.CASTIGADOS.

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—Capítulo 16:—

Sus pensamientos se nublaron y sus ojos se abrieron de par en par, Luffy estaba hay parado y quieto. Parecía una estatua sin vida, sus ojos parecían dos huecos bien abiertos mirando al suelo con inerte sorpresa; el choque ha su consciencia había sido tan impactante que su cerebro no sabía cómo reaccionar. Fue capaz de levantar la vista del suelo y fijo sus vacíos ojos hacia sanji. Quien lo miraba estático, en ese momento la mirada decía más que mil palabras juntas; Sanji, en un intento de que no se echará a perder todo. Decidio moverse rápido, tomo de un brazo a Luffy y lo jalo rápido hasta otra habitación donde no los pudieran escuchar. Lo sento sobre una cama y lo miro con desesperación.

—Tranquilo, tranquilo. Luffy mirame.—Sanji trataba de llamar la atención de Luffy, pero solo lo veía desbordar lágrimas silenciosas sin decir una palabra.—Hey, hey. Tranquilo. Luffy tranquilo el... El

—Murio... Ace está.

—No, no, no. No lo está, lo escuchaste ¿No? Puede que no haya sido a él, puede que esté vivo puede que...—Sanji no estaba seguro de lo que decía, solo queria que Luffy parara de llorar, ha esto se refería sabo al no querer contarle la verdad.

—Sanji...—Su voz salía apagada y ronca, su mirada era lúgubre y sus ojos no tenían brillo. Al rubio se le exprimió el corazón al ver esa imagen de Luffy. Desesperado por una salida optó por escuchar su corazón. Y en un impulso se inclinó sobre Luffy y lo besó.

Un beso lento y dulce, un beso donde la todas las emociones se combinaban y solo eran ellos dos. Luffy había dejado de desbordar lagrimas y sintió mas y mas el tacto de los dulces labios de sanji olvidando todo a su alrededor. Se sentía en paz al tenerlo entre sus brazos, o al menos olvidaba lo que lo calcomia

—Esta bien...—Dijo al separase, sanji miro a los ojos y con su mano limpio la húmeda mejilla con los rastros de sus lagrimas.—Todo está bien, confía en sabo. Confía en mí, tu hermano está vivo.

Luffy no dijo una palabra, obligó a sanji ha sentarse sobre su pelvis con las pies en los costados y abrazo su cintura de forma protectora. Desquito todo lo que sentía en una mordida hacia el cuello, clavo sus afilados colmillos sin paciencia mezclando esas despreciables emociones de querer destruirlo todo y absorbió la sangre del rubio entre sus brazos. Metió sus manos dentro del abrigo de sanji y con sus uñas araño su espalda sacando ligeros quejidos de dolor. Sanji quien estaba quieto con los ojos cerrados y cubría su rostro en el cuello de Luffy para tratar de calmar esos dolores que le proporcionada, estaba a punto de perder la consciencia. Había desperdiciado más sangre que nunca hoy

—P-para.—Suplico con la voz baja—He dicho que par—Antes de terminar la frase Luffy deshizo su agarre y con fuerza brutal tiro el cuerpo de sanji al suelo provocando un ruido sordo.

El chico estaba sumergido en todo lo que sentía  desesperación, odio, miedo y tristeza. Lo único que tenía a su disposición era sanji. Y ciego a sus acciones siendo controlado por sus emociones no le importo todo lo que hacia. Sentía la necesidad de que ese hueco que se había formado se llenara de inmediato, se sentía incompleto sin sus hermanos. Sin Ace

Volvió a atacar los labios de sanji metiendo sus manos dentro de su ropa para tocar su piel. Separo sus piernas y se posicionó entre ellas, no le dejaba ningún chance, sanji trataba de empujar su cuerpo; lamentablemente Luffy lo superaba en fuerza. Sus ojos estaban entrecerrados y las sensaciones en su cuerpo comenzaban a darle efecto.

—¡He dicho que pares!—Sanji libero una de sus manos e impacto una cachetada contra la mejilla de Luffy, quien no lo vio venir.—No me hagas esto. Tienes que... tienes que calmarte.

.LAS MASCOTAS DE SANJI.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora