IS IT TIME? - GAVI +18

Horchata

Me desperté atontada, no me puse alarma pero ya no me acordaba de lo que era vivir con mis padres y que hiciesen tanto ruido por las mañanas.

Me puse un mono blanco encima del bikini, así bajaba ya a desayunar y estaba lista para cuando nos tuviésemos que ir.

- Buenos días cariño - sonrió mamá.

- Buenos días, qué bien huele - dije entrando en la cocina.

- Tortitas - dijo feliz.

- Mmmmmm me muero - dije dando palmadas - ¿y papá?

- Ha salido a por los tíos, que acaban de llegar - respondió.

- Hala, no sabía que venían - dije sorprendida.

- Sí, ha sido de última hora - dijo - despierta a Nick, vamos a desayunar.

- Que se aguante, más tortitas para mí - dije cogiendo una.

- ¡Emma! - dijo mi madre dándome un manotazo.

- Agh voy - rodé los ojos.

Subí y abrí la puerta de la habitación de Nick, tirándome encima de él.

- Arribaaaaaaa - dije haciéndole cosquillas.

- Em vete a tomar por culo - se quejó.

- Vale, más tortitas para mí - dije orgullosa.

- Eh, ni de coña - dijo levantándose de golpe.

- Básico - reí.

Me dió una colleja y bajamos ambos, ya estaban allí nuestro padre y tíos.

- ¡FELICIDADES PAPÁ! - gritamos al unísono Nick y yo, y nos miramos instantáneamente.

- A veces dais miedo - rió mamá.

- Gracias mis niños - dijo papá abrazándonos.

- Hola guapísimos - dijo mi tía, a la cuál saludamos, y después a nuestro tío.

- Cuanto tiempo - dije yo.

- Mucho, estáis muy guapos - dijo mi tío sonriendo.

Desayunamos todos juntos, Nick y yo de morros porque pensábamos que todas las tortitas eran para nosotros, y después cogimos todas las cosas para irnos al muelle.

- Cuánta gente - dije al llegar.

- Pues todos ellos van en el mismo barco - dijo papá.

- No me jodas - dijo Nick.

- Esa boca - le riñó mamá dándole una colleja.

- ¡Felicidades Antonio! - dijo Mar abrazando a mi padre.

- Gracias princesa - sonrió - ¿y tus padres?

- Con los de Álvaro, ahora vienen - contestó.

- Muchísimas felicidades - dijo Álvaro también.

- Gracias campeón - contestó.

Fueron poco a poco llegando todos, me saludaban amigos de mis padres que no tenía ni idea de quienes eran, pero me abrazaban como si me conociesen de toda la vida.

Nick estaba igual que yo, y en frente Mar y Álvaro partiéndose de risa.

Por fin empezamos a subir al barco, la verdad es que era inmenso y yo me cagué de miedo al pensar en cómo podía flotar un bicharraco tan grande.

Nos llevaron a la que era nuestra zona, mi padre nos presentó a más amigos y a sus hijos, había algunos de nuestra edad, a los cuales ya nos avisó de que teníamos que incluir en el grupo.