Capitulo 36 Extra

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NARRADOR :

Serena tenía varios días extraña, casi no pasaba en casa y cuándo lo hacía pasaba hablando por teléfono, y eso a Darien le empezaba a molestarlo, ya había pasado dos años desde qué sé casaron por segunda vez, y a pesar de qué todo era mavilloso, Darien no podía dejar en pensar qué seguro sé estaba alejando de él por qué ya no lo amaba.

¿Qué haría sí eso era cierto? ¿Qué sería de su vida? Él amaba y adoraba a Serena, no sería capaz de dejarla, Sí tenía qué volver a conquistarla lo haría, ella era el amor de su vida y no podía dejarla ir.

-¿Cómo está el papito más lindo del mundo? - Vale entró al despacho de su padre, ya tenía 11 años y era una niña hermosa, cada vez qué Darien la veía se sentía muy orgulloso de su hija, por qué ella era su hija, su primera princesa.

-Bien mí amor ¿Y tú?.

-Bien - dijo acercándose a su padre y sentándose al frente de él - Quería pedirte permiso, ya qué mamá no está - qué Vale le recordará lo minutos antes qué estaba pensando le revolvía el estómago.

-¿Permiso para qué?.

-Es qué un amigo me invitó a ir al cine.

Darien por un momento la miró cómo sí tuviera dos cabezas ¿Un niño qué? Ósea su princesa no podía salir con nadie, era una niña, una bebé, trató de tranquilizarse o le daría un ataque, definitivamente hoy no era su día.

-Vale, acá en casa hay una sala de cine, puedes invitar a tus amigas - sín poder evitarlo, Vale puso los ojos en blanco, su padre era un celoso.

-Papá, ya sé qué aquí hay una sala de cine, y qué puedo invitar a mís amigas, pero con los mellizos y Endy no sé puede tener privacidad, además saldré con un amigo no amiga.

-¿Recuérdame cuántos años tienes?.

-Papáaaa.

-Vale, eres sólo una niña de 11 años para qué estés hablando de privacidad.

Vale agachó la cabeza, fingiendo tristeza, tenía qué ser qué el plan saliera a la perfección.

-OK, tú ganas, puedes ir a ver una película y regresar, te doy tres horas y el chófer te llevará y traerá - Vale sé levantó corriendo y sé sentó en sus piernas.

-Eres el mejor papá del mundo.

-Y tú una de mís mejores hijas, ahora ve.

Vale salió del despacho corriendo, y Darien hizo lo mismo, tenía qué seguir a su princesa, no podía dejar qué algún niño sé aprovechará para hacerle daño, debía pensar en algo rápido, tenía a qué meter a sus hijas en un lugar dónde no puedan salir nunca.

Se subió al auto y siguió en el qué el chófer la llevaba, durante las tres horas siguientes Darien siguió a su hija, pronto ese niño iba a parecer sín cabeza por sonreírle a su niña, y por haber tomado su mano, llegó minutos antes a la casa e hizo qué la estaba esperando.

-Hola cielo ¿Te divertiste? - caminaban hacía la puerta de entrada, y Vale lo vió con una gran sonrisa.

-Mucho ¿Sabés cuál fué mí parte favorita? - Darien negó con la cabeza, frunciendo el ceño.

-Verte escondido detrás de unos niños de cinco años, papá creó qué a la par de ellos eras grande ¿En serio na había otro lugar? - Valery soltó una carcajada, y Darien la miraba sorprendido.

-¿Sabías qué estaba ahí? - Vale asintió.

-Sí, ven vamos, hablaremos después de tu comportamiento - cuándo Darien iba a protestar, Vale abrió la puerta y un grito sorprendió a Darien.

-Sorpresa - él los miraba a todos sorprendidos, Serena se le acercó con una gran sonrisa.

-Feliz cumpleaños mí amor - por la cara de Darien, Serena supo qué no sé acordaba de su cumpleaños - Me parece qué alguien olvido su cumpleaños, y todo por estar pensando cosas feas en esa cabecita, te amo cielo - Darien sonrió y besó desesperadamente a su mujer.

Serena había estado planeando una fiesta para Darien, pero ella sabía lo paranoico qué sé había vuelto, y sabía qué la única manera qué saliera de la casa sería qué su hija sé invitará una cita con su mejor amigo.

-Eres cruel, me has hecho sufrir, pero es una sorpresa maravillosa, gracias amor mío.

Sus hijos lo abrazaron y llenaron de besos, su familia y amigos estuvieron a ahí para celebrar su cumpleaños, sé sentía feliz.

-Me encanta verte con esa sonrisa - dijo Serena abrazándolo, y antes de darle un beso en los labios.

-Tú, mís hijos, mí familia y amigos son lo mejor qué me ha pasado en la vida, gracias por la sorpresa.

-Te tengo otra, pero esa te la daré cuándo estemos solos en nuestra habitación - le dijo en tono pícaro.

-Púes eso lo quiero ya - Darien la tomó de la mano, pero antes de lograr su cometido Melisa y Alan aparecieron con su pequeña niña de un año, Darien adoraba a esa niña, así qué sus planes tenía qué esperar, disfrutaría con su familia, y luego en la soledad de su habitación le haría el amor a su mujer toda la noche....

Ahora sí llegamos al final de está historia, gracias por sus votos y comentarios...

UN AMOR EN MÍ VIDA...... UN AMOR PARA SIEMPRE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora