Capitulo 34

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Serena :

Me despierto algo adolorida en una habitación blanca, dónde sólo sé escucha la maquina dónde me tienen conectada ¿Qué hago aquí? ¿Cómo llegué aquí? En eso los recuerdos de lo qué pasó vienen a mí, empezó a alterarme y la maquina tonta empieza a sonar más seguido, la puerta sé abre y entra la enfermera y un doctor, detrás de ellos vienen Gustavo, Gala, Zafiro y Alberto.

-Al fin despertaste cielo - Gala tiene el rostro rojo de tanto llorar, en su mirada puedo ver una tristeza profunda.

-Por favor señora podría tranquilizarse, en su estado le hace mal - dice el doctor, mientras yo abro mís ojos cómo platos al escucharlo.

-¿En mí estado? - digo muy nerviosa.

-Estás embarazada cariño, me harás abuela otra vez, es la mejor noticia en todo lo malo qué estás pasando - ¿Embarazada? ¡Dios!.

-¿Cómo está Darien? ¿Qué pasó con Rubeos? Y ¿Melisa? ¿Cómo está ella? ¿Está viva? Y tú - digo señalando a Gustavo - Tú estabas ahí ¿Cómo llegaste? - a pesar de estar en shock por la noticia, tengo muchas preguntas.

-Cálmate Serena, te contaré todo, pero tranquilizate ¿Quieres? - asiento.

-Tienes dos días aquí.

-¿Dos días?.

-Sí Sere, ahora no me interrumpas, Darien va mejorando, está mejor, al parecer ya no sé encuentra en coma, sólo qué no ha logrado despertar, Melisa bueno tú estabas ahí, está mal muy mal, sus golpes fueron muy fuerte, y bueno la violaron, ella no quiere hablar con nadie, aún qué a preguntado mucho por tí, también por Darien, y Rubeos está muerto, trató de escapar pero en la huida su auto perdió el control, dió varias vueltas y antes de poder acercarnos al auto explotó, iban él y otros dos hombres, y sí yo estaba ahí fué por qué Melisa me aviso, antes de qué sé fuera del hospital, la seguí y hablé con ella, al parecer sí ayudó al final de todo - asiento, no puedo hablar, no me salen las palabras.

-Quiero ver a Darien - dije en susurró.

-Tienes qué esperar a qué te den de alta, ahora descansa ¿Quieres? - me dice Zafiro cariñosamente, yo vuelvo a sentir.

Cuándo todos se han ido, lloro a más no poder, lo qué le hicieron a Melisa fué horrible, ninguna mujer merece pasar por eso, no voy a negar qué estoy feliz qué Rubeos esté muerto, al fin podemos estar en paz, por más qué doy vuelta en mí habitación no logró poder dormir, por lo qué muy lentamente me levantó, quiero ver a mí marido.

Muy sigilosamente salgo y me dirijo a su habitación, qué está en un piso arriba del mío me duele el cuerpo, cuándo logré llegar a la habitación por dicha no había nadie, al verlo conectado a tantas máquina y acostado en esa cama, vuelven a salir mís lágrimas.

-Ay mí amor, mirate cómo estás, por favor tienes qué despertar - agarró su mano, y le doy un un beso - Te amo Darien, te quiero conmigo, con mís hijos, y por el qué viene, sí mí amor, seremos padres otra vez - su mano aprieta la mía, una máquina empieza a sonar más fuerte.

-Darien amor ¿Me escuchas? - su mano vuelve apretar la mía, y poco a poco sus ojos sé van abriendo - Oh por Dios, has vuelto.

-¿Seremos padres? - pregunta con voz ronca.

-Sí mí amor, justo hoy me enteré - Darien me mira detenidamente, y frunce el ceño - ¿Qué pasa? ¿No te alegra la noticia?.

-Serena ¿Qué te pasó? ¿Por qué tienes golpes en la cara? - Mierda, ni siquiera me he visto en un espejo, no sé cómo me veré - ¿Y por qué tienes una bata de hospital? - los signos vitales de Darien sé empiezan a alterar, y el mismo doctor qué me atendió entra y dos enfermeros detrás de él.

UN AMOR EN MÍ VIDA...... UN AMOR PARA SIEMPRE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora