𝐀𝐥𝐰𝐚𝐲𝐬 𝐘𝐨𝐮

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𝗖𝗔𝗣𝗜𝗧𝗨𝗟𝗢 𝗦𝗘𝗜𝗦 |Malditos Camarones!

  𝗠𝗔𝗗𝗗𝗜

No puedo negar que no me quería ir de la playa, pero bueno eso no es importante. Está mañana sentí como los chicos hablando de algo que no logré escuchar bien por estar con la puerta cerrada. Me había metido a bañar cuando no encontraron nada mejor que empezar a tocar mi puerta como si hubiesen esperado a que entrara al baño para empezar a molestar.

Salí de la ducha y abrí la puerta ahí se encontraba Bill apoyado en el marco d ella puerta.

—Dios mujer, porque te demoras tanto en el baño— dijo mientras rodaba los ojos.

—Por qué no entraste antes que yo lo hiciera!—

Fuí a mi cuarto a arreglarme pues íbamos a ir a comer a un lugar conocido. Me puse un top tejido de color verde lima con una falda blanca pegada. Me maquille un poco y me recogí el cabello pues si no moriría de calor. Alice entró al cuarto sin tocar como si no importara que pudiese estar desnuda, —Alice! Toca la puerta— le dije mientras la miraba. —Agh no es para tanto, mira cuál me pongo este o este— señaló dos tops iguales de diferente color.
—no son iguales?—
—No!— dijo mientras tiraba los tops a la cama.

—Pues el amarillo está lindo— le dije mientras me ataba los cordones.

—El rosa será!— dijo mientras daba una risa burlona.

Yo solo rodee los ojos y baje hacía la sala donde estaba Gustav peleando con Georg. —Me pisaste fuerte!—dijo Gustav mientras le daba un manotazo a Georg.

—No seas llorón, y fue sin querer!— le dijo mientras le devolvía el manotazo.

Era hora de irnos. Íbamos a ir en auto. Mala elección nos íbamos a asar tal como pollo asado tampoco era que tuviésemos mucho espacio, nos repartimos de la siguiente manera.

Georg manejaba con Bill de copiloto (como siempre)

Atrás íbamos Gustav en la ventana derecha, Alice al medio y yo sentada en sus piernas y a la izquierda iba Tom.

Olvide decir que estaba vestido con unos pantalones de mezclilla y una polera sin mangas. Se veía tan guapo como siempre. Ya me desvíe del tema.

Llegamos al lugar, era muy bonito su temática era bajo el agua. Empeze a ver el menú para mí mala suerte la mayoría de los platos tenían camarones. Olvide decir que soy alérgica a los camarones.
Encontré una pasta se veía buena así que la pedí.

Cuando llegó la camarera su vista se fue directamente a dónde Tom para variar. Yo solo desvíe la mirada hacía otro lado al fin y al cabo ya estaba acostumbrada.

Cuando llegó la comida a la mesa empezamos a comer. La verdad si estaba buena la pasta tenía buen ojo para escog- esperen un segundo de un momento a otro sentí una textura extraña en mi boca cuando derrepente me fijé que era un maldito C-A-M-A-R-O-N al parecer no tenía buen ojo para pedir pues no leí bien no traía mis lentes no me juzgen tengo miopía.

Dejé de comer y rezando por no haberme comido uno sin querer. No tenía nada más que hacer así que espere el postre.

Preguntarán que tiene de malo de comerme un camarón? La última vez que me comí uno me llene de ronchas y no son agradables pican como el demonio!