Desastroso Verano (EDITANDO)

Capítulo nueve: Día de shopping.

Editado el 29 de febrero de 2024.

Addy.

Después de haber devuelto los pollos a la granja, cada uno se fue a su habitación para poder descansar de la broma y todo que conllevó hacerla. Al final, Blake y yo quedamos solos.

Llegamos hasta el quinto piso y nos sentamos atrás de la puerta de mi habitación.

—Este verano está siendo único —Blake suspira y yo me quedo viéndolo.

—Sí, lo es —digo—. Creo que es el mejor verano de mi vida.

—El mío igual.

Blake y yo nos despedimos y cada uno se va a su respectiva habitación para poder descansar. Mañana iríamos a comprar los atuendos para el baile, y posiblemente sería el día más largo de mi vida porque Alice, Maddie y yo iríamos juntas. Esto significaba pasar horas en todas las tiendas. 

Me meto a bañar rápidamente para poder relajarme y dormir tranquila. Me recuesto en mi cama y sonrío como tonta recordando todo lo que he hecho con mis nuevos amigos. Aún me cuesta aceptar que tenía amigos y me parecía algo impresionante. Si le hubiera dicho a la Addy del pasado que no quería viajar que sí conocería a gente y se volverían así de importantes, no me creería. 

Wow, amo las vueltas que puede dar la vida.

***

Pasan las horas y sigo sin poder conseguir dormir. He dado miles de vueltas en la cama. La lluvia cada vez se hace más fuerte, y cuando estoy apunto de dormir me despierto exaltada por un trueno. Les tengo un pavor infinito, los odio. Quiero abrazar a alguien y después sentirme tranquila y segura.

Son las dos de la mañana y no hay alguien a quien pueda abrazar. Nunca en mi vida me había sentido tan sola, aunque siempre lo he estado, pero en realidad siempre estuvo mi mejor amiga, Kelsey. Sólo que ahora ella estaba en Londres y me daba mucha pena hablarle porque seguramente estaba pasando genial.

Vuelvo a cerrar los ojos con esperanza de que, pero un trueno me exalta demasiado haciendo que caiga de mi cama. Me vuelvo a levantar y sin más, tomo mi celular, una bata y me voy a la habitación de Blake.

Tal vez pueda ayudarme, aunque en realidad no sé en que, pero supongo que él puede hacerlo.

Blake.

Estoy durmiendo plácidamente hasta que unos golpes en la puerta me despiertan. Bufo enojado. ¿A quién se le ocurre tocar la puerta a está hora de la madrugada? Seguramente a un loco desquiciado.

Me levanto de mala gana porque interrumpieron mi descanso. Abro la puerta con todas las ganas de reclamar a la persona que me despertó, pero me encuentro con una Addy preocupada y se me pasa el coraje..

—Hola Blake... —dice tímida.

—Hola, Addy. ¿Qué pasa? —pregunto confundido—. ¿Todo bien?

Está a punto de contestarme, pero cae un trueno y veo como brinca toda angustiada. Ah, ya entiendo, miedo a los truenos.

—Le tengo miedo a los truenos y no puedo dormir, ¿crees que pueda dormir contigo? —pregunta tímidamente.

Cae otro trueno y ella se lanza a mis brazos, puedo decir que estoy muriendo de ternura.

Viéndola tan inocente es verdaderamente tierno.

—Pasa —digo cuando ella se separa de mí.

Por la luz de la luna, puedo nota del rubor en sus mejillas. Dios mío, ¿por qué es tan adorable?