‧ʚ💮✦﹕Petalos ruby┆・ [Wildchoco]

•[Conocerte es dulce]•

★

[Dark Cacao kindom]

Era una madrugada fría, en la que el joven heredero de 17 años del gran reino helado se subía a un carruaje al lado de su padre.

-"Iremos al Hollyberry por una semana. Dark choco debes comportarte correctamente y seguir las indicaciones que te den ¿Entendido?"-
Habló Cacao, con su tono fuerte y demandante.

-"Si padre, entendido."-
Respondió, Dark choco se veía algo adormilado aún por lo que no paso mucho para que cerrará los ojos y se durmiera.

Ni bien los primeros rayos de luz aparecieron Dark choco empezó a despertarse algo desorientado por toda la luz y el repentino calor de el lugar.

-"¿Ya llegamos?"-
Preguntó un tanto atorpecido mientras tallaba uno de sus ojos.

-"Si, pronto llegaremos al castillo, arregla tu cabello, estás despeinado."-
Ordenó Dark cacao seriamente.

El chico hizo caso y arreglo su cabello lo mejor que pudo, pero seguía con algún que otro pelo revuelto, por lo que Cacao termino ayudándolo, como casi siempre hacia cuando se trataba del pelo de el más joven.

Al llegar el de ojos rojos casi saltaba del carruaje al ver el gran castillo, Cacao por su parte bajo más calmado y coloco una pequeña sonrisa al ver qué su mejor amiga de aproximaba a las prisas y con una gran sonrisa.

-"¡Dark cacao! ¡Mi gran colega de toda la vida! ¿¡Cómo has estado grandote!?"-
Exclamó felizmente la mujer pelirrosada abrazando a Dark cacao con fuerza, casi levantando al mismo del piso.

-"Muy bien Hollyberry, gracias a los dragones muy bien."-
Respondió Cacao a duras penas, pues el abrazo de la mujer lo dejaba casi sin aire.

-"¡Santas bayas! ¡Dark choco que grande estás!"-
Dijo la reina y también le dio un abrazo al chico, a este si lo podía levantar perfectamente.

-"Jaja, hola tía Hollyberry."-
Saludo choco riendo un poquito.

-"¡Por mis bayas! ¡Aún me acuerdo cuando era un principito!"-
Habló de nuevo la mujer observando al muchacho y teniendo sus manos en los hombros de este.

-"Parece que hubiera sido ayer ¿No?"-
Dijo Cacao y por primera vez en todo el día había reído.

-"Si, valla que si."-
Dijo Hollyberry con su gran sonrisa.

El más joven solo se quedaba callado con una sonrisa en la boca, el jovencito era muy alegre, más viendo al cascarrabias que tenía de padre.

-"¡Bueno! ¡Ya pasen! Tienen que acomodar sus cosas ¡La fiesta de bienvenida será en unas horas!"-
Exclamó Hollyberry, denotando alegría.

•[Horas más tarde]•

El joven príncipe estaba en el jardín de el palacio, jugando con las pequeñas princesas del reino, era por así decirlo el primo mayor, y aparte, le encantaba pasar rato con sus primitas, sobretodo cuando jugaban a las atrapadas.