.LAS MASCOTAS DE SANJI.

.EL OLOR DE LA SANGRE.

—Capitulo 8:—

Todos estaban sentados en la sala charlando tranquilamente mientras la mesa estaba llena de sus libros y cuadernos de apuntes. Era tarea. Aburrida y obligatoria tarea de la universidad, luffy y nami no solo vinieron a perder el tiempo.

—Sanji, ¿No, nos vas a contar? —Pregunto Nami al peli rubio. Quien la miro nervioso mientras una gota de sudor frío resbalaba por su frente.

—¿Q-que cosa?...

—¿Porque no has ido a la escuela desde hace días. Sabes que ya casi vamos para los finales cierto —Está vez hablo luffy

—Ehh-ha yo, pues tuve visita —Respondió, Sanji bajo sus manos a sus piernas. Apretando levemente la tela de su pantalón aún seguía con nervios, pues. Zoro y law seguían vagando por el segundo piso de la casa, sin sus collares puestos y con personas que no conocen de nada en la casa. Sin contar que aún no había sacado aquel par de perros que ellos querían matar.

Trago seco mientras escuchaba la conversación de sus amigos. Sanji solo miraba las escaleras, viendo si a ellos se les ocurría asomarse

—Sanji... ¡Sanji!

El rubio grito alterado y desconcertado, bajo la preocupada mirada de sus amigos, Luffy y Nami se miraron extrañados —Oye, ¿Estás bien? —Pregunto Nami

—¡Por supuesto!

—Creo que deberíamos terminar mañana— Opino luffy.

—¡Claro que no!— exasperó Nami —No crean que me lo dejarán todo a mi de nuevo— Reprochó ya que la última vez, Nami sola tuvo que hacer el trabajo de tres.

—Nami, tu celular está vibrando— Aviso luffy. La mujer miro su celular quien lo había dejado en modo silencioso antes de llegar. Lo tomo con sus manos y miro de que trataba

—Es nojiko, denme un segundo— Nami se levantó de la silla y camino hacia el sofá tirándose de senton mientras que con la mano acercaba el celular a su oreja.

—Sanji— Llamo luffy cuando Nami se había marchado por completo —Aquí... huele extraño.

Sanji se tenso al instante «¿El cadáver?... no, no puede ser» Sanji se carcomía la cabeza de pensamientos

—¿Me das algo de comer?— Pidió el chico sacando fuera de tema.

Asintió aliviado, agradecía que su amigo era un despreocupado y olvidadizo.

Sanji fue a la cocina para segundos después aparecer con un par de latas de soda y unas manzanas. Se las dejo sobre la mesa a luffy y se sentó junto a el.

—¡Chicos!—Llamo Nami llegando a ellos —Me tengo que ir, nojiko me necesita en la casa ahora— Dijo mientras tomaba sus cosas

—¿¡Ahora!?— Reprochó Luffy.

—Si.— Sopeso la peli naranja —Terminen lo que queda que es para mañana oyeron— Termino de decir dandole malas miradas.

Nami les dió la espalda y camino hacia la puerta —Hasta pronto nami— Se despidió luffy. Nami solo movió la mano dandole una última mirada y se marchó dejando "solos" a Sanji y luffy

—Terminemos rápido esto— Sanji tomo uno de las latas de soda que había traído y la destapó, pero justo al abrirla. Su pulgar paso muy cerca y muy rápido abriendo le una pequeña rajada —¡Auch!— Se quejo bajito.

—¿Te cortaste?..

—Si, pero no fue nada. Continuemos..— Después de ese momento Sanji no supo si era cosa suya o el ambiente entre luffy y el se había vuelto más denso, algo había cambiado ya que desde un rato luffy ya no le apartaba la vista de encima «ahora que» pensó. Sanji trago grueso y se digno a preguntar —Luffy, ¿Pasa algo— Fue lo único que se digno a preguntar el rubio.

Luffy lo miraba apacible, unos segundos en el aire después de su respuesta —Tu... ¿Que tipo de sangre tienes?— Sanji lo miro sin entender.

«¿Mi tipo de sangre?...» La sangre de Sanji siempre fue la sangre más extraña registrada en el casi todo el país donde vivía ya que casi el 5% de la población la tiene, por eso es tan valiosa para law y zoro. Ya que el tipo de hierro que contiene no se comprará ni con el uranio..( sinónimo ).

—Yo... Ehh...  Supongo que... No lo sé, ¿porque la pregunta?— Luffy solo quedo mirando a Sanji durante un largo instante, que a sanji se le hizo de lo más incómodo y extraño

—M-me tengo que ir— Luffy recogió sus cosas a la velocidad de la luz y con una rapidez increíble

—¿Que? no. ¡Oye espera!— Sanji le gritó cuando casi luffy cruzaba su puerta —No te puedes ir ahora, la tarea— Sanji se acercó a tomar a luffy del hombro, cuando en un rápido movimiento luffy lo tomo de la manga de su camisa y lo estampó contra la pared al lado de la puerta.

Ha unos escasos sentimientos de los labios de Sanji luffy suspiro sobre el, lo miro con una mirada que sanji jamás creía que se pudiera reflejar en su rostro. De apoco se acercó lentamente a su oreja, Sanji no supo que hacer cuando sintió su respiración chocar contra su piel erizando le todos los bellos del cuerpo.

—No te dejo seco ahora mismo... Si no fuera porque sería un desperdicio, no ver tu culo más seguido— Le susurro con un tono bastante grueso, lento y candente...  Sintió como se le hizo humo los pensamientos y como si su existencia se disminuyera a cero. Luffy paso lentamente su mano por su mejilla en gentil tacto, posando su pulgar en sus labios en un suave movimiento separando los levemente. Luffy se separó de su oreja viendo la sonrojada cara de Sanji, quien no hacía ni mínimo movimiento. Se acercó a su rostro hasta que que sus labios se  rozaron es un tierna caricia. El estómago comenzó a sentirse caliente de repente. Hasta que luffy se alejo de el

Tras mirarlo una última vez, luffy abrió la puerta y se marchó dando un portazo, al instante sanji se deslizó por la pared hasta llegar al suelo

«Pero que acaba de pasar» Pensó en anonimato «Pero que acaba de putas pasar»  

...

Al principio creyó que solo era una fachada, o una simple coincidencia que la sangre de su amigo huela tan bien, ya que nunca la había olido, tras seguir con la fachada de ser un estudiante "normal" con una vida "normal" en ese pequeño instante supo con certeza que la había cagado. Pero como no hacerlo si ese exquisito aroma de la sangre jamas probada  había inundado sus fosas nasales, aun recordaba lo que que le había dicho su hermano.

"—Luffy, nunca as probado ese tipo de sangre, pero de solo olerlo a distancia sabrás que es esa y créeme. Se te va a erizar hasta los pelos del culo, y vas a desear dejar seco por completo a la persona que lo tenga—" 

No sabes cuánta razón tuviste Ace. Pero sin embargo luffy no se atrevería a ello, ya que le había cogido cierto "cariño" a Sanji, pero no sé atrevería a matarlo. Sin embargo tendrá que arreglarse las con una detallada explicación de su comportamiento.

—Esto es un asco— Pronunció el peli negro mientras caminaba por la desolada calle —Ahora me dió sed—Volvio a decir frustrado. Como si fuera fachada del destino un hombre que pasaba hacia la dirección contraria de luffy apareció en su camino. Luffy recordó que le habían dicho que no matara ha humanos en la calle. Sin hacer caso,  dió la media vuelta caminado ahora detrás de aquel desconocido hombre que había tenido la mala fortuna de cruzar por aquel camino y encontrar a la persona equivocada.