.｡⁠*ﾟ⁠+Nuestras historias.｡⁠*ﾟ⁠+🍃Sanemi Shinazugawa.🍃(Sanemi X Ti)

Capitulo 14: Algo de ayuda.

-Déjame ver si entendí. Shinazugawa invito a la belleza de Kasumi a cenar, pero el no tiene ropa elegante para la ocasión porque la llevara a comer a uno de los mejores restaurantes de Japón. ¿No se te ocurrió comprar algo antes?.- Uzui usaba un tonó algo arrogante, que a Sanemi lo sacaba de sus casillas.

-No se porque diablos le pedimos ayuda a... él.- Despectivamente miro Sanemi a Tengen, el pilar del sonido. Este solo sonrió y abrazo al pilar del viento.

-¡Claro que te ayudaré!.- Tengen con su sonrisa característica, abrazo al albino y alborotó el cabello blanco de este mismo.

-¡Ya! ¡Déjame! No me trates como si fuera tu hermano menor.- A Sanemi le fastidiaba la actitud que tenía Uzui hacía él, pero no era una persona que odiara del todo, de hecho, aquel chico de cicatrices le tenía mucho respeto al vistoso pilar del sonido.

-Vaya, lo malhumorado jamás se te quitará. Me sorprende que Kasumi Chan haya aceptado la cita. ¿Te gusta?

-Bueno...- Sanemi se sentía incomodo así que miro a Iguro Obanai, el cual alzo los hombros como si no le importara.- Que te importa. Si me vas a ayudar bien, y si no pues usare lo que tengo.

-Bueno, bueno. Ya no te enojes, Shinazugawa. Creo que tengo algunos yukatas que servirán para la ocasión.- Uzui se levanto y empezó a buscar entre su guarda ropa algo que le pudiera servir a su amigo.

-No tenemos mucho tiempo, ya se acerca la hora.- Murmuro algo malhumorado Iguro.

-No nos llevara mucho tiempo. Encontré muchos.- Tengen lucía emocionado, aunque Sanemi no se mostraba contento por aquel escenario.

Sanemi se cambiaba con las opciones que le trajo Uzui y obligo a los dos pilares que lo acompañaban a salirse de la habitación.

-Uy si, como si tuviera ganas de ver tus formidables músculos y tu gran...- Tengen se burlaba de Sanemi pero Iguro lo interrumpió.

-De seguro Kasumi si quisiera.- Ambos pilares se rieron y oyeron un "Cállense" dentro del cuarto.

Cuando Sanemi salió de la habitación después de una gran eternidad, ambos hombres lo juzgaron.

-No. El rojo no queda con el color de su cabello.

-Es muy chillón ese rojo, algo más opaco para que resalte tus ojos.

-Siguiente.- Ambos chicos dijeron al mismo tiempo, mientras que Sanemi ponía la cara más notoria de desagrado.

Se puso otro yukata y se preparo para otros comentarios.

-Uf, es un no definitivo. Odio ese color marrón para ti.

-Tal vez y si le pones un haori negro... Olvídalo, parece que se revolcó en tierra.

-Siguiente.

-¿Es enserio?.- Sanemi parecía no comprenderlos.

-No te quejes y entra.

De nuevo se coloco un yukata diferente, ahora de color morado.

-JAJA parece mujer. Una muy ruda.- Uzui quería estallar de la risa.

-Ese es bonito. A Tengen se le ve mejor, pero tu no eres Tengen. Así que... Siguiente.

-Los odio.- Sanemi volvió a entrar en la habitación queriendo matar a sus dos amigos.

Después de ponerse y quitarse la mayoría de yukatas de Uzui Tengen, quería quemarlos todos y olvidar esta situación tan humillante, pero sinceramente Sanemi si quería lucir presentable para Kasumi, era una situación demasiado rara.