Red Army [Eddsworld x reader]

Capítulo 25

Edd despertó temprano, alistándose para abandonar su habitación llamando a la puerta de las habitaciones de sus dos amigos con insistencia para hacerlos despertar, no pueden llegar tarde al primer entrenamiento porque la primera impresión que darían es importante para su superior. Dejó de tocar las puertas cuando estas se abrieron cruzándose de brazos al notar que sus dos amigos siguen con rastros de sueño, al menos están arreglados

—Tenemos que movernos, no podemos llegar tarde al entrenamiento sino nuestra superior no hará sufrir aún más—recordó para sus dos amigos caminando hasta el área de entrenamiento superior

Sí, entrenarían en un campo de entrenamiento distinto porque en el campo de entrenamiento común están los otros soldados novatos

—¿No podemos desayunar?—pregunta un adormilado Tom

—Yo quiero desayunar—masculló Matt acomodando su cabello con una mano

—No es recomendable, podemos vomitar—comenta Edd, le gustaría desayunar porque está acostumbrado a ello pero tener que cumplir con un entrenamiento fuerte lo podría hacer vomitarse encima, será mejor evitar esos accidentes

—Buenos días—no se sorprendieron ante la presencia de la joven mujer de cabellos castaños oscuros agarrados en una coleta alta, fumando un cigarro mientras tiene un café en mano—Qué maravilla que hayan llegado temprano, la puntualidad es muy importante para este entrenamiento, mientras lleguen temprano no tendrán que cumplir con algún castigo—aconseja con calma tomando una calada del cigarro antes de soltarla en una nube de entre sus labios

Respondieron al saludo con respeto manteniéndose atentos a las primeras indicaciones para empezar

—Realicen un estiramiento para empezar con el calentamiento—ordenó sentándose en las gradas que están cerca terminando su cigarro pisándolo con su bota y terminando de tomar su café

—Entendido—respondieron al unísono

—Estírense bien porque el entrenamiento es duro, no quiero que se lesionen—alzó un poco la voz como un recordatorio importante a lo cual los hombres asintieron

Esperando que los hombres terminen su entrenamiento escuchando sus múltiples quejidos deseando morir porque tantos ejercicios los han vuelto mierda que apenas pueden sentir sus cuerpos o respirar la joven mujer esta dibujando en su libreta mirando la hora faltando unos minutos para la hora del almuerzo, levanta la mirada viendo como los británicos están sudando como si estuvieran bajo una ducha abierta

—¡Tiempo!—exclamó cuando se hizo hora del almuerzo, los tres hombres cayeron al suelo soltando jadeos de cansancio—Hagan un estiramiento pausado que es importante, ya es hora del almuerzo entonces después de estirar se pueden ir, les recomiendo que coman y se duchen con agua tibia cuando sus cuerpos se les pase el calor del entrenamiento—

—Está bien, gracias, Coronel ____(apellido)—Edd suspiró levantándose del suelo

—Hasta mañana—se despidió queriendo almorzar

—¿Ya se fue?—pregunta Matt en el suelo

—Sí—afirmó Edd

—Maldita mujer—habló con desagrado Tom—Debe encantarle estarnos haciendo la vida imposible destruyéndonos los cuerpos—se acomodó sentándose en el suelo limpiando el sudor de su rostro con cansancio—Muero de hambre—

—Siento que puedo comer todo un banquete yo solo del hambre que tengo—comentó Matt levantándose a duras penas del suelo

—Vamos, tenemos que levantarnos para llegar hasta la cafetería—Edd sacudió sus ropas ayudando a sus dos amigos a levantarse, apoyándose mutuamente para caminar hasta su destino