Un error de dedo podía costar muy caro.
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Cuando Jisung, stalkeando al popular influencer Lee Know, a quien consideraba su enemigo, dió click a seguir por un desliz de dedo, el Internet explotó con screenshots del suceso y se crearon cientos de te...
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Mierda, mierda, mierda, mierda.
La había cagado. En grande. Su maldito dedo había dado click en seguir mientras revisaba las redes de su mayor competencia. No se había percatado hasta unas horas más tarde, cuando, Hyunjin, su amigo, curioso de la razón tras ello, había preguntado por qué de la nada seguía a Minho.
Han había quedado perplejo. ¿Seguir a Minho? Imposible. Era incapaz de hacerlo, su orgullo se lo impedía. Y no era cuestión de solo su orgullo, había algo de Lee Know que no le gustaba. Tal vez aquel humor sádico y aquella sonrisa sarcástica que parecía divertirse a costa de los demás.
Bueno, en realidad, parecía que todavía no superaba como Minho se había comportado con él hacía dos años atrás. Pero aquello no importaba, su dignidad pública —y casi nacional—, (sin exagerar) estaba en juego, o al menos así era como Jisung lo veía.
Su celular vibraba sin parar, y estaba seguro que eran mensajes de su mánager exigiendo una explicación, de su equipo mediador o de las notificaciones de su cuenta que llegaban.
Nunca lo había pensado, pero ahora creía que Instagram era realmente aterrador.
Aulló de dolor, entremezclado con una emoción de vergüenza. Sí, probablemente estaba exagerando, pero era demasiada humillación para su pobre cordura. Estaba por llevar sus manos a su cabeza y echarse al piso a llorar cuando una almohada se estrelló sobre su rostro.
—¿Podrías, por favor, soltar tus gimoteos y sonidos de berrinche en otra habitación? —Cuestionó Hyunjin, alzando una ceja mientras estaba acostado en su propia cama. Su amigo lo había ido a visitar solo porque tenía curiosidad de su repentino follow hacia su mayor némesis. En resumidas cuentas, el rubio estaba ahí porque era un chismoso. —Y si quieres hacer algo productivo mínimo déjalo de seguir, solo has estado murmurando cosas inteligibles de rencor.
Jisung de inmediato se recompuso, y tomando la almohada del suelo se la aventó de regreso.
—Ahg, mierda. Es cierto. —Quiso estrellar su cabeza contra una pared. ¿Cómo era tan torpe para olvidar ese "pequeño detalle"?
En menos de un segundo desbloqueó su celular e ignorando los mensajes de su equipo mánager que llegaban uno tras otro, dejó de seguir a Minho. No lo admitiría frente a Hyunjin, pero más que la vergüenza y su propio orgullo temía más a la opinión pública respecto a lo sucedido.
—Oh, oh... —soltó el rubio en la cama, con un iPad en sus manos, realizando una mueca algo aterrada y sorprendida. —OH...
—Joder, deja de repetir esa exclamación, ¿qué sucede? —explotó Han, saltando sobre el colchón para observar lo que Hyunjin miraba con tanta atención.
—¡Ve esto, Hannie! —pegó el aparato en su rostro. Jisung lo alejó suspirando, mientras le echaba un vistazo a lo que su amigo mostraba. Eran titulares, muchos titulares. Han sintió su rostro desencajarse al leerlos.
"En realidad no se trataba de odio, era amor: Han Jisung empieza a seguir a Lee Minho..."
"Un amor unilateral: la celebridad más importante de Corea no le regresa el follow a su admirador"
"Han siempre pretendió odiar a quien en realidad era su novio solo para evitar rumores, ¡Observa este..."
Y ahí se detuvo, sin soportar leer más. Se sentía estupefacto, incluso un poco horrorizado. Antes de salir con Minho se casaría con un palo. Bueno, quizá exageraba, pero se entendía el punto.
—¡Dios, Jisung! La prensa y tus fans junto con todo el fandom de él ya se armaron toda una historia de amor de ustedes. No es taaaan malo. —Trató de convencerlo, dándole palmaditas en el hombro. —Pudo ser peor, la polémica está aceptable, un simple comunicado y listo, fin del rumor.
Han lo miró con horror, mientras se quejaba:— ¡¿Pero por qué él?! Pudo haber sido cualquier otra celebridad, ¡pero claro, tenía que darle click sin percatarme y empezar a seguirlo mientras lo estaba stalkeando! —Cuando se dió cuenta de sus palabras rió nervioso, dándose cuenta de su metida de pata.
Lo había olvidado... No le había dando todos los detalles a Hyunjin.
—¿Cómo que stalkeando? ¿Estabas viendo su perfil? —el rubio estalló a carcajadas y Jisung se sintió sonrojar.
—¿Qu-é, de qué te riés? Todos hacemos eso con los que nos caen mal. —Trató de enmendar, pero sabía que ya la había jodido cuando su risa continuó.
Todavía podía sentir en sus oídos el retumbar de las ruidosas risotadas de su amigo cuando anocheció, mirándolo con la nariz arrugada a su costado en la cama: el rubio estaba durmiendo con la boca abierta, dejando salir unos ronquidos. Jisung negó, sin estar realmente molesto. Solo estaba avergonzado.
Suspiró, recordándose que mañana no podría seguir evitando los mensajes de su equipo. Estaba dispuesto a dormirse luego de bostezar, cuando una notificación que no debió de haberse oído despertó su curiosidad. Bastó alargar el brazo hasta la mesilla de al lado para sostener su dispositivo y leer lo que había llegado.
Sintió sus mejillas enrojecer (de rabia) y soltando una palabrota maldijo a Minho.
En la bandeja de su celular, podía leerse claramente el nombre de dicho hombre, justo arriba de un mensaje que terminó siendo la cereza de pastel.
"Ey Jisung, ¿acaso te gusto?"
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¡Nueva historia minsung! Este fic lo llevo pensando desde hace ya unos meses y por fin me decidí por publicarlo. Tengo ya varios capítulos escritos, así que me emociona decir que tendrá horario de actualización y será continuo, wiii!!
nuevo cap cada lunes, espero les entretenga esta nueva historia <333 besitos
