maldito Amor

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Me separé de Vidal y le dije que tenía cosas que hacer
Vidal;—por tu mamá y el entierro no te preocupes yo me aré cargo, los gastos correrán por mi cuenta—
No quería aceptar pero la verdad no teníamos dinero así que no tuve opción, pero le dije que le iba a firmar un pagaré por todo el dinero que había gastado el se dio media vuelta
Vidal;—me parece bien, entonces pasaremos primero por la oficina antes.…—
Antes de que?
Vidal;—voy a llevarte a casa de tu tía me imagino que le quieres dar la noticia a tu hermano— parecía que me hubiera leído la mente el supo al instante lo que quería hacer, asentí y le dije que si, efectivamente pasamos primero por la oficina, Vidal llamo a su hombre de confianza y le pidió que trajera los pagaré, no le puso fecha, me dijo que así me daría mas tiempo de poder reunir el dinero, estuve de acuerdo con el, así que firme y nos fuimos al llegar a la casa de mi tía, no sabía ni por dónde empezar a la final con con poco aliento y con el dolor más grande del mundo le dije "esta muerta" pude ver cómo mi tía se entristeció poco a poco, era como si por un momento el alma se le ubiese salido del pecho, no lloro, ni dijo nada simplemente se sentó, mi hermano por otra parte no lo podía creer gritaba que lo llevará con mamá pero con la pena más grande me tocó decirle Ya no estaba con nosotros.
Vidal me llamo y me informo que ya estaba listo todo, decidimos enterrarla en un cementerio, que más bien parecía un campo repleto de Rosas rojas y blancas, estuvimos un rato allí  y después de haberle echo el último Reso la gente se fue retirando me quedé yo sola allí parada recordando lo que mi mamá decia sobre la flores
si las mantienen en agua su belleza se preserva, y si las sacan simplemente se marchitan, la belleza está en donde nosotros la queramos ver,
así que mamá tu belleza estará conservada entre estás flores, algún día no muy cercano, nos volveremos a encontrar, volvere a verte, a pesar de eso me ubiese gustado haber hablado una vez mas contigo, dejamos a medias tantas charlas, me quedé con ganas de decirte una cosa.
Después de eso pasaron los días y conforme pasaban el intentar creer que mi mamá no estaba era algo que todavía no asimilaba, parecía mentira que de un momento a otro, la persona con la que más peleaba y discutía, no estaba la persona que más amaba en mi vida se había ido y lo que más me dolía era que si hubiera sabido todo esto antes, ubiese echo lo imposible por pasar todo el tiempo con ella, sin importar nada, la casa se sentía vacía, triste y deprimente, mi tía se llevó a vivir a mi hermano a Tokio una temporada, para que mi hermano pudiera adaptarse a la idea de que mamá ya no estaba, creo que de los dos el fue el que más tiempo tardo en aceptarlo, ella también me preguntó si quería irme pero tenía obligaciones que no podía dejar, así que no fui
Pero le prometí a mi hermano que al acabar iría a verlo, se entristeció un poco pero luego entendió.
Unos días después del entierro de mi mamá yo me puse a recoger sus cosas, ya no las necesitaríamos, además e oído que el quedarse aferrada a objetos no es bueno, no dejas descansar en paz a la persona que murió y lo único que logras es hundirte más en el llanto, la tristeza, y la falta de cariño de quién se fue, por eso dicen que personas vienen, personas van, personas nacen, personas mueren, es el ciclo de la vida y nosotros debemos acostumbrarnos a el, pero bueno empaque toda la ropa de mi mamá en una caja, pensé en donarlas a una fundación, cuando solo faltaba por desocupar una gaveta, los papeles que estaban adentro de la gaveta se calleron al piso, los levante todos, y dentre ellos salió una llave, me preguntaba de dónde era, mi mamá nunca tuvo con cerradura ningún estante de la casa, y muchos menos una puerta, di un paso hacia el escritorio y una tabla de madera de la que pise rechino, me agache a ver y medi cuenta que estaba levantada, como pude la quite con la mano, debajo se encontraba un cofre que estaba bajo llave, tome la llave que acababa de conseguir y intenté de abrí el cofre con ella al instante el cofre se abrió, dentro de él se encontraban dos cartas una decía mi nombre y la otra el de mi hermano, Tome la que decía mi nombre y la abrí,

Hola mi amor soy tu mamá, si estoy escribiendo esto es porque no se lo que suceda conmigo, hace 5 meses atrás tuve un mareo muy fuerte y fui al doctor, tenía el presentimiento de que algo no estaba bien y efectivamente me detectaron cáncer, tal vez tu hermano y tú no me perdonen por haberlo cayado, pero hubiese sido más doloroso para mí verlos sufrir intentado buscar le, la cura a algo que no la tiene,
La enfermedad esta muy avanzada me está consumiendo, me está matando
Eliza mi niña tal vez nunca te lo dije en persona, ahora me arrepiento de no haberlo echo, pero te amó con mi alma, te deseo lo más bello y hermoso en tu vida, creo yo haberte enseñado lo bueno y lo malo, se positiva, nunca te des por derrotada y jamás olvides que lo único imposible de vender es la muerte, dile a tu hermano que lo amo, que quiero que estudie, que sea un hombre de bien igual dejo otra carta que es para él, yo tengo y llevo conmigo su pasado, y esperó verlos contruir su futuro
Adiós mis niños mamá los ama.…
Al leer eso llore, si tan solo me hubiera dicho yo aunque sea hubiese permanecido más tiempo con ella, supongo que hay error que no tienen solución.
Pasaron 2 meses después de la muerte de mamá, y la partida de mi hermano a Tokio yo seguía estudiando y trabajando, decidí vender la casa de mamá, era demasiado grande para una sola persona, además me sentía muy Sola, con el dinero que me dieron compré un apartamento perfecto para mí, venía amoblado eso significa que no tuve que gastar más dinero en corotos,
dentro de poco iba a hacer mi graduación estaba ansiosa había pasado por momentos malos, pero eso no iba a hacer impedimento al contrario
Serían impulso para cumplir lo que quería, veía a Vidal casi que diario bueno si trabajaba con el obvió lo tenía que ver