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Todos los días eran iguales, estabas un rato conmigo en el salón o en el receso y luego te ibas con tus amistades. No me molestaba tanto, sabía que antes estaba muy pegado a ti y no pasabas tanto tiempo con tus amigos.

Te dejé en paz para darte un respiro, en el tiempo que nos dimos espació conocí a alguien, una chica de un año menor, era del turno tarde. Se me había acercado y empezamos a hablar más seguido, se llamaba Core, dijo que era amiga de Dream. En el primer instante me cayo bien, siempre tenía tema de conversación y me contaba secretos y chismes que corrían por la escuela o algunos que nadie sabía.

Un día de esos no te había hablado en todo el día, no sabía si en verdad estabas celoso ya que cuándo salí al receso Core ya estaba ahí esperándo a Dream y a mí, en un momento pude ver bien tus ojos, estaban matando con la mirada a Core hasta que me miraste a mí con enojó y celos. Le dije a Dream que hablaría contigo, cuando fuí  hacía ti terminaste siendo frío y cortante conmigo, apenas me dirijias la palabra. Me sentí mal por lo que fuí directo.

—¿Estas celoso?.

—¿Por qué lo dices?.

—Desde que hablo con mi nueva amiga te noté distinto.

—No me importa con quién hables o no.

—Sabes que puedes contarme lo que sea que te moleste— Me acerce a tí tomándote de la mano entrelazando mis dedos con los tuyos.

—Solo.. no quiero que te alejes de mi por alguien nuevo que conociste.

—Yo jamás me alejaría de tí, puede que no hablemos todos los días pero sabés bien que tú eres.. el dueño de todo mi amor.

—No digas algo que probablemente no cumplirás.

—Yo siempre cumplo lo que digo, a menos que me terminé olvidando.. pero de algo tan importante como tú jamás olvidaría.

—Ya dejá de ser tan cariñoso y melancólico, es irritante.

—Lo siento, solo era para que supieras.

—Igual es lindo, gracias Ink— Abrazo con cuidado al albino, no le gustaba el contacto con muchos pero con él era completamente diferente, su aroma era adictivo, su cuerpo cálido. Su rostro quedo chocando con el cuello del más alto, su piel era tan sueve, muy poco podía darse la suerte de abrazar y estar en esa posición, siempre tenía una bufanda marrón que cubría su cuello, sin embargo, esta vez no la trajo y se pudo ver unas marcas en su cuello, eran como tatuajes.

No quería separarme de tí. Tú rico olor a chocolate con leche era increíble, aveces era diferente y olías a café con canela. Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando sentí tu mano en mi cuello, pasabas tu dedo por mis marcas, parece que te gustaron ya que estuvimos como unos cinco minutos pegados. Te abrazaba por tu cintura mientras que tu solo tenías tu mano en mi espalda aferrandote mientras que la otra recorría todo mi cuello hasta mi mancha de mi mejilla. Te imaginaras como mi corazón estaba latiendo de amor en ese momento, se derretía por lo diminuto que eras entre mis brazos; Simplemente sintiendo mis latidos sabías el amor y apegó que sentía hacía tí.

Lamentable que tus amigos llegaron haciendo burlas sobre aquella vez en la que te sentaste sobre mis piernas, decían que eso fue lo que te volvió gay, no te importó lo que dijeron y seguiste abrazándome mientras los insultabas. Yo quería irme para dejarte solo con tus amigos pero tu no te desprendias de mí. Me quede contigo hasta que terminó el receso.

Enamorado tuyo. [InkError]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora