Capítulo 15

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Steffy

Marcos me había dejado otra vez en mi maldita habitación, tal cual como lo hizo aquella noche, es que acaso no sabía que estábamos en un tira y jala?, Me había cabreado que volviera a tomar esa maldita actitud que tanto me ponía de pelos. Miro la cajita azul sobre la cama que le había hecho a Ed, la agarro y la pongo sobre el escritorio.

Mi móvil empieza a sonar y me estremezco al ver el nombre de "Mamá" en la llamada entrante, suelto el aire que estaba conteniendo tras el enfado y contesto calmada, escucho del otro lado de la línea los gritos de Ed y los de mi padre, se dibuja una sonrisa en mis labios al escucharlos.

—Hola mamá —me senté en el borde de la cama viendo la cajita.

—Hola mi amor, como se están portando ustedes dos?

—Sabes como es Apolo cuando estamos solos, nada fuera de lo normal —dije dejándome caer de espalda sobre la cama.

—Bueno si, pero te llamé para decirte que mañana no podremos llegar a casa —se oía un poco triste.

Yo me siento rápido en la cama y cruzo las piernas. No podía creer lo que me estaba diciendo, mañana era el cumpleaños número once de Ed y yo estaba emocionada de pasar ese día con el, al igual que Apolo. Dios Apolo, ¿Cómo le digo Apolo que no van a venir mañana?

—¿Cuando vienen? O mejor dicho, ¿Porque no vienen mañana? —queria sonar un poco tranquila, que no se notara que estaba un poco alterada.

—No iremos mañana porque tu abuela Marce quiere que Ed pase un cumpleaños con ella —se escuchaba un suspiro de ella.

—Esa vieja no merece que Ed pase otro día allá —espeté de mala manera, se me había olvidado que estaba hablando con mi madre—. Lo siento mamá, pero es verdad.

—Es su abuela, al igual que de ustedes, no voy a volver a discutir este mismo tema Steffy —se oía firme su voz.

—Tck, está bien, pero yo no le diré nada Apolo, habla tú con el y ve como se lo llegue a tomar —dije molesta.

—Yo hablaré con el y calmate.

—Me calmare cuando Ed esté aquí.

Sin pensarlo dos veces le colgué, no teníamos más nada de qué hablar. Ed no viene mañana, eso quiere decir que otro día sola sin mis padres, no se crean, vivir con Apolo es como estar sola en casa. Estos últimos días el a estado un poco distante y la verdad es que no se, él cree que yo no sé que la pasa con Amy. No es que esté celosa ¿Ok?, El es mi hermano y daría la vida para que no se separe nunca de mi, somos gemelos, que se puede esperar de ellos?, El es mi vida y Dios, esa tal Amy no se no me cae muy bien y no me gustaría que Apolo pase lo mismo que yo pasé con José.

Yo había cerrado ciclos con el, y me dije a mi misma que no volvería a sentir nada por nadie, pero Marcos es, es, es. Ni siquiera consigo la palabras correcta para describir lo que es el. Lo único que diré el es que me vuelve completamente loca.

Salgo de todos mis pensamientos y salgo de mi habitación para ir abajo, en cuanto voy bajando las escaleras puedo escuchar una voz femenina y al encontrarme en la sala veo a la morena de rulos. Me acerco al grupo y me siento junto a Apolo.

Desviaron sus miradas cuando me senté junto a mi hermano y Amy me regala una sonrisa amable, yo fuerzo una sonrisa corta y empiezo a buscar con la mirada a Marcos que no estaba en la sala, empecé a mirar por los alrededores disimuladamente y Jonás interrumpe mi búsqueda imposible.

—Fue a su casa, dijo que vendría dentro de unos minutos —dijo el rubito de Jonás.

Yo solo levanto los hombros con indiferencia y empezamos hablar los tres por unos cuantos minutos, Amy nos estaba contando cuando le habian pegado un chicle en el cabello cuando estaba en la primaria, luego empezó a contar sobre un chico que le gustaba y no dude en ver a Apolo, este estaba un tenso porque veía como sus manos formaban un puño disimulado. Pero analizando bien la cosa aquí, Amy no ha visto Apolo desde que me senté con ellos, ¿Están peleados?. Miro a Jonás que le hacía unas preguntas a ella sobre ese chico, pero yo fui más directa, fui al grano.

—¿Te gusta mi hermano?

Los ojos de Amy se salieron de órbita y Jonás se estremeció ante mi pregunta, Apolo me fulminaba con la mirada, podía sentir como este me veía.

Ella quedó unos segundos sin responder, se que fue una bomba al preguntar eso así de la nada, pero es que vamos, Amy estaba describiendo el chico que le gustaba y todo lo que decía describía a Apolo, ¿Como es que ellos no se dieron cuenta de eso?. Analizaba la mirada de Amy y sabía que si le gustaba.

—No —dijo con firmeza.

Vaya, eso sí que no me lo esperaba, creí que diría que si y así acabar con este rollo de ella y el, pero con un «no», me ha dejado un poco desubicada. El tenso Apolo se había desvanecido y ahora parecía ver qué le hubieran dado una bofetada fuerte, como la que le dio mi madre, así, Jonás solo se quedó en silencio viendo lo que estaba pasando.

—Steffy, si te digo que te gusta Marcos, ¿tú qué me dirías? —dijo Amy olvidando el estado de Apolo.

Ok pero eso tampoco me lo esperaba, eso sí que me ha dejado fuera de lugar. Parpadee varias veces para poder asimilar la pregunta que me dijo ella, ¿Que sabía ella de eso para que me estuviera preguntando sobre eso?. Cuando estaba por responderle su pregunta, la puerta de la casa fue abierta y el que entró fue Marcos. Todos lo miraron y este se sienta junto al lado de Jonás y nos mira como ¿Que está pasando?, Obvio que se estaría preguntado que está pasando Steffy, el ambiente se puso tenso ante la pregunta que hizo Amy.

—Entonces Steffy? Que... —fue interrumpida por Jonás.

—Bueno Marcos, Steffy te ha estado buscando.

Dios, te agradezco por haberle cortado pero porque tenías que haberle dicho eso?, No podías decirle otra cosa?. Es que justo en este momento ya me sentía super incómoda, no quería estar ahí con ellos, solo quería estar encerrada en mi habitación y dormir.

—Amy necesito hablar contigo de algo —dijo Marcos levantándose del sofá, ignorando completamente el comentario de Jonás.

Amy le mira extrañada, Apolo no deja de mirar a Amy y Jonás, bueno, el parecía un ventilador, veía a quien hablaba. Yo solo me puse de pie cuando marcos se fue al patio con Amy para hablar. Apolo seguia cada paso que daba Amy y el hacia lo mismo con Marcos.

—Bueno, y si mejor jugamos uno? —dijo Jonás sonriendo.

—Yo paso —dijo Apolo colocándose de pie y empezó a subir las escaleras para irse a su habitación.

Conocía a mi hermano, sabía que esa respuesta de Amy le habia afectado, yo me quedé con Jonás en la sala.

—No jugare uno, pero me vas a decir que es lo que tiene que hablar Marcos con Amy —dije seria.

Steffy MillerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora