la sangre había comenzado a correr por todas las cobijas y sábanas en la cama.
luzu abrió los ojos por el dolor, comenzando a sentirse mareado de repente. ¿habían entrado a casa de quackity a robar? ¿o quizá eran dream y purpled pensando en vengarse? su primer reflejo fue girar su mirada hacia su derecha, buscando a su ex novio en aquel lugar puesto que así habían dormido aquella noche.
su corazón comenzó a agitarse al no verlo a su lado pero casi podría jurar que este mismo se detuvo al mirar hacia el frente.
había un cuchillo clavado en su abdomen y el mango que sostenía este estaba en la mano de quackity. ¿estaba viendo bien?
quackity retiró su mano, dejando el cuchillo clavado y retrocedió un par de pasos, trastabillando.
— q_quackity...
el pelinegro levantó la mirada, observando la cansada y adolorida mirada de su ex novio que lo veía como si no entendiera nada de lo que estaba pasando. sus ojos se quedaron justo ahí, hasta que comenzó a sentir la sangre que comenzaba a gotear de sus manos hacia sus pies descalzos llenando la habitación.
dirigió su mirada a sus manos, abriendo los ojos con sorpresa y al mismo tiempo con miedo al darse cuenta de lo que estaba pasando.
su respiración comenzó a agitarse demasiado, caminó nuevamente hacia atrás y tomó una botella de vodka, la cual había tenido que vaciar casi por completo para poder animarse a hacer lo que en ese momento estaba haciendo que todo aquel alcohol desapareciera de su cuerpo.
bebió todo lo que quedaba en la botella de una sola, sintiendo sus ojos moverse rápidamente sin voluntad propia debido a lo mareado que se encontraba, nuevamente trastabilló, retrocediendo hasta topar con un mueble el cual cayó haciendo a quackity caer al suelo también.
— quackity, por qué...
la voz de Luzu resonaba en los oídos de quackity, haciendo que este comenzara a llorar.
sus manos se dirigieron a su rostro tratando de limpiar las lágrimas pero llenandolo de sangre en su lugar.
de inmediato se puso de pie nuevamente, tratando de dirigirse a luzu.
— quackity... respóndeme...
la mirada asustada de quackity no se despegaba de luzu, de su amado luzu quien ahora se encontraba agonizando en su propia cama. se dirigió a él, sacando el cuchillo de su abdomen y sentándose a su lado.
luzu se quejó por el dolor y posterior a eso por sentir la sangre que comenzaba a brotar de su cuerpo como si fuera una cascada.
quackity se asustó aún más.
él sabía que aquello podía pasar pero estaba tan ebrio que no se había dado cuenta que lo había sacado hasta que sus manos y piernas estaban totalmente cubiertas de sangre y ahora esta misma comenzaba a gotear al suelo.
— l_luzu, lo_lo remediare...
comenzó a tomar las sábanas, colocándolas sobre la herida para intentar presionarla pero luzu seguía retorciéndose de dolor. sus ojos estaban cerrados y se notaba el dolor que estaba sintiendo en sus jadeos y su mirada que poco a poco se perdía.
— Luzu, no te duermas, por dios. abre los ojos, lo siento, no cierres los ojos...
quackity seguía hablando mientras presionaba la herida pero las sábanas rápidamente seguían llenandose de sangre y absorbiendola mientras él seguía tratando de cambiarlas constantemente.
— no sé por qué lo hiciste pero... no puedo irme sin decirte que te amo, quackity...
el aludido de repente se dió cuenta que las lágrimas no dejaban de salir de sus ojos, trataba de limpiar estas para que no nublaran su vista mientras continuaba cuidando de la herida del más alto, pero era francamente inútil.
