Dust n bones

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Narra Izzy

No podía creerlo, no paré de fumar en toda la noche con lo que Isa me había declarado. Después de todo, no sabía si creerle y le había mentido. No amo a Ángela, la mujer a la que le escribí una canción no es ella, pero tampoco sé si confiar. Se nota que está celosa y no puede superarlo, pero aun así, fui grotesco y como a veces ella me llama: bruto.

Estaba estresado, me tomé de la cabeza y por un momento quise llorar, pero después me propuse llegar al fondo de esto y tal vez, solo tal vez, hacer lo que me dijo. Averiguarlo por mi propia cuenta.

No me gustaba pelear con ella, tenía miedo de que haga algo que no debía. Tal vez distanciarse de nuevo de nosotros o de ella misma. Me tenía preocupado. Ella no era una cualquiera, enserio que no lo era y eso la hacía aún más interesante e impredecible. Pero si espió a Ángela significa que hay algo que la llevó a hacerlo.

Miré el reloj y me di cuenta que la había echado en las peores horas, ya se habían hecho las cuatro y no esperaba a los chicos hasta las siete de la mañana.

Estuve irritado todo el rato, hasta que escuché una ambulancia acercarse con prisa, miré por la ventana y vi que siguió de largo. Estaba tan inmerso en mis pensamientos que no le di importancia.

Me terminé durmiendo en el sofá, en el incómodo sofá, en ese mismo en el que había acorralado a Isa de las muñecas y se sentía tan bien.

A veces quería ser Duff, a veces quería probar sus labios, a veces pensaba en ella de otra manera...

No encontré más salida, eran las cinco y media y aún seguía siendo de noche, me había despertado. Fui hasta mi habitación, busqué mi Mr. Brownstone y una sonrisa salió de mi rostro involuntariamente.

- Que hermosa eres...- Cerré los ojos y disfruté de la sensación hasta quedarme completamente dormido.

---

Las doce del mediodía y yo recién salía de mi cuarto junto a Slash, salimos al mismo tiempo.

- ¿Qué tal tarados? – Pregunté con un poco de indiferencia.

- Erin se lució ayer – Comentó Axl orgulloso.

- Sí, Erin y Ángela que quería venir a toda costa, pero "se tuvo que ir de repente". Me pareció raro. – Dijo Steven.

- Yo solo estaba concentrado en la chica de la esquina, a quien después me tiré, claro. – Sonrió orgulloso Mckagan.

- ¿Por qué Ángela quería venir? – Pregunté.

- Pensó que te estabas follando a Isa. Por cierto, ¿Dónde está? – Respondió Axl.

- Pelearon, se los escuchó incluso cuando yo estaba más dormido que un tractor. – Explicó Slash. – Tengo una resaca increíble. –

- ¿Y eso por qué? – Me preguntó nuestro baterista, refiriéndose a lo que Axl había dicho, un poco preocupado. Solo negué con la cabeza y el teléfono sonó.

- ¡Yo atiendo! Debe ser la chica de ayer llamándome, fue espectacular. – Duff se levantó de la silla. – ¿Hola? –

Narra Duff

No puedo negarlo, estaba feliz de que esta chica me llamara porque más allá del sexo, había sido bastante agradable y quería invitarla a una cita o algo por el estilo. Así que contesté gustoso.

- Del hospital, ¿es usted familiar de Isadora Voneiscu? – Preguntó una voz con un tono de seriedad.

- Sí, lo soy. ¿Pasó algo? – Pregunté bastante preocupado, mi tono de voz había cambiado por completo.

- Un intento de suicidio, si pudiera venir a verla se lo agradecería. Pregunta por un tal Axl Rose en realidad. Me dio este número. –

- Sí, ese soy yo. – Mentí – Ya mismo parto para allá, gracias. –

Colgué el teléfono y me quedé completamente impactado.

¿Intento de suicidio? ¿Isa?

No podía ser posible, ella nunca haría eso...

Al ver que yo no abría la boca y presumía sobre la llamada todos se quedaron callados.

- ¿Era tu prostituta? – Rió Slash.

- Isa está en el hospital. – Mis ojos comenzaban a sentirse débiles y de un momento a otro me ardían, no podía reaccionar.

- ¿Qué? – A Axl se le cayó la tostada.

- Vamos, mierdas, vamos. – Steven reaccionó más rápido que todos. Sin importar como estuviéramos vestidos, con pinta de drogadictos corrimos al hospital lo más rápido que pudimos.

Narra Izzy

Cuando Duff dijo eso, me quedé completamente helado. La sensación de que había sido mi culpa, incluso sin saber qué la había llevado ahí, me carcomió.

Todos nos levantamos sin importar qué, mientras corríamos le pregunté qué había ocurrido.

- Intentó matarse. Solo...no paren. – Algunos estaban ya cansados porque el hospital quedaba lejos, pero Axl y yo íbamos bastante adelante y muy rápido, solo quería llegar a ella, abrazarla, pedirle perdón, besarla...

Cuando llegamos a la entrada el rubio expresó:

- Axl, ella preguntó por ti. Pregunta por ella. – Él asintió. ¿Por qué había preguntado por él? Todos estábamos muy agitados.

- Su doctor está justo ahí. – Señaló la chica. Todos corrimos hacia él y preguntamos por ella.

- ¿Cuál de todos ustedes es Axl Rose? Está despierta, aunque en un mal estado emocional y si solo quiero verlo a él, solo puedo permitirle a él pasar. –

Mierda.

- Soy yo. Dígame donde. – El señor le señaló la sala y el piso.

- Ustedes pueden quedarse esperando. – Nos miró y se marchó. Lo último que vi fue a Axl correr más rápido que nunca, incluso empujando personas, subiendo las escaleras.

Después de un incómodo y eterno silencio en los asientos no pude contenerlo

- Esto es mi culpa, chicos. –

- ¿Qué dices? – Preguntó Slash

- Peleamos y...-

- ¿Qué carajo le hiciste idiota? ¿Eh? – Steven se había puesto violento, me agarró del cuello, pero los demás lo separaron de mí.

- No podemos pelear ahora, nos pueden echar. Vamos. – Reflexionó Duff.

Sin dar más explicaciones me quedé callado, al igual que todos. Solo quería estar en la habitación con ella y decirle todo lo que sentía y cuanto lo sentía.

Ahora me importaba una mierda Ángela.


𝐌𝐫. 𝐁𝐫𝐨𝐰𝐧𝐬𝐭𝐨𝐧𝐞 ༄ 𝗜𝘇𝘇𝘆 𝗦𝘁𝗿𝗮𝗱𝗹𝗶𝗻 ༄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora