Cuando una puerta se cierra...

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<<VENDIDO>>
Eso fue lo último que vieron de su casa, escrito en letras rojas en un cartel clavado en el patio delantero de su casa, mientras el coche se alejaba, seguido del camión de mudanza.
Cuando se habían enterado de que se mudaban, todos habían comenzado ha hablar sin orden ni concierto, hasta que Odín gritó que se callaran.

- La empresa ha abierto una nueva sucursal en América, y lo mejor es que nos mudamos allí. Miradlo como una nueva oportunidad para vosotros, ireis a un mejor instituto, tendreis mas caminos disponibles para estudiar, hareis nuevos amigos... - A pesar de sus palabras, ninguno se lo tomo demasiado bien.

Hela lo acepto furiosa pero con frialdad. Se lo dijo inmediatamente a sus amigos, con los unicos que se permitió mostrar lo mucho que le afectaba, pero no pensaba suplicarle a su padre. Ya estaba acostumbrada a que su vida no fuera fácil y lo enfrentaría con orgullo, eso si lo tenia claro. Se convencía de que cuando fuera mayor volvería a Nuevo Asgard, a casa.
Loki sonrió al escuchar el discurso de Odín

-Debe de ser horrible que una empresa innovadora e inexperta se vuelva mas influyente que la tuya y tengais que trasladar la empresa. A otro continente, nada menos.

Claro que no quería mudarse y tener que empezar de cero: requería mas capacidad para socializar de la que tenia, pero lo que fuera por ver humillado a su padre. Sylvie fue la menos afectada. No tenia amigos en especial, y podría llevar a su serpiente consigo, asique para ella no sería para tanto.
¿Y para Thor? El era quien mas amigos tenia allí, y su lealtad le hacia resistirse a la idea de irse. Juro hacer videollamadas semanales y se negó a pensar que nada pudiera separarles. No se atrevió a oponerse a su padre y enfrento el cambio con positivismo, animando sobre todo a Loki, quien parecía el mas reticente de de todos. Thor estaba incluso animado de poder hacer nuevos amigos, y se puso a perfeccionar su ingles ya que sabia que era quien peor nivel tenia de su familia. En el avión se sentó junto a Sylvie para divertirla y distraerla de su miedo a los espacios pequeños y agobiantes.
Comenzaban el instituto al inicio,  en septiembre, y en un arranque de impulsividad, Thor decidió cortarse, casi rapado, el pelo. Todos le miraron sorprendidos, y los menores esperaban la colera de Odín. El pelo largo tambión en los hombres era casi un legado familiar. Sin embargo su padre le revolvió su poco pelo, riendo, y dijo, para el asombro general.

- Me encanta ver que al menos uno de mis hijos hace algo para adaptarse. Así es como lo llevan aquí, ¿verdad hijo?- le dijo, casi hasta condescendiente. Loki frunció el ceño aun mas.

<<No importa lo que haga, siempre será el hijo perfecto>>

Con el ajetreo de la mudanza casi no pararon a descansar hasta que llego su primer día de clase. Thor, Loki y Sylvie iban al mismo, y Hela a otro de enseñanza superior. Caminaron juntos hasta que ella se fue por otro lado, y en el instituto Thor pidió los horarios de sus hermanos menores también.

-Animaos chicos. ¡Estais en la misma clase! Ayudaos a hacer amigos y vereis como es genial.

Se separaron inevitablemente cuando los acompaño a su clase, y el mayor les animo con los pulgares hacia arriba, a entrar. Luego se dirigió a la suya y se sentó en el único sitio que vio libre cuando estuvieron todos sentados.

-¡Hola! Me llamo Thor, acabamos de mudarnos de Noruega.- se presento al chico que tenia al lado- ¿Cómo te llamas?

- Clint- dijo el otro, evaluándolo con la mirada. No tuvieron tiempo a mas, pero en casi todas las clases los profesores le dieron la posibilidad de presentarse. Entre clases no le importo preguntar por direcciones para sus otras asignaturas y su gran sonrisa hizo que en poco tiempo casi todo el mundo conociera ya a Thor, el musculoso rubio que se había mudado desde Noruego en las vacaciones de verano.
Llego el descanso para comer y se encontró con los gemelos en la puerta de la cafetería.

Familia OdinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora