21

1.8K 108 0
                                    

Jungkook se veía como un ángel.

No sé exactamente desde qué hora he estado observandole, pero he llegado a la conclusión de que simple y completamente es hermoso.

Se removió sobre la cama y lentamente fue abriendo los ojos.

-Buenos días.

-Hyung... Buenos días.

Besé sus labios, sin remordimientos.

-¿Cómo te sientes?

Se sonrojó inmediatamente.

-Cansado.

Siento haberte quitado la virginidad en un baño, bebé...

-Descansaste demasiado.

-¿E-enserio? Lo siento.

Intentó levantarse con velocidad, pero le fue imposible.

-No te muevas, ¿Te duele?

-Me duele mucho, hyung.

Sus labios formaron un adorable puchero y comencé a sentirme culpable. No, jamás podría arrepentirme de habérselo hecho, pero era obvio que había sido un bruto.

Es que joder, cuando se trata de Jungkook, me convierto en un jodido animal.

-Compré una cremita para el dolor... También pedí al servicio que nos trajera el desayuno.

-Gracias hyung...

Evitó mirarme y yo le alcancé la crema. Sus manos temblaron y le fue impossible abrir la tapa.

-Te ayudaré.

Me incorporé en las sábanas y con lentitud la fui retirando del cuerpo de Jungkook.

Jalé el pantalón de pijama que ayer le había puesto mientras dormía. Sí había evitado el bóxer porque creí que era mucho más cómodo para él.

No era necesario que lo hiciera, pero yo quería verlo así, débil, desnudo y temblando ante mí.

Cariño, me estás volviendo loco.

-Tae...

-Abre las piernas, kookie.

Jungkook obedeció y abrió las piernas, dejándome ver otra vez esa pequeña y apretada entrada que ayer había profanado.

Recordé su exquisita estrechez.

La zona se encontraba roja y sus caderas tenían una ligera marca de mis dedos.

Respira.

Tomé una buena cantidad del producto y lo apliqué con lentitud. Él cerró los ojos y yo fui ascendiendo hacia su rostro mientras mis dedos se internaban en su interior, con movimientos lentos y profundos.

Quería penetrarlo, mi pene me lo rogaba, pero yo no podía. Mi deber era cuidar de Jungkook.

-Hyung...

Atrapé sus labios y los mordí con delicadeza.

Decidí retirar mis dedos de su interior antes de que perdiera el control.

-Debemos irnos.

Lastimosamente.

Tío Taehyung || «VKOOK»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora