Editado el 8 de febrero de 2024.
guess who's back!!!
Addy.
—Señorita Addy, despierte. Es hora de que se vaya al aeropuerto —dice Sarah, nuestra mucama, mientras me sacude levemente. Suspiro pesadamente. Verdaderamente este era mi destino y no podría hacer nada para cambiarlo, Dios.
—Gracias —digo ya más despierta, pero aún así con los ojos cerrados. Puedo oír a Sarah salir por la puerta de mi cálida habitación.
Abro los ojos y trato de acostumbrarme a la luz del sol. Joder, que esto era una triste realidad.
Me siento perezosamente en mi cama, quito las sabanas y una ola de frío atraviesa mi cuerpo causando escalofríos. Tras quedarme pensando como idiota, analizo mi situación: estoy a punto de pasar las peores vacaciones de mi vida.
Después de haber tenido mil discusiones con mi padre, no me quedo de otra más que ir a su hotel en Los Ángeles.
Muchos dirían que es una exageración mi apatía ante este viaje. Sinceramente, no puedo sentirme tan siquiera un poco emocionada cuando ya tenía planeado ir a Londres con mi mejor amiga. Y debido a su falta de empatía hacia mi persona, ahora iré por décima vez a Los Ángeles, ¡qué emoción tengo! No hace falta hacer referencia a mi sarcasmo, claramente.
Cuando por fin logro pararme de mi cama sin ningún problema, decido tomarme una ducha larga para tranquilizarme y con la esperanza de que un milagro suceda en mi vida.
Mis nervios estaban de punta, nunca he sido buena para socializar con la gente, ni mucho menos con adolescentes de mi edad. Y por las amenazas de mi padre, temía lo peor. Estaba casi segura que él haría para que socializara, mi plan de quedarme todo el día en el hotel, se iba a escapar de mis manos.
Siempre he sido la chica dulce, pero tímida. Otra razón por la que no quería ir al hotel de papá. Generalmente él está arreglando sus asuntos y me deja sola, por lo menos en Londres estaría con mi mejor amiga.
Entiendo su punto, quiere que conozca gente y me haga amiga de alguien, pero nunca lo haré. Jamás ha sido mi punto a favor cuando viajamos juntos.
Busco entre las pocas cosas que me quedan ya que las demás están en mi maleta. Al final opto por una ombliguera blanca que dice "Bad Day" en negro; unos jeans de tubo color celeste; y como siempre, mis converse blancas. Mi segundo nombre es básica, efectivamente.
Ya cuando estoy vestida, vuelvo al baño. Tomo el secador y después de unos minutos mi cabello queda peinado y completamente seco. Agarro un poco de maquillaje y lo impacto a mi rostro. Cuando creo que estoy lista para mis muy aburridas vacaciones, tomo mi bolso para después tomar mis dos maletas, las saco de mi habitación y apago todas las luces, lista para dejarla casi 3 meses.
Bajo como puedo las escaleras, obviamente con muchísimo cuidado de no caerme, aunque no sería tan mala idea.
Sí, caerme y quedar en el hospital para no ir con mi padre a ese hotel...
Mhmm....
—Ni lo pienses —dice una voz masculina haciéndome sobresaltar.
Mi padre.
Bufo de una forma notaria sin miedo a que mi padre me reproche ante esas actitudes que pueden llegar a ser algo nefastas.
—Irás de todas formas cariño, viva, lesionada o muerta —se acercó a besar mi frente y bajó las escaleras, dejándome atrás, con un enojo notable en mi cara.
ESTÁS LEYENDO
Desastroso Verano (EDITANDO)
Humor¿Qué serían 6 chicos viviendo en un hotel? Yo te digo, puro descontrol. Addeline Hoffmann, hija del gran dueño de la cadena de hoteles "Paradise", va a parar en el hotel de Los Ángeles para pasar el verano. ¿El problema? Ella viene sola. Pero no es...