Falling For my Boss (TRADUCIDA)

21

T/N'S POV

Apenas me he despertado cuando recibo una llamada. La voz de Alex viene a través del altavoz mucho más fuerte de lo que debería ser a esta hora de la mañana.

— ¿Vas a volver a casa alguna vez? — Pregunta — Porque si no, me voy a comprar un gato — Sabe que soy alérgica, así que espero que solo esté siendo dramático.

— Estaré en casa esta noche, ¿de acuerdo? — Susurro, tratando de no despertar a Hailee. Se mueve en su sueño a mi lado, y todo lo que quiero hacer es volver a meterme en las mantas y acurrucarme con ella.

— Has estado de vuelta en Los Ángeles durante tres días y aún no has vuelto a casa. Taylor ha estado durmiendo aquí esperando verte.

— ¿Qué? — Me levanto de la cama y salgo sigilosamente por la puerta — ¿Qué quieres decir con que ha estado durmiendo allí?

— Queríamos sorprenderte cuando llegaras a casa. Pero no, quieres pasar cada momento despierta con Hailee; ¿quiénes somos nosotros para detenerte? — Suena realmente enojado. No me di cuenta de que me echaban tanto de menos.

— Estaré en casa esta noche, Alex. Lo juro — Empiezo a prepararme mentalmente para decirle a Hailee, sabiendo que me va a dar ojitos de cachorro y me va a pedir que la lleve conmigo. Y probablemente diga que sí.

— No la traigas contigo. No quiero escucharlas en la cama juntas — Me advierte. Mierda.

— Está bien, no lo haré. No puedo prometer que no hablaré de ella constantemente.

— Ugh, la fase de luna de miel — Se queja — Estoy bromeando. Me lo esperaba. Solo que esperaba que fuera tres días antes.

— Ya lo tengo. Te veré esta noche. Adiós — Cuelgo.

Busco en la cocina, reuniendo cosas para preparar el batido pre-entrenamiento de Hailee. Desde que volvimos, me he levantado antes que ella para hacerlo, y mientras ella hace ejercicio, hago el desayuno y el café.

Después de revisar mis correos electrónicos, por supuesto. Ha sido realmente agradable estar aquí, honestamente. Estoy a punto de volver a la habitación cuando Hailee asoma la cabeza en la cocina.

— ¡Hola, cariño! — Canta ella — ¡Buenos días!

— Buenos días para ti, Preciosa — Le entrego el vaso con su batido y le doy un rápido beso — Estaba a punto de ir a despertarte.

— Gracias — Ella toma un sorbo y gime — Dios, ¡eres tan buena en todo!

— Lo intento — Le guiño un ojo y me excuso para vestirme y prepararme para el día.

Cuando vuelvo a la cocina, Hailee ya se ha ido, dejando su vaso vacío en el fregadero. Reviso mis correos electrónicos en el teléfono y luego comienzo a preparar el desayuno.

Estoy sentada comiendo cuando Hailee regresa. Su piel está brillando de sudor, lo que me hace sonrojar.

— ¿Fue bueno el entrenamiento? — Le pregunto mientras se sienta conmigo.

— Muy. Ahora estoy completamente despierta — Comemos en silencio por un rato antes de que ella pregunte — ¿Qué tengo planeado para hoy?

— No mucho, la verdad. Almuerzo con Griffin antes de su carrera esta tarde.

— ¿Vas a venir, verdad?

— Tenía pensado hacerlo, sí.

— ¿Como mi novia o como mi asistente? — Ella sonríe con picardía.

— Bueno, como no me pediste específicamente que viniera, iba a hacerlo como tu asistente — La molesto, y ella hace un puchero.

— Pero, la Asistente T/n se mantiene alejada de mi entorno a menos que se la llame. ¡Quiero que estés cerca!

— La novia T/n, sin embargo, no atiende todas tus necesidades — Apoyo mi barbilla en mi mano y le sonrío, levantando una ceja — Pensé que te gustaba eso.

— Hay, eh, otras ventajas de ser novia T/n — Ella se acerca para besarme, lento y sensualmente.

— Ten cuidado, Hails, ahora estás pisando terreno peligroso — La molesto cuando se aparta.

— ¿Peligroso de qué manera?

— Sigue besándome así y no llegarás para nada al almuerzo — Me inclino de nuevo hacia ella, pero justo antes de que nuestros labios se encuentren, me levanto para llevar los platos al fregadero. Hailee niega con la cabeza.

— Promesas, promesas.

HAILEE'S POV

Griffin mejor gana esta carrera. T/n está sentada a mi lado, y me encantaría tener una excusa para levantarme y abrazarla en este momento.

Me sigo diciendo a mí misma: ya casi es hora. Solo espera hasta que vaya al programa de Fallon, y anunciaré nuestra relación al público. Pero maldición, se ve tan sexy con su camisa de seda abotonada, y solo quiero tomar su mano o besar su mejilla o algo así.

Me inclino para susurrarle al oído, disfrutando del aroma de su perfume mientras estoy tan cerca de ella.

— Veamos una película esta noche — La idea de acurrucarnos en el sofá con un tazón de palomitas, emocionadas por ver una película, pero terminar inevitablemente ignorándola para besarnos, me pone nerviosa. Ella inhala rápidamente.

— No puedo — Me mira apenada — Le prometí a Alex que volvería a casa esta noche.

— ¿Cuándo hiciste eso? — Hago un puchero ligeramente.

— Esta mañana. Está realmente enojado porque aún no he vuelto a casa — Sus ojos me suplican que no me enoje, y no lo estoy, pero igual le hago un poco de broma.

— Maldición. Tenía planes para ti — Comienzo.

— Lo siento, Hails — Dice. Me inclino de nuevo hacia su oído.

— Iba a llevarte a la encimera de la cocina y hacerte mía — Bajo la voz, sabiendo que eso la excita.

— ¡Hailee! — Me da un golpe en el brazo, sorprendida, y cruza las piernas — Jesús — Murmura.

Justo en ese momento, comienza la carrera.

T/N'S POV

Llegamos a la casa de Hailee al principio de la tarde, y en cuanto entramos, la empujo contra la pared, con mis manos firmes en su cintura — Tienes que parar — Le digo mientras la miro de arriba a abajo, y mierda, está tan sexy.

— ¿Parar qué? — Pregunta, fingiendo inocencia. Le lanzo una mirada, y ella misma responde — Oh, ¿parar de excitarte en público? No, gracias — Ella agarra mis caderas y me acerca más — Entonces no estarías haciendo esto.

— Solo cállate y bésame, provocadora — La miro fijamente, y ella muerde su labio — Por favor, ¿antes de que tenga que irme? — Añado, haciendo ojitos.

— ¿Puedo ir contigo? — Pregunta, mientras una de sus manos acaricia mi mandíbula, inclinando mi rostro hacia ella. Oh, estoy en problemas.

— Lo haría, pero — Vacilo — Alex me pidió específicamente que no te llevara.

— ¿Por qué? — Y ahí se va toda la tensión sexual que habíamos construido. La mano que estaba en mi mandíbula cae y sus cejas se fruncen.

— Me extraña, no sé — Suspiro — No quiere que esté pegada a ti y lo ignore — Admito.

— Supongo que tiene sentido — Acepta, volviendo a acercar su mano a mi rostro — Aunque te voy a extrañar

— Estaré de vuelta mañana, drama queen — Ruedo los ojos y le sonrío.

— Bésame — Me jala hacia ella y me besa suavemente — Sal de aquí antes de que te secuestre — Bromea, apartándome suavemente.

— Te veré por la mañana, Hails — Agarro mi bolso y las llaves antes de detenerme justo antes de la puerta — ¿Un último beso? — Pregunto, y ella accede.

— Hasta mañana — Dice, y toma a Martini del suelo — Tendré que abrazar a Teenie para consolarme.

— ¡No olvides a Brando! — Le grito por encima del hombro mientras me dirijo al coche.