X : pijamada

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En la sala de los menesteres

Hermione, Harry, Pansy y Daphne Greengrass se encontraban sentados en un sofá enorme que habia puesto la sala.

Pansy - Hermione, Harry, ella es Daphne, mi mejor amiga.

Daphne - Hola! Tenia muchas ganas de hablar con vosotros, pero en clases siempre estais con otras personas y me daba un poco de vergüenza...

Herm - Bueno, pues hoy tenemos toda la noche, soy Hermione Granger, un placer.

Harry - Yo soy Harry Potter, si eres amiga de Draco, soy también conocido como Potty.

Pansy - Sep, básicamente ese es tu apodo entre las serpientes.

Daphne - Daphne Greengrass, un gusto.

Pansy - Ahora, sabéis que se rumorea que la profesora sinistra está enamorada de snape?

Harry - pues se va a llevar un chasco.

Daphne - por?

Harry - Severus es gay.

Daphne y Pansy se miraron y pusieron una cara diabolica.

Pansy - Theo me debe veinte galeones.

Daphne - Zabini me debe diez.

Herm - Apostáis por la atracción sexual de vuestros profes?

Pansy - También tengo una apuesta xon Draco sobre cuanto tardan Ron y Blaise en besarse.

Harry - me juego mi fortuna a que es entre mañana y pasado.

Pansy - Yo aposté lo mismo pero por treinta galeones.

Herm - vas fuerte.

Pansy - mi instinto no falla.

Harry - muy cierto.

Daphne - igual que sabemos que tu y Theo también vais a besuquearos en muy poco tiempo.

Las tres chicas de la sala asintieron a la vez.

Harry - Os odio.

Pansy - yo también te quiero, ahora acercaos que os enseñare que maravillas he traído.

Hermione y Pansy estaban sentadas en el medio, con la postura correcta, mientras Harry estaba estirado con la cabeza en las piernas de la castaña y Daphne se recargaba en la Slytherin.

Pansy había traído diferentes mascarillas con texturas variadas, todas con la función de dejar un cutis perfecto. Luego también habían un montón de esmaltes de 100 tonalidades distintas en una cajita, al lado de los peines y cepillos.
Detrás de todo ese montón de material, había la mitad del stock de honnyducks y sin exagerar la mitad de dulces de todo el mundo, los cuatro dudaban salir de ahí sin caries.

Pansy - Hermione, que hay entre tu y Draco? Ya os habéis besado o esperáis a que aparezca un muérdago?

...

En las mazmorras, un Lucius muy nervioso estaba exasperando a Snape.

Sev - Mira, afronta que a tu hijo le gusta Granger y deja de caminar en círculos, vas a acabar desgastando mi alfombra.

Lu - Te comprare otra, pero necesito estar en movimiento.

Sev - Porqué?

Lucius - Mi único hijo va a tener novia, perdón si sufro una crisis paternal.

Severus, harto de ver el mismo espectáculo se levantó de su sillón para parar al platinado.

Sev - quieto.

Lu - o que?

Severus se armó de valor y lo besó, poco a poco, sus manos encontraron su lugar en el cuello del rubio y su beso fue devuelto.

Sev - Sinó te echaré de mi habitación.

Lucius escondió su cabeza en el cuello del azabache, oliendo el sutil aroma de un perfume y el fuerte olor a pociones y whisky de fuego, fragancia que siempre tenía el ojinegro.

Lu - llevaba tiempo esperando esto.

Sev - Pues no lo desperdicies con tus nervios.

Lucius sin previo aviso lo cargó estilo nupcial y los hizo aterrizar en la cama, donde se colocó de forma que snape estuviera estirado encima de él.

Sev - o-oye, podrías avisar.

Lu - Me puedo quedar a dormir?

Sev - No se yo, no es un poco sospechoso?

Lucius empezó a jugar con un mechon del pelo de Severus, mientras el contrario miraba con atención al rubio.

Lu - no me importa, solo quiero estar contigo un poco más.

Sev - está bien, pero mañana te vas.

Lu - si no hay más remedio.

Así los dos se pasaron la noche entre toques casuales y conversaciones triviales, disfrutando por fin de expresar sus sentimientos, cosa que había costado horrores para Snape.

...

Eran las seis de un domingo y Draco ya estaba levantado, una pesadilla le había atormentado desde hace tiempo, pero simplemente salió a caminar por los pasillos. Ahí mismo, su querido padrino estaba haciendo su habitual camino hacia la sala de pociones, antes de pararse en seco y girar hacía su dirección.

Sev - Draco, que haces despierto tan pronto?

Dra - Pesadillas...tienes ojeras.

Sev - Sí, algún problema?

Dra - El causante es mi padre?

Severus se sonrojo un poco, lo suficiente para que Draco luciera una sonrisa, sabía que Snape cuidaría de su padre.

Dra - Entonces, quien va arriba?

Severus se puso más rojo, se acercó a Draco y le dió un zape.

Sev - Hormonas, solo estuvimos hablando.

Dra - Yaaaaa... Eso es un no quiero responder.

Sev - Sigue preguntando y Slytherin se quedará en numeros rojos.

Dra - Tanto como tu cara?

Sev - Parece que te has relajado demasiado a mi alrededor, te recuerdo que soy tu maestro.

Dra - También mi medio-padre y padrino, me quieres demasiado.

Sev - Eso lo dices tú.

Dra - Por algo será.

Sev - ugh, eres insoportable, me pregunto a quién habrás salido.

Dra - Viene de familia.

Sev - si dejas tu fanfarronería aquí, te apetece hacer pociones conmigo?

Dra - enserio?

El rubio estaba super emocionado, siempre aprendía un montón con su padrino, por lo tanto decidió que se comportaría con tal de ir con él.

Sev - Solo son un par de encargos de la enfermería, dudo que tardemos mucho.

Entonces Lucius salió de la habitación del pocionista con solo un pantalón puesto.

Lu - Sevy, vuelve a la cama...

Sev - Dragon, vámonos, a ver si tu padre se pone más decente.

El pequeño se empezó a reir y siguió al pelinegro, dejando atras a su padre, quién ponía carita de perro abandonado.

Sev - Malfoys, das un dedo y te pillan entero...

Dra - Hey!

Sev - niégalo.

Draco sabía que no podía, por lo tanto cambió de tema a las pociones, sabiendo que Snape también prefería hablar de ello.

𝐸𝑛𝑡𝑟𝑒 𝑃𝑒𝑟𝑔𝑎𝑚𝑖𝑛𝑜𝑠 𝑦 𝐶𝑎𝑙𝑑𝑒𝑟𝑜𝑠 ( 𝐷𝑟𝑎𝑚𝑖𝑜𝑚𝑒 )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora