Capítulo 14☆

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Mi mamá entra a mi cuarto y me levanta porque quería que la ayudara con la casa, intento abrir los ojos pero me pesan demasiado, tengo mucho sueño, me levanto de la cama y voy hacia el baño, mientras camino puedo tambalearme para los lados.

Me coloco cualquier ropa y voy a ayudar a mi mamá, al rato se levanta Javier y va hacia la cocina a buscar algo para desayunar, me da unos buenos días entre dientes y así mismo se los devolví.

Con la misma vuelve a dirigirse al cuarto y minutos después vuelve a quedar dormido.

Ya era la 1:00 de la tarde, Javier se levanta muy hambriento por lo que decide dirigirse a mi pidiéndome que le lleve su almuerzo al cuarto, así que lo preparo y me dirijo a la habitación.

Javier: Vamos a dar un paseo.

Dafne: Hoy no puedo, pero...¿puede ser mañana?

Javier: Verdad, se me había olvidado que hoy viene tu amiguito, -Dice medio envidioso.

Dafne: Si vas a empezar me avisas.

Javier: Toma el plato que ya perdí el apetito, -Dice de mala gana.

Javier resopla y se vuleve a tumbar en la cama y se vira.

Salgo del cuarto super enojada, mi sangre esta hirviendo , tiro el plato encima de la mesa y mi mamá logra escucharlo y me pregunta qué había sido, le dije qué solo se me cayó mientras lo lavaba.

Lucas...

Ya son casi las 3:00 , tengo que ir para casa de Dafne, me preocupa quedar en ridículo ante ella , me consideraba duro para entender algunas cosas de matemática, esperaba a que Dafne tuviera pasiencia conmigo, porque la iba a necesitar, pero no parecía ser una chica mala, su personalidad dulce me generaban confianza.

Por una de las cosas que escogí a Dafne, fue porque en alguna de las clases de mate, podía ver como la profesora la felicitaba por tener todo bien.

Dafne...

Suena el timbre de la puerta y voy a abrir:

Dafne: Hola Lucas, pasa toma asiento.

Lucas: Muchas gracias Dafne.

Dafne: ¿Quieres algo de tomar?

Lucas: Solo un poco de agua.

Fui le busqué un poco de agua y se la traje, me dio las gracias nuevamente.

Y bueno, empezamos ya, -Le dije a Lucas, él respondió, -Sí ,cuándo quieras.

"Si, cuándo quieras", pasa Javier por detrás nuestro y repite en forma de burla la frase que Lucas me había dicho.

Dafne: Disculpalo Lucas , acabado de levantar en muy gracioso.

Javier: No estoy acabado de levantar, llevo un rato despierto.

Le hecho una mirada amenazadora y a la vez le digo a Luc que comencemos.

Después de explicarle todo con lujo y detalle a Lucas, le di algunos ejércicios para que los resolviera y ver si aprendió algo.

Me acerco un poco a él para revisar lo que tenía hecho, -Muy bien Lucas, lo tienes todo bien hecho, sonreí un poco , me dijo, -Oh dios, no lo puedo creer, lo hice.

Javier suelta por su boca, -Bueno ya han terminado entonces, ya te puedes ir Luquitas.

Javier!! , ya basta, -Dije furiosa.

Lucas me dijo, Dafne tranquila, ya aprendí bastante, ya es hora de que me vaya.

Acompañé a Lucas a la puerta y le pedí perdón por el comportamiento de Javier, era muy celoso, Lucas me entendió perfectamente y me dijo que no pasaba nada.

Al entar a la casa le dije a Javier:

Dafne: ¿Pero qué te pasa?

Javier: Aún así me preguntas.

Dafne: Sí, porque no sé a qué se debe tú mal comportamiento con un chico qué obviamente no te ha hecho nada.

Javier: Por favor Dafne, es obvio qué le gustas.

Dafne: No, no le gusto, son ideas tuyas, - Digo exasperada.

Javier: ¿Cómo es qué no lo vez?. Ha estado intentando coquetear contigo todo el maldito rato.

Dafne: Eso no ha sido así, solo le enseñaba porque no sabía.

Javier: Si si, ya.

Dafne: Sí, y el único qué le ha estado mirando furioso y con mala cara todo el rato has sido tú.

Javier: ¿CÓMO DEMONIOS NO VISTE COMO TE COQUETEABA EN MIS NARICES? ,- Grita.

Dafne: SOLO SON TUS MALDITOS CELOS, - Vosifero,- y que sea la última vez que me gritas.

Javier: Pero no entiendes , mierda.

Dice mientras le da un puñetazo a la pared, lo que ocasiona que me sobresalte. Me paro de el sillón y lo encaro.

Dafne: Escúchame bien porque no lo pienso volver a repetir. Aquí el único que se está dejando llevar por los celos eres tú, trataste mal a un chico que no ha hecho nada ni tiene culpa de nada, viste que tenía problemas y en vez de ayudarme a explicarle solo te sentaste a mirar, cuando podías ser amable, me reclamas como si yo hubiese hecho algo o tuviese la maldita culpa de algo. -Hago una pausa y continuo, - Tú no eres así o no desde que estás conmigo, así que ahora por favor vete, necesito pensar.

Javier: Dafne, yo... lo siento, sí, perdóname.

Dafne: No Javier, tienes que pensar en que tus actos traen consecuencias y no todo se arregla con un perdón.

Camino hasta la puerta de la casa, tomo el manubrio y la abro.

Dafne: Por favor, vete, -Trato de escucharme fuerte, no puedo quebrarme delante de él.

Camina hasta donde estoy, se para delante de mí, me mira suplicante pero no cedo.

Javier: Lo siento, -Susurra antes de irse y yo cierro la puerta.

Me arrecuesto a ella y pienso en todo lo qué acaba de pasar, no reconozco a Javier, literalmente lo desconozco, me da miedo que se vuelva una persona agresiva y todo por sus idiotas celos sin sentido alguno.

Llega la noche y no tengo señales de Javier , no me a escrito, ni me a llamado, supongo que sigue enfadado, yo tampoco pienso llamarlo ni nada , el hizo las cosas mal y debe de venir y arreglarlas conmigo.

Estoy algo dolida, me duele todo lo que está pasando y solamente de pensar que por primera vez Javier me alzo la voz me destroza el alma, temo que nuestra relación se termine por cosas sin sentido.

Me siento en la cama, y miro hacía el techo ,le doy vuelta al asunto en mi cabeza, y me pongo a pensar que hoy me corresponde dormir sola, acompañada de la soledad y sin alguien que me abracé y me acaricie.

Prisioneros del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora