UN AMOR EN MÍ VIDA...... UN AMOR PARA SIEMPRE

Capitulo 28

SERENA :

Nos dirigimos hacía mí casa y yo estaba sumamente feliz y no dejaba de ver mí anillo, la verdad Darien me ha hecho la mujer más feliz de esté mundo, nunca pensé qué llegaría a casarme, después de todo lo qué había vivido con Seiya, el fué mí primer amor, la persona con la qué soñé una familia, una boda y el vivieron felices para siempre, pero no fué así.

Aún qué no todo estuvo tan mal, ya qué de ahí nació mí hija, y ella es lo más importante qué tenía, hasta qué llegó Darien, con él he descubierto amor de verdad, por qué me he dado cuenta qué con Seiya nunca sentí ni la mitad de lo qué siento por Darien, y sé ha vuelto indispensable en mí vida, y una de las personas más importantes qué tengo.

-¿Te gusta tu anillo? - me pregunta Darien, sacándome de mís pensamientos y de inmediato dejó de mirar el hermoso anillo.

-Me encanta, es simplemente perfecto.

-Cómo tú - Darien es simplemente divino.

Yo le sonrió pero no es una sonrisa sincera, ya qué tengo miedo de qué mí felicidad sé acabe de un momento a otro, de qué su familia no le agrade el compromiso de nosotros, o cómo reaccionará Melisa, por qué lo más seguro le da algo.

-¿Qué pasa mí amor? ¿No te emociona qué nos vayamos a casar?.

-¿Qué? No, no es eso, lo qué pasa es qué tengo miedo Darien, de qué lo nuestro acabe, de qué nuestra felicidad sé terminé, hace casi un año pensaba qué yo nunca encontraría el amor hasta qué llegaste tú, y me preocupa cómo reaccionará tu familia en especial tu hermana qué bien sabemos qué no me quiere ni un poquito.

-Te estás preocupando demasiado Sere, mís padres te adoran, además mí padre estará más qué feliz ¿Sabés cuánto deseaba qué me casara? Y ahora lo voy hacer con la mujer más maravillosa qué existe en el planeta tierra, y sobre Melisa no te preocupes por ella, ya me encargaré yo sí sé pone pesada.

-Eres maravilloso, te amo.

-Y yo a tí, tanto qué duele sí no te tengo cerca.

Le doy un pequeño beso, y Darien sigue conduciendo, cuándo llegalos a casa Vale todavía no había llegado, por lo qué decido mandarle un mensaje a la mamá de Seiya para saber a qué hora vendrán, a los pocos minutos me contesta qué en una hora y media estarán aquí, Darien se fué a hablar por celular, yo me dirijo a la cocina y tengo mucha sed, por lo qué me sirvo un vaso lleno de gaseosa.

-Aquí estás, pensé qué te irías a refrescar - dice Darien entrando a la cocina.

-Sí, pero primero quería refrescar mí garganta - Darien sonríe al ver qué a él también le he servido un vaso con gaseosa.

-¿Me harás adicto a esto también?.

-También? ¿Púes a qué te he hecho adicto? - Darien se acerca muy lentamente hasta mí y sonrió, por qué sé cuál va a ser su respuesta.

-A tí mí amor - Darien me agarra por la cintura y me pega a él - Soy adicto a tus besos - Darien me besa a los labios, me besa el cuello - A tus maravillosa forma de ser, soy totalmente adicto a tí - sus labios vuelven a mís labios, sus besos me devoran, sus manos recorren mí cuerpo haciéndome saber cuánto me desea.

-Vamos a refrescarte princesa - me alza haciendo qué enrolle mís piernas en su cintura y me lleva hasta nuestra habitación, al llegar cierra con picaporte la puerta, lo miró alzando una ceja.

-No quiero interrupciones preciosa.

Sus voz ronca y sensualidad me pone a mil, por lo qué le agarro la cabeza y tiró de él para qué su labio presione la mía, y él capta mís intenciones, ya qué sus ricos labios devoran los míos, amo a esté hombre, su forma de hacerme el amor me transporta a otro mundo, sentir sus manos recorrer mí cuerpo, hace qué la piel se me erize, y sus besos me hacen perder la razón, poco a poco la ropa empieza a caer al suelo, hasta qué los dos quedamos totalmente desnudo.