Las primeras veces no son especiales (Activa).

Capítulo 3. Mi maldito primer beso.

MI PRIMER BESO:

"No sé en qué momento comencé a ser tan idiota e insegura... No sé cómo fue que me involucre con un cretino como tú."

EXPECTATIVA:

Me siento sola, jamás he tenido un novio, ni siquiera he tenido una plática real con un chico... Si he hablado con uno, no es tampoco como cosa del otro mundo, es solo que jamás he charlado con un chico y hemos entablado una conversación interesante... donde él termine pensando -¡Que gran chica!, me agrada- Eso no pasa cuando los chicos hablan conmigo. No soy buena con los chicos la verdad es que mis platicas no son del todo apasionantes.

Cuando tengo un chico frente a mí me siento muy nerviosa, pero a veces pienso que sería lindo sentir a alguien cerca... Alguien a quien poder abrazar en esos momentos donde la soledad viene a joder.

Solamente saludo a unos cuantos y les sonrió, eso es todo.

Me siento idiota, sin gracia, asquerosamente simple... pero con infinitas ganas de ser amada.

No soy suficiente para nadie, ni siquiera me considero bonita.

La posibilidad de que un chico se fije en mí parece es de una en un millón. La posibilidad de que un chico me besé es de una en un millón... pero de años.

Siento que me he perdido a mí misma, me la paso pensando en qué estará mal conmigo. Acaso soy lo que nadie está buscando o solamente aún no es mi momento. Jamás he besado a nadie, he imaginado tantas veces ese momento que solo puedo pensar que cuando pase será especial y viviré el momento más mágico, pero lo más importante es que mi primer beso será con esa persona especial... El chico de mis sueños... jamás olvidaré mi primer beso.

Dicen que cuando besas a la persona correcta nada importa porque esa persona te hace sentir segura, cómoda y despreocupada.

REALIDAD:

"Fuiste un error... caí en tus redes como caen todas las chicas inseguras, idiotas e ilusas."

La verdad es que no sé cómo carajos me deje llevar por ese momento pero así pasó.

Era un día como cualquier otro, decidí caminar por primera vez de regreso a mi casa después de clases... James ni siquiera se había aparecido por la escuela para recogerme, llevaba mucho tiempo esperándolo. Cada día era la misma mierda, estaba harta.

El día estaba nublado y solo me quedaba caminar sola.

Empezó a oscurecer y por un segundo decidí dar marcha atrás y pedir un aventón.

-Mi casa no queda muy lejos- pensé así que me vi obligada a seguir caminando, pues ya era un poco tarde para regresar... tardaría más tiempo y me daba mucho miedo subirme al coche de algún desconocido, así que seguí caminando. Conforme iba avanzando, temía voltear y que alguien estuviera siguiéndome.

La casas se veían más oscuras, las calles más vacías... trataba de no pensar en ello, sólo escuchaba el sonido de los autos al otro lado de la calle... Mis pasos eran rápidos, pero después de unas cuantas calles, empecé a caminar más lento, trataba de lucir y sentirme segura... Cuando de pronto noté que en la siguiente calle, frente a mí había un par de chicos, lucían mayores, al parecer habían estado bebiendo... no parecían buenos tipos. Seguí mi camino, intentando no llamar la atención de ninguno, camine lo más rápido que pude, cada paso se sentía inútil, mi corazón latía muy fuerte... Cruce por el frente de la calle sin mirar... hasta que los pase, no mire atrás a ninguno de ellos y al parecer ninguno de ellos tampoco había notado mi presencia.