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Había costado demasiado trabajo encontrar a Baekhyun, Chanyeol pensó que eso no había sido para nada divertido, por lo regular ni buscaba a sus viejos amantes, ellos lo buscaban a él, pero ese omega tenía más que razones para no volverse a aparece...

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Había costado demasiado trabajo encontrar a Baekhyun, Chanyeol pensó que eso no había sido para nada divertido, por lo regular ni buscaba a sus viejos amantes, ellos lo buscaban a él, pero ese omega tenía más que razones para no volverse a aparecer, Baekhyun le había robado mucho dinero en un solo movimiento, Chanyeol se sentía como un tonto por haberse dejado llevar por una cara bonita, ahora mismo estaba viendo su realidad.

Baekhyun no tenía ni un solo centavo en el banco incluso después de haberle robado todo ese dinero en una valiosa joya de colección, estaba endeudado en todos lados y había gente que seguramente iba a comenzar a buscarlo para darle una paliza, sin embargo, no tenía ningún otro cargo en su contra, tenía un expediente muy limpio que demostraba que era un buen ciudadano a pesar de todo, no tenía problemas con nadie. A su nombre, no tenía nada, pero Chanyeol había descubierto que vivía con su madre, una mujer llamada Nara Byun, que parecía no tener trabajo desde hacía unos meses, al mismo tiempo que las deudas de Baek comenzaron a crecer.

-No trates de salir corriendo, hay más autos estacionados alrededor.- dijo Chanyeol, cruzándose de brazos mientras Baekhyun aun estaba afuera de su auto, mirándolo como si se fuera a desmayar, Chanyeol lo estaba mirando mal de reojo, al ver sus tenis sucios y rotos, su pantalón de mezclilla roto de todos lados y manchado de un poco de pintura, llevaba una sudadera que tenía pelusas debido al uso. Chanyeol frunció los labios al ver el cabello desordenado de Baekhyun. -¿Cómo es que te ves tan diferente?-

Baekhyun estaba sudando frío, jamás pensó que volvería a ver a ese alfa de nuevo, miraba de reojo, como queriendo comprobar si era verdad que había otros autos por ahí, pero en realidad no podía ver nada, esa zona era industrial, no había mucho alumbrado, por eso era que antes no había visto el auto en medio de la oscuridad, Baekhyun tuvo mucho miedo, no podía decir nada, incluso si hubiera podido salir corriendo, sus piernas no le respondían.

-¿No me vas a decir nada?- preguntó Chanyeol y Baekhyun solo tragó más grueso. -¿Sabes que dimos con el vendedor al que le diste ese collar?- Baekhyun no estaba seguro de nada, estaba demasiado confundido, pensó que JongDae aún no vendía nada de eso, porque nunca hablaron de más dinero, se suponía que tendría una diferencia, pero se sentía avergonzado de eso incluso en esos momentos.

No se dio cuenta cuando Chanyeol salió de su auto, rodeándolo para poder pararse frente a él, Baekhyun se sintió intimidado con su gran presencia y solo sentía que se hacía más pequeño, tenía que salir corriendo de ahí, pero no era posible, vio como algunos de los hombres con los que trabajaba, se asomaban para ver qué ocurría, no porque les importará él, sino porque eran demasiado entrometidos, por lo que Baek se sintió muy mal, pensó que todo el mundo sabría que era un ladrón y quizás esa ni siquiera era la peor parte.

-A quién sea que se lo hayas dado, eres un tonto, lo puedo recuperar por una milesima parte de lo que en realidad vale, pero yo no voy a pagar por eso, es mejor que me des dinero ahora o te va a ir muy mal.- dijo Chanyeol y Baekhyun abrió mucho sus ojos, claro, eso era lo que quería, dinero, al final siempre se trataba de eso, pero Baekhyun no tenía dinero, no tenía dinero en casa, ni tenía dinero encima, no tenía nada y pensó que quizás eso no era lo que Chanyeol iba a querer escuchar.

El diamante de ParkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora