Capitulo dos: Bueno

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Ella se apresuró a abrir la ventana, cosa que le causó un susto ya que subió inmediatamente, no como la de su antiguo apartamento.

-. ¿Qué haces aquí? Lo miró sorprendida, sobre todo por como lucia. Estaba acostumbrada a ser ella la que corría, la que huía cuando las cosas no iban bien, era la primera en desertar, y reconoció esa mirada en él, en su cabello mal peinado, en su sudadera negra que rara vez usaba y su mirada de enojo y pena que había visto un par de veces. -. Pasa, si te ven los vecinos, quizá llamen a la policía o peor, a mis padres.

El saltó la ventana y se quedó en medio de la habitación.

-. Hola. Maya le dijo con una pequeña sonrisa mientras cerraba la ventana. -. Puedes sentarte, si quieres. El negó, estaba agitado.

En eso, el timbre sonó, estaba segura que era Pearl, su vecina llamando para ver si tenia pilas o velas o algo así, pero él se puso más inquieto.

-. Creo que es la vecina, ya vuelvo. Cuando volteó, casi tropezó, el no saber que pasaba la ponía nerviosa.

Cuando volvió, se encontró a Lucas en la misma posición, con la mirada perdida y ahora si se asustó. El Lucas de siempre se habría puesto a mirar sus pinturas, a buscar en su pared fotos de Riley y ella, cosas con significado, esto de la quietud y todo era raro, bastante raro.

-. ¿Quieres comer? Hay arroz frito y otras cosas. Lo miró de reojo mientras se sentaba en el suelo, trató de no apresurarlo.

Luego de unos minutos se sentó.

-. Gracias. Dijo Lucas mientras tomaba uno de los potes vacíos que maya le dejó como plato. -. Por todo. Ella asintió sin mirarlo, pero luego el estómago de él sonó fuerte, seguramente había estado horas fuera de su casa.

-. Come que se enfría. Ella le dedicó una cálida y fugaz sonrisa.

Comieron rápido, Lucas demoró todo a su paso, lo único que sobró fue la salsa de sopa. Luego de terminar, Maya apoyó su espalda en un closet y lo quedó mirando.

-. Ya que te alimente debes, por obligación, contarme que pasa y no te trates de ir que no lo voy a permitir. Ella sonrió y recién ahí vio una pequeña sonrisa de parte de su amigo.

-. Aunque lo intentes, no podrías. Suspiró profundamente y miró hacia otro lado para luego volver a posar su mirada en los ojos de Maya. -. Discutí con mi mamá, con todos en realidad, estaba tan enojado que quise salir, pero luego me di cuenta que no se saqué mi billetera y si iba donde los Matthews me iban a llevar de vuelta.

Ella se golpeó la cabeza de mentira haciendo el gesto de no me digas.

-. No quise volver por ellas, sería muy poco rebelde de mi parte. Río bajito. -. Así que vine aquí esperando que estuvieras.

-. Puedes quedarte, pero llama a tu mamá. El comenzó a negar desde que ella empezó a hablar.

-. No puedo, no quiero.

-. Lucas, solo hazlo para que no se preocupe más. Maya dejó su plato en el suelo y puso su mano en su brazo. -. Solo dile que estas bien, que mañana vuelves. 

Get your guns

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⏰ Última actualización: Jun 25, 2023 ⏰

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