Fix me: Sun and Moon

Después de la competencia

Hola, holaaa! estoy de vuelta con otro cap, espero les guste. Intentaré actualizar un poco más seguido y, desde ya, los leo en los comentarios : )

Nat caminaba por el pasillo en dirección de la habitación de las chicas, tocó desde afuera pero nadie respondió, por lo que intentó abrir la puerta que para su sorpresa no tenía llave. Camino hasta adentro y cuando alcanzó a ver una de las camas de la habitación, no pudo evitar enternecerse ante aquella escena, Mati prácticamente parecía una niña pequeña aferrada a Eve, quien la abrazaba mientras dormían.

Nat hubiera deseado no interrumpir aquel momento, pero se les hacía tarde, por lo que decidió despertar a Eve moviéndola un poco. - ¡Oye Eve! ¡Despierta! Se nos hace tarde. – Dijo en voz baja para no despertar a Mati, Eve abrió los ojos muy despacio y abrazó con más fuerza a la mayor. - ¿Qué hora es? – Preguntó, pero Nat le hizo señas para que no hiciera mucho ruido.

Eve cayó en sí, y se dio cuenta que Mati aún estaba dormida. Nat se despidió con señas y salió del cuarto. Estaba más que feliz por las dos chicas.

- Oye... Mati, ya es un poco tarde. – La despertó mientras la movía un poco. Mati abrió los ojos muy despacio y se quejó, aún tenía el rostro un poco sonrojado por haber llorado la noche anterior, Eve sabía que todos lo notarían, pero para ella se veía muy linda así.

- ¡Buenos días! – Dijo mientras se tallaba los ojos. Eve se sentó sobre la cama y Mati la imitó. – Perdón, sé que es un poco tarde, pero estoy muy cansada y el cuerpo aún me duele un poco. – Eve sabía que todo lo del día anterior le había afectado bastante.

- No te preocupes, si quieres puedes bañarte primero, mientras yo preparo las cosas por aquí. – Mati le sonrió, fue hasta su maleta y luego se dirigió hasta el baño y se metió a bañar, pudo sentir como el agua fría caía por todo su cuerpo, se sentía muy frágil en ese momento, pero sabía que no podía permitirse que eso la lastimara tanto. Salió del baño y se dirigió hasta la cama para vestirse, Eve la vio y se acercó a ella para abrazarla.

- Tranquila Mati, todo está bien ahora ¿vale? – Le acarició el cabello y se dirigió al baño, Mati decidió vestirse, no quería que la vieran de esa forma, decidió que lo que había ocurrido la noche anterior no sería la razón que arruinara aquel momento con sus amigos y con Eve. Y se apresuró a preparar sus cosas.

- ¡Oye!, veo que ya estás lista. – La molestó Eve, que en ese momento iba saliendo del baño.

- Si, es que tenía muchas cosas en la cabeza, pero no más, no puedo dejar que eso arruine todo esto, que finalmente gané junto al equipo, todos están aquí y tú... tú estas aquí conmigo, y yo no puedo estar bajoneada y darle gusto. – Se acercó a Eve y le dio un beso en la mejía. - ¿Quieres que te espere? – Le preguntó. Claro que esto sorprendió a Eve, veía como con mucha fuerza de voluntad, Mati iba sobreponiéndose a la situación.

- Si quieres puedes ayudarme a vestirme. – La molestó, pero Mati al parecer no notó que era una broma, ya que se quedó sin moverse y no pudo decir nada, Eve notó que incluso se sonrojó demás. – No es cierto. – La molestó y ambas rieron, Eve tomó una de las manos de Mati, llevándola más cerca de ella, y coqueteándole un poco, tocó el rostro de Mati levemente, mientras veía sus labios, y se fue acercando.

Mati por su parte, no iba a detenerla, ella también quería que Eve continuara con ese pequeño juego. Finalmente, Eve terminó por darle un pequeño beso, fue corto, pero duró lo suficiente para que ambas sonrieran. – Si quieres puedes esperarme, me visto rápido ¿vale? – Dijo para dirigirse hasta la cama. – Pero voltéate. – La molestó mientras le aventaba una almohada. Mati quiso protestar, pero Eve se acercó y sujetándola por lo hombros la giró jugando y la sentó en una pequeña silla que estaba en la habitación.

Mientras Eve se vestía conversaron un poco y rieron. A Eve se le hizo muy lindo de parte de Mati el haber respetado su "petición" y haberse quedado de espaldas. Se veía como una niña pequeña que hacía caso a las instrucciones que le daban. Claro que hasta cierto punto las dos sabían que era un juego, pero Mati quería respetar la privacidad de Eve y no sentirse tan intensa.

Eve terminó de vestirse y se dirigió hasta Mati para abrazarla desde atrás. - ¡Listo! Ahora sí, ¿nos vamos?. – Le dijo mientras Mati se ponía de pie, ambas fueron por sus maletas y salieron del cuarto para ir a desayudar, Nat y Jaz justo iban llegando, por lo que fueron las 4 hasta el comedor, ahí se unieron a los demás y desayunaron, todos estaban muy felices, bromearon, y luego caminaron un poco por la ciudad.

Después de un rato, ya era hora de volver, por lo que todos se dirigieron hasta sus respectivos transportes, Mati debía volver con Oscar y su entrenador, pero este último tuvo unas diligencias y se había comunicado con Oscar para decirle que volvería hasta el próximo día, justo para celebrar el triunfo en la escuela.

- Oigan, ¿alguien quisiera irse conmigo? – Preguntó Mati. – El couch va a quedarse y volverá mañana, por lo que voy sola. – Comentó.

- Eve deberías irte con ella. – Dijo Nat empujando a Eve.

- ¡Espera Nat! – Bromeó Eve. – Quizás alguien más quiera acompañarla. – Dijo entre risas.

- Pueden venir las tres.- Bromeó Mati, y todos rieron. – Pero deprisa que se nos hace tarde. – Dijo entre risas.

- Bueno, vale, yo voy. – Dijo Eve caminando con su maleta. De inmediato Oscar se hizo presente y se ofreció a llevar las maletas de Eve y Mati, ambas agradecieron, se despidieron de los demás y fueron hasta el auto.

- El camino fue muy tranquilo. Bromearon un poco, pero en el trayecto Mati terminó quedándose dormida. – Mati, ¡Mati! . – Eve la llamó pero la mayor estaba profundamente dormida. Por lo que para evitar que se golpeara o algo durante el camino, la jaló un poco y la recostó en su regazo. Oscar claramente estaba consciente de lo que pasaba.

- Se ven lindas juntas. – Comentó Oscar sin apartar la vista del camino. Eve se sorprendió ante aquel comentario y no supo cómo responder. – Tranquila, no lo digo para incomodar ni nada, siempre he querido verla feliz. - dijo refiriéndose a Mati.

- Yo igual, quiero que esté tranquila, que esté bien y feliz. – Dijo mientras le acariciaba el cabello.

- Pues eso me alegra. – Comentó aquel hombre. Es resto del camino fue muy tranquilo, incluso Eve terminó quedándose dormida un rato. Pero al llegar a la ciudad Oscar optó por despertarlas, para saber a dónde las llevaría.

Eve pidió si la podían llevar, ya que sabía que su mamá se podía preocupar aún cuando la tenía informada de todo. Por lo que así fue, pasaron a casa de Eve para dejarla y luego fueron hasta la casa de Mati. Había sido un viaje demasiado complicado, entre la competencia, haber visto a Irene y lo ocurrido con Eve, Mati sentía que habían sido semanas y no solo un par de días. Una vez en casa, y ya que sus padres no estaban, aprovechó para tumbarse en la cama el resto del día.

En medio de la tarde su celular empezó a sonar, cosa que la despertó y se levantó para poder verlo. Sus amigos habían hecho un chat grupal y todos estaban conversando. Mati decidió saludarlos y justo al momento de haber enviado el mensaje todos saltaron a felicitarla y colocar las fotos que se habían tomado con ella. Eso la animó bastante, esperaba con ansias el próximo día, finalmente volvería a clases y esperaba que todo volviera a la normalidad. El resto del día pasó volando, el nuevo chat grupal prácticamente hizo que los chicos se divirtieran, Mati terminó charlando con Eve, las dos estaban mucho más tranquilas y Mati en especial, se sentía aliviada porque Eve estaba con ella y la apoyaba.