Mini Fics | Drarry

04

︵‿︵‿୨♡୧‿︵‿︵
A C U T E
︵‿︵‿୨♡୧‿︵‿︵

En la fría habitación
hay un sentimiento de dolor

Harry miraba su vaso, hace a penas unos segundos el grueso vaso contuvo whisky, ahora solo quedaban los hielos que se derretían lentamente mientras Harry los miraba, tres hielos estaban unidos debido al frío que emanaban, pegados como si fueran uno solo contra el mundo, hasta que el pequeño hielo que estaba encima resbaló debido al calor y el agua en la que se estaban convirtiendo, así ese pequeño hielo que antes había sido una parte tan firme ahora se alejaba solo a la otra esquina del vaso para derretirse ahí, lejos de los otros dos hielos que permanecían unidos. La sombría expresión de Harry decayó nuevamente, el alcohol ya había subido a su cabeza cuando decidió que ya era momento de irse, los recuerdos invadían su cabeza con culpa, si tan solo él hubiera sido más valiente para detener aquella situación, pero nunca espero que algo que se veía tan inofensivo podía escalar tanto.

-¿Me traes la cuenta?-El Batista asintió rápidamente acercándose a la caja.

Todo se nublo y llueve ahora alrededor.
Esto no es vivir, la culpa no se ira.

Draco caminaba tranquilamente por los jardines de su mansión, su madre lo vigilaba paciente tomando una taza de té, una cabeza pelirroja irrumpió velozmente la tranquila imagen saltando con alegría hacia el rubio embistiéndolo con fuerza haciendo que cayeran al suelo entre risas de la chica y un asustado rubio que sucumbió a las risas de su amiga.

-¿Cuando llegaste?-Dijo Ginny con su aguda voz infantil aún encima de su rubio amigo.

-Apenas ayer, madre me a prohibido tener visitas el día de ayer debido a que recién habíamos llegado y quería tener un descanso apropiado del viaje.-La chica rodo sus ojos fastidiada por su respuesta dejándose caer sobre el cuerpo del niño como peso muerto, Draco ante el peso comenzó a moverse tratando de liberarse de aquel pulpo naranja que lo aplastaba.

Con sus dulces 10 años ambos niños siguieron jugando en el gran patio lleno de juguetes.

Llegada la noche, su madre les había ayudado a armar un pequeño campamento en la sala de la mansión, todo el lugar estaba cubierto de almohadas, cojines, mantas y juguetes.

-Draco, mi amor.-El niño salió del oscuro campamento de mantas, encontrando a su madre cargando un par de linterna y su proyector de estrellas que funcionaba como espanta cucos antiguamente, el rubio emocionado por la idea de su madre la ayudó a conectar el aparato para adentrarlo al campamento.

Cuando finalmente ya habían terminado de colocar todo en su lugar su madre se despidió de ambos con un pequeño beso en la frente junto a un "buenas noches niños" , ambos niños volvieron a meterse en su campamento felices de su esfuerzo, cada quien se sentó sobre su improvisaba cama que era un saco de dormir sobre colchonetas.

-Tengo que contarte algo muy MUY importante Gin.-Dramatizo el chico haciendo que la chica asintiese preocupada.

Draco se sonrojó sobre pensando si acaso era buena idea contarle aquello a su amiga, pero luego llegó a la conclusión de que si no podía contárselo a Ginny quien no era solo una amiga sino su mejor amiga entonces no tenía en quien más confiar, ella no lo juzgaría ni se reiría, respiro hondo reuniendo el valor ante una expectante Ginevra.