Capítulo XX

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Lía

Presente

(2 meses y medio después)

Los rayos del sol derriten los carámbanos colgantes del techo. Gotean sobre la ventana dejando un rastro de agua sobre el, resbalando contra el cristal hasta desaparecer.

Paso mi mano en el vidrio frío, quito lo empañado que me impide ver el castillo a lo lejos; la antigua arquitectura, en donde en unas partes se acumula la nieve en diferentes zonas esperando desaparecer en su totalidad en unos días. Las puntas de las montañas están cubiertas por un leve manto blanco, así como hay restos en el suelo en pequeños grupitos junto a la hierva verde adornado de una que otra flor con escarcha.

Logro sentir la calidez de los rayos de sol a través de la ventana; ya extrañaba esa sensación. Pero el frío aún no ha terminado, no es tan crudo como la semana pasada pero aun así el aire frio de afuera hace que quiera seguir metida en la cama cubierta por muchas colchas.

Claramente no puedo darme ese lujo, trabajo es trabajo sin importar en la estación en la que me encuentre. Caminar por la nieve era un gran trabajo por las mañanas, también regresar por la tarde o noche era incluso peor. Muchas de las ocasiones mis zapatillas terminaban mojadas junto a mis pies y la falda de mi vestido.

Solo en pocas ocasiones cuando la tormenta era tan fuerte que ni siquiera se podía abrir la puerta, el rey tuvo "consideración" en algunos momentos dejarnos quedar a dormir en el castillo; en una habitación donde habíamos quizás unas 10 mucamas, durmiendo sobre mantas pero acompañadas por una chimenea que nos resguardaba de las bajas temperaturas.

"Keigo estaría muy molesto si se enterará"

—Keigo —digo entre un suspiro.

No dura mucho tiempo la vista que tengo del paisaje, ya que el vidrio se cubre de nuevo por el vapor del calor de mi respiración contra el frio aire que golpea afuera en la ventana.

Suspiro con cansancio mientras froto mi hombro tratando de quitar o calmar el dolor en ellos. Estos meses han sido mucho más difíciles de todas las maneras en las que se puede vivir.

Recibí una carta de la señora Smith días antes de que llegara el invierno, decía que mi hermano necesitaba cuanto antes el nuevo medicamento antes que empeorara según la última visita al doctor. La medicina cuesta más que mi salario, no me alcanza para comprarlo mensualmente y también para cubrir los otros gastos de mi hermano con los señores Smith; claramente sin contaren cosas para mí. Addie al verme tan mal me presto algo de dinero en mi desespero cuando le conté lo que sucedía; reuní lo suficiente para comprarlo, pero tengo que pensar que hacer para comprarlo para los próximos meses.

He sabido que su nuevo tratamiento le a caído estupendo; eso me da un gran alivio. Pero en otra parte no es el único problema. Para tener mas ingresos tuve que cambiar horarios de trabajo, hacer horas extras para mandar lo suficiente para Gil.

En si mi trabajo es agotador y con esto hace que mi cuerpo este mas cansado, mis horarios de comida han variado teniendo un gran descontrol alimenticio. En muchas ocasiones he comido entre el turno para tener algo en el estómago y no este retorciéndose de hambre. He comido tan rápido que no es sustentable y hay momentos en las que ni siquiera he comido para continuar mi turno.

Feather Crown || Takami Keigo (HAWKS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora