•Conquistando a Rose• [Terminada] Libro #1

Capitulo 22. Bienvenido Pequeño.

Rose Laurent

Bienvenido Pequeño.

Hoy ya llevaba 8 meses de embarazo, no faltaba nada para tener a mi bebé en mis brazos y la verdad eso me emocionaba pero a la vez me aterraba por el miedo de no ser una buena madre.

Mis novios se encargaron de que no tenga esos pensamientos y han estado al pendiente mío cada día y mes, incluso están emocionados al igual que yo, incluso cumplieron cada antojo que tenía.

Me encontraba en casa de theo ya que ellos querían manteneme vigilada para que no ocurra algo o tuviera algún dolor.

Sentí unos besos en mi rostro y abrí mis ojos para encontrarme a Sam quien quería que me levantará.

- Buenos días mi flor, como has dormido?-preguntó para luego besarme y acariciar mi vientre ahora no tan plano, y después besarlo.

- Bien, un poco de náuseas pero nada grave.-respondí sonriendo.

- Pronto tendremos a nuestro príncipe mi flor, es algo emocionante y a la vez me da miedo.-confesó y yo lo miré fijamente.

- Serás un gran padre mi amor, los tres lo serán y te aseguro que él los amara tanto como yo.-dije acariciando su mejilla.

El me agarró de las piernas para cargarme y así irnos abajo a desayunar, no les gustaba que subiera o bajará las escaleras sola.

Llegamos al comedor y allí me encontré a mis otros dos chicos, ellos me besaron y colocaron mi desayuno al frente mío y yo comencé a devorarlo.

Después de eso pasamos el día viendo películas y hablando entre nosotros, los chicos fueron a preparar la cena y me dejaron en el sofá.

Estaba tranquila leyendo un libro hasta que sentí un dolor abajo de mi vientre haciendo que soltará un quejido.

- Shhh, que pasa bebé? Ya enseguida estará la comida.-dije mientras acariciaba mi vientre pero en eso otro dolor hizo que dejara mi libro de lado y intentará levantarme.

Pero no pude hacerlo porque algo bajo entre mis piernas y mire hacia allí para ver qué rompí bolsa.

- CHICOS!! CHICOS!!-grité mientras inhalaba y exhalaba.

Ellos vinieron rápidamente y se dieron cuenta que había roto bolsa, Sam me cargo y fuimos hasta el auto para colocarme en los asientos de atrás, el tomo mi cabeza y la coloco en su regazo, theo y michael subieron adelante para luego ir rumbo al hospital.

Theo se había salteado de seguro varios semáforos pero parecía no importarle mucho.

- Tranquila mi amor, respira, ya estamos casi llegando.-dijo Sam intentando tranquilizarme.

Tal y como dijo ya habíamos llegado al hospital, el rápidamente me bajo del auto para luego correr adentro del hospital con michael adelante.

- Alguien ayúdeme!! Mi mujer está por dar a luz!!-gritó michael y unos enfermeros trajeron una silla de rueda para luego colocarme allí y así ir a dónde daría a luz.

Luego de haberme cambiado y estar en una camilla, entro el doctor que estaba a cargo de mi embarazo.

- Vaya señorita rose, al parecer esta lista para dar a luz pero lamento decirle que solo uno de sus novios podrá estar con usted.-dijo el doctor quién había revisado mi dilatación.

- N-No podría estar los tres conmigo p-porfavor?-suplique mientras otra contracción hacia que me doblará.

- Bien, haré una excepción por usted.-dijo para luego llevarme al quirófano, los chicos vinieron vestidos como los enfermeros, dos de ellos se quedaron en mi izquierda y theo se quedó en mi derecha.

- Muy bien señorita, hora de traer una vida al mundo.-dijo el doctor quién se colocó entre mis piernas.

Yo agarre la mano de michael y la de theo, cuando dijeron que era la hora de pujar, eso hice.

Ya había perdido la cuenta cuántas veces empuje, sentía toda mi cara sudada.

- Vamos cielo, un poco más y tendremos a nuestro hijo en brazos.-dijo theo.

Y con eso grite con fuerzas hasta que no pude más y un llanto lleno toda la habitación.

- Felicidades, es un varón muy sano.-dijo una enfermera quien coloco al pequeño en brazos de michael el cual acercó a mi.

- E-Es hermoso...-murmuré mientras él lo colocaba en mis brazos y no pude evitar soltar lágrimas.

- Bienvenido al mundo, nuestro pequeño Calix.-dijo theo quien beso mi cabeza y acaricio la mejilla de nuestro hijo.

(......)

Habían pasado unas horas y yo ya me encontraba como nueva y con mi ahora hijo en brazos, agradecía que tenía el mismo cabello que yo, ya que se le notaba que es rubio, su carita era casi igual a la mía pero solo quedaba sus ojos el cual aún no abrió.

- Vaya, así que salió igual a ti.-dijo theo quien estaba sentado al lado mío.

- Lo sé, genes laurent.-respondí mientras le daba de mi pecho al pequeño calix.

En eso entraron mis locas mejores amigas, gritando a todo pulmón haciendo que mi hijo llorara.

- Shh! Miren lo que hicieron.-exclamó theo, fulminando con la mirada a ambas chicas mientras yo intentaba tranquilizar a calix.

El pequeño se tranquilizó y en eso abrió sus ojos, mostrando los mismos color celestes que el cielo al igual que los míos.

Las madrinas se acercaron y dejaron varios regalos en el sofá que había y hablaron como loro de como lo iban a malcriar y como se iba a comportar con las niñas.

Los padres de los chicos también vinieron con varios regalos y felicitando de tan hermoso niño que tuve.

Luego de todo aquello ya me habían dado el alta y nos encontrábamos en el auto, según michael tenía un regalo preparado para nosotros.

Llegamos al lugar, los chicos me insitaron a bajar y eso hice para encontrarme una casa de dos pisos grande.

- Y esto?-pregunté mirando a michael.

- Esto cariño mío, es nuestra ahora casa, se que llevamos poco tiempo juntos pero quiero que vivas con nosotros.-respondió michael con una sonrisa nerviosa y tomo mi mano para adentrarnos a la casa.

Era hermosa por dentro, tenía una sala grande junto con un comedor y cocina moderna, abajo tenía dos habitaciones y en el primer piso tenía mínimo 8 habitaciones y un baño en cada uno.

- Y que dices? Quieres que vivamos juntos?-preguntó mirándome.

Y me quedé pensativa por un segundo pero luego tome mi decisión, el cual quiero pasar el resto de mi vida con ellos.

- Claro que si quiero.-respondí sonriendo.

Ahora quedaba la mudanza y nuestros felices para siempre...