Carta a Lucifer XXXVII

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Despreciable Lucifer:

Tu mirada fija en el desastre en la cosina, una suave sonrisa en tus labios. Mirarte fijamente y luego fingir demencia ante tal derroche de poder de mi parte, devolviendo la sonrisa.

—Tenia hambre...

Una risa broto desde tu pecho, te acercaste lentamente hacia mí. Ofreciste tu mano, si no queria levantar sospechas, debía tomarla sin chistar. Colocando esa mascara de sumisión, esperando a que funcionará.

—Bueno, no era de mis favoritos.

Bromeaste observando los despojos de lo que alguna vez  fue un diablillo, llevaste ambas manos a mis mejillas. Limpiando algo de la sangre con tus dedos enguantados , deslizando esa alargada garra por la comisura de mi labio inferior. Sonreí siguiéndote el juego.

Recuerdo tomarte de las manos y arrastrarte a la ducha, aparentando una normalidad que no habia. Las manos ardiendo y toda parte del cuerpo que tuvo contacto contigo esa noche.

Gozar un poco de los actos carnales, saborear el deseo de tu boca y hacerte olvidar cualquier cosa despues de poner un pie fuera del comedor.

Te detesto, Lucifer.

No hubo preguntas, tampoco es como si estuviera dispuesto a responder.

Con el pasar de los dias, la trampa estaba puesta con la ayuda externa de Husk, niffty y Ofelia. El plan sin retorno y yo no podia estar quieto de la anticipación.

Por otra parte, las lluvias azotaron el anillo del orgullo. Apenas socavaron los planes, un diluvio no era freno suficiente. Pasaron dias así, dias en los que note la presencia constante de ese tal capitán. Me lo llegue a encontrar y en una mascara de cortesía, entablamos una conversación.

Fue lo mas insignificante, de lo contrario la recordaría.

Llendo por los pasillos con una naturalidad ensayada, en dirección a tu despacho. Aprovechando que a esta hora estos rumbos son poco concurridos, no tuve mas complicación y entre a la estancia. Sin perder mas tiempo comenze la búsqueda de un par de papel de suma importancia que iba a necesitar.

Recargado contra el escritorio, movi todo buscando esa carpeta de papeles. Revisé entre tus cajones hasta encontré lo que hacia falta. La carpeta desapareció en un movimiento de mi mano.

Con prisa cerré los cajones, deje cada cosa en su lugar con sumo cuidado. Un fuerte presentimiento me obligo a quedarme, como si las sombras que me servían. Adquirieran pesó repentinamente, mirando fijamente uno de los cajones que aun no cerraba.

Me quedé a buscar mas haya de lo que ya habia descubierto.

Dos boletos de acensor y una carta del médico.

Me hicieron sentir un vértigo terrible...

Como si el suelo se hubiera abierto bajo mis pies y tragado al vacío extenso, los boletos no tenian fecha. Pero la carta del médico era aun mas alarma.

Venia acompañada de un acta de defunción, una aún en limpió. La carta tocaba la muerte de mi bebé, también sin fecha. Supongo que los vacíos serian llenados, una vez llevado a cabo el plan.

Estaba por cerrar el cajón, cuando de reojo leí mí nombre. En un sobre blaco, bien escondido. Pude reconocer la letra de inmediato, la tome entré mis manos u la leí. Mi corazón dio un salto al vacío al saber que Rossie estaba bien.

Su caligrafía no era la misma, fue escrita con prisa y no tenia mucho pulso en algunos parrafos.

La fecha es de hace dos meses...

Después del incidente en la casona, a pesar de la tortura. Logró escapar, tardo en sanar gran parte de las heridas. Permaneciendo escondida hasta encontrar la forma de ayudarme.

La encontró, jamas recibí su carta y ahora su destino es incierto.

No podia ser, ¡No podia ser! ¿Como es que esto llego a tus manos, Lucifer?. Lo único que ahora rondaba por mi mente esa la imágen de Rossie siendo emboscada en el lugar de encuentro.

El terror ganó la batalla, dejé el cajón tal cual estaba y lo cerré, salí de tú despacho y me aleje lo mas posible. Aun si solo me encerré en la habitación, destroce un peluche conteniendo la ira. No se como, ni cuando.

Pero en algún punto estaba llorando en tu regazo.

-Alastor T.R.D-



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•Notas del autor con la percepción de la realidad bien alterada:

•Y que chingue a su madre, Lucifer putOOOOOOO. Arre, se enojaba y eso que era el autor.

•Le admi anda creativo, primer aviso. Prepárense para el final.

•No olviden tomar awita, cuidense mucho y chao.

Atte: Mr. Radio Demon

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