Almas Gemelas (Trilogía de Almas)

Capítulo 20

⚜️⚜️⚜️
Territorio Tridax – Zona Argelia
Jackson

Respiré hondo y apreté mi pecho. La bala había impactado en la unión del hombro y el mi pecho derecho. Sentía el dolor punzante bajo a la clavícula. La bala no había traspasado, solo tenía el orificio de entrada que sangraba con intensidad.

Me levanté ahogando mis quejidos de dolor. Permanecí sentado unos segundos apretando la herida y cerrando los ojos con fuerzas. Mis sentidos se habían disipado.

Una explosión resonó a lo lejos confundiendo la percepción que mis oídos captaban de mí entorno.

Abrí mis ojos y vi a Erick pelear. Mi vista recorrió el recinto deteniéndome en Katy. Estaba frente a un grupo de civiles y sujetaba con fuerza una daga.

Una joven se acercaba a ella con decisión. Me arrodille y me impulse a ponerme de pie con rapidez. Katy me miró directamente a mí y en un parpadeo tenía a su daga volando hacia mí. Con mi brazo bueno detuve la daga a solo unos centímetros de mí. Por poco y me la incrustaba en el pecho.

La apreté con fuerza, mitad en el mango y mitad en la hoja. Unas gotas carmesí se escurrieron por el corte. Incrédulo por su ataque la miré escéptico esperando su explicación. Su grito: "detrás de ti" me hizo girar con violencia preparándome para el ataque que iba a recibir. Pude sentir la intensidad del peligro a mis espaldas, como si un baldazo de agua helada recorriera mi cuerpo.

Con la daga repelí un disparo. Miré los ojos del atacante. Eran opacos, nada brillantes o llamativos. Solo portaba un arma, así que descarte que fuera vampiro o brujo. Y su apariencia se encasillaba más a un metamórfico.

Disparó de nuevo y lo esquivé. Tres, cuarto, cinco, seis disparos y tuvo que recargar de nuevo. Esos segundos los aproveché. Me acerque a él y antes de que siguiera terminando de preparar el arma, incruste la daga en cuello.

Me miró impresionado. Tosió con dificultad con los ojos bien abiertos. Comenzó a brotar sangre de su boca y sus ojos fueron parpadeando con lentitud mientras trataba de permanecer consiente. Pero no duró mucho antes de morir con su vista perdida en la nada misma que ya era él.

Removí la daga mientras su cuerpo se desplomaba. Apreté mi herida volteando en busca del atacante de Katy. La joven estaba en el suelo con una daga en su ojo, la daga era idéntica a la que yo tenía en la mano.

Miré a Katy que se enfrentaba a otra persona. Portaba otra daga en su mano. ¿De dónde las había obtenido? Lanzó la daga hacia su atacante, pero está se detuvo a mitad del duelo. A quien se enfrentaba, resultaba ser un brujo que acababa de detener la daga con su magia. Sus manos extendidas vibraban con su magia mientras recitaba alguna clase de hechizo.

Katy lo veía con tanta intensidad que su daga volvió a retomar su curso. Impactó en la cabeza del brujo, matándolo y cayendo hacia tras.

En un parpadeo la rodearon a ella. Me relaje al ver a varios tridax resguardándola. Artemis le dijo que Derek les había encomendado su extracción del castillo. Pero Katy se negó a salir sin ayudar a los que estaban ahí. Empujo a un tridax que no conocía y se agachó para ayudar a una señora que estaba en el suelo cubriendo a dos niños con su cuerpo.

—Derek nos ordenó escoltarte de nuevo a Novex.

—¡En vez de estar ahí de pie, ve a apoyar a Erick o ayúdame a sacar a estas personas de aquí!

Artemis estaba por discutir aquello. Pero lo detuve sujetándolo del hombro. Él se alejó de mi tacto con brusquedad. Al verme el rostro suspiró. Pase de él y me centre en ella.

—Yo los ayudaré. Tú vete con ellos.

Resopló luego de ayudar a los niños a levantarse. Sé acercó a mí y me quito la mano de mi herida. Presionó sobre el disparo y negó.