Capitulo 4

101 13 3
                                    

DARIEN :

Hoy me levanté sín ganas de nada, ya no sé qué más hacer, la extraño tanto, sí estuviera muerta y enterrada tendría un lugar dónde llorarla, dónde hablarle, un lugar dónde mís hijos también irían a verla y hablar con Serena pero no, no sé dónde está, y sí está viva, sí está muerta, en qué condiciones vivirá sí vive, es algo qué tampoco sé, lloro y hablo sólo en la soledad de nuestra habitación, la extraño tanto, saber qué desde qué la conocí cambió mí vida, el qué me rechazara y me ignorara hacía qué tuviera más interés en ella, cuándo nos dimos el primer beso en esa pizzaría, el qué después aceptará mí propuesta, cuándo le hice el amor por primera vez, cuándo me cantó y me dijo qué me amaba.

Me duele tanto qué no se cuanto más aguantaré todo esté dolor, Serena se volvió mí todo, me enseñó a amar de verdad, llegaste a mí vida cuándo pensé qué nada valía la pena, así cómo llegaste te fuiste, tal vez sí me cambiarás de casa ya qué en está, está su recuerdo, su olor, sus cosas, en está casa nos casamos cómo marido y mujer.

Tengo qué salir de aquí, tengo qué estar sólo, llamo y alquilo un Jet, tengo qué despejar mí mente, aún qué sé qué los recuerdos de el amor de mí vida estarán conmigo siempre, llame a Jessi, no creó qué vaya, qué me presente a la dichosa arquitecta la otra semana, qué lo qué me tenga qué decir me lo diga por teléfono, y sí tiene qué ser en persona qué me lo diga cuándo regrese.

Después de hablar con Jessi y desahogarme con ella, me quedé con una sensación extraña, decido trabajar para qué las horas se pasen rápido, a las 4:00 de la tarde me llaman para avisarme qué hay un retraso de dos horas, por qué están dando mantenimiento al Jef, por lo qué resignado decido ir a ver a Jessi, y qué así me dijera qué era eso tan urgente.

De camino a su casa, me siento nervioso, extraño y no sé la razón, desde ayer qué hablé con Jessica la sentí extraña, preocupada, al llegar a la casa tocó el timbre, me abre Jessi, quién al verme su expresión es de asombró, seguro pensó qué no vendría.

-Me iré en la noche así qué vine antes de hacerlo.

-Genial, pasa - me dice Jessica jalandome del brazo.

-¿Qué pasa? ¿Por qué tanta desesperación?.

-Darien tengo qué hablar muy seriamente contigo, pero lo haremos cuándo se vaya la nueva arquitecta,por favor no te desespere, y deja qué yo te explique cuándo ella sé vaya.

-Me estás asustando ¿Es algo grave? - la reacción de Jessi en verdad me está asustando.

-Púes sí, sólo prometeme lo qué te acabo de pedir.

-Está bien, te lo prometo - será mejor qué lo haga, ya qué está muy alterada.

-OK, andando.

Antes de entrar al despacho, respira profundo ¿Qué le pasa? Una vez adentro, un olor llega hasta mí nariz, no por Dios, no aquí, el olor de mí princesa llega a mí, observó a una mujer platiada concentrada viendo unos planos.

-Llegamos Serena, él es nuestro jefe Darien.

¿Serena? ¿A dicho Serena? La mujer levanta la mirada y yo me quedó petrificado, cierro los ojos con fuerza, no esto no puede estar pasando, esto no es imposible, te extraño tanto mí amor qué ya te veo en otras personas, vuelvo a abrir los ojos y ella también está en shock viéndome, terminó de acercarme y ¡Dios! Es mí mujer, mí Sere, sólo qué platiada, está muchísimo más hermosa de lo qué ya era.

Me lanzó abrazarla, no puedo creer qué sea ella, sín más tomó su cara y la besó con amor, con cariño, pero Serena no me corresponde de inmediato lo cuál me sorprende, por lo qué me separó lentamente, Serena tiene los cerrados, le acarició su rostro, ese gesto hacer qué los abra y me miré a los ojos, pero puedo ver qué está confundida.

UN AMOR EN MÍ VIDA...... UN AMOR PARA SIEMPRE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora