Mientras seguía sentada en aquel sillón, comencé a apreciar cada rincón de aquella oficina tan muy bien ordenada. Las paredes eran de un color gris tenue, los muebles color negro muy pero muy oscuro. En el escritorio de Marck se apreciaba una figura hecha de resina de la diosa griega Themis. Hace poco investigué el significado que tenía para los abogados, no tenía conocimiento, conocía lo básico que era la justicia. Aquella figura tenía tanto significado, ya que representaba el orden sobre la naturaleza y en la humanidad el cual era el papel que ejercía en el universo. Supongo que no solo es simple decoración... Mientras seguía inspeccionando ví un rostro asomarse por aquella puerta de cristal por dónde había salido minutos antes Marck.
—¿Señor Anderson?— Preguntó el joven echando un vistazo al interior de la oficina.
—Él no se encuentra — Respondí esbozando una sonrisa.
—¡Oh!— musitó ingresando a la oficina. —¿Eres el pequeño Park?— Interrogó extendiendo su mano.
—Hmm... Sí — Dudé un poco estrechando su mano. — Soy Park Jimin, ¿Quién eres tú?—
—Soy Yeonjun, Choi Yeonjun— El se veía muy joven, no más que yo. Pero sin duda lo era.
—¿Trabajas aquí?— Pregunté rompiendo el silencio.
—Sí. Soy el asistente de tu padre.— ¿Viniste en compañía de él?-Me limité a asentir.
—Te ves más joven que los demás que trabajan aquí.— Sinceré nervioso.
—¡Ah!, ¿De verdad?. En serio me halagas, tengo veinte.— Rascó su nuca apenado.
—Yo tengo diecisiete— Reímos —Mi padre salió, ya no tarda en regresar. ¿Gustas esperarlo?— pregunté tomando nuevamente asiento en aquel cómodo sillón.
—Si. Yo aquí lo espero— Sonrió tomando asiento al otro extremo del sillón. —El señor Anderson no para de hablar de tí, casi siempre tú y tu madre son el tema de conversación aquí en el despacho.— Río y yo solo estaba atento a sus palabras.
—¿De verdad?— asintió. —Eso es muy lindo. Cambiando de tema...— me miró atento. —Digamos que tú eres el que administra los tiempos y audiciones de mi padre, ¿Cierto?— Cuestioné.
—Y no solo las de tu padre—Rió nervioso —Los tiempos del Joven Min también.
Lo miré con notable confusión en mi rostro.
—¿Joven Min?— Pregunté confundido.—¿No lo conoces?— negué —¡Es increíble!, Tu padre y él son amigos, creí que ustedes lo conocían por tal motivo—
No negaré que sentí demasiada curiosidad por saber quién era aquel tal "Min". Hasta de pensarlo sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo.
—¡Ya!... Pero ¿Quién es Min?— pregunté algo fastidiado.
Y como si el propio universo respondiera a mi pregunta. La puerta se abrió dejando ver a Marck y a una figura más joven que él...
En ese momento no puedo explicar lo que sentí, la ola de emociones que comenzaba a crecer en mí. Aquel hombre misterioso ingresó por completo a la oficina, lo cual me dió oportunidad de admirarlo más. Es como si todo se hubiese detenido, como si en aquella oficina solo él estuviera presente. Aquel hombre era alto al igual que Marck, su cabello era de un negro azabache, su piel era demasiado blanquecina, aún más que la mía. Sus manos eran grandes y se alcanzaba a apreciar las venas que resaltaban, sus dedos eran largos acompañados de anillos de plata.
Sus ojos eran de un color marrón oscuro, tenían rasgos gatunos, pero ni hablar de su mirada, era muy intimidante en sí su rostro era de un semblante totalmente serio y en ese momento me sentí pequeño.Mientras seguía mirando a aquel joven, alguien me sacó de mis pensamientos abruptamente.
—Cierra la boca— Susurró burlón Yeonjun —Se te va a meter una mosca— Solo lo fulminé con la mirada y devolví mi vista hacía aquel hombre que ahora estaba mirándome.
—¡Oh!— Exclamó Marck sorprendido.—Ya estas aquí Yeonjunnie, dame un minuto.—El menor solo asintió gustoso. Mientras que Marck ahora dirigía su mirada hacia mi dirección.—Min te presento a Jiminnie, mi hijo. Jiminnie, te presento a Min— Nos presentó y ahí comprendí que aquel joven del cuál hablaba Yeonjun hace unos momentos era de nada más y nada menos que la persona que estaba frente a mi extendiendo su mano.
—Aaa..yo...Yo...—Carajo, se notaba mi nerviosismo a kilómetros —
—Tranquilo—Habló la ronca voz de aquel hombre de ojos gatunos.
—Soy... Soy Jimin, Park Jimin — Estreché su mano con un leve sonrojó en mi rostro.
—Tu hijo es demasiado tímido, ¿No es así?— Preguntó Min mientras soltaba mi mano.
—Para nada— Sonrió Marck— Ahora sí Yeonjunnie, ¿Qué me querías decir?— Ambos se acercaron al adornado escritorio hablando de cosas que ni siquiera presté atención, yo seguía perplejo por mi comportamiento, de igual manera tomé asiento sin dejar de mirar al Hombre. Él solo estaba viendo a la nada sin emitir alguna palabra, ajeno a la conversación entre Yeonjun y Marck.
Seguía pensando en como lo había descrito, sin percatarme que aquellos ojos gatunos estaban posados en mi, mirándome sin expresión alguna, por inercia agaché la mirada nervioso hasta el punto de sudar por tal nerviosismo. De reojo noté que él me seguía mirando como si buscara decifrarme, yo levanté mi rostro dispuesto a sostenerle la mirada y parecía ser un juego sobre quién aguantaba más la mirada del otro. Nuevamente Yeonjun me sacó de mis pensamientos.—Fue un gusto conocerte Jiminnie— Sonrió hacía mi dirección.—Espero puedas venir más seguido, me agradó conversar contigo — Le sonreí y hecho esto, Yeonjun desapareció por la enorme puerta.
Ambos volvieron a retomar la plática que tenían minutos antes de ingresar a la oficina. Yo seguía nervioso, las manos me sudaban y mi cuerpo temblaba, jamás me había pasado esto.
—Bien, pues es hora de irnos Minnie— habló Marck colocándose el saco.
—¡Pero ni siquiera me mostraste nada!— Comenzaba a ser el mismo Jimin de horas atrás
—Cariño, es que tu madre nos tiene buenas noticias. Hizo una reservación en tu restaurante favorito.— Marck Sonrió enamorado y el hombre río, por primera vez en los pocos minutos lo ví sonreír, tenía una sonrisa muy linda, su encía se asomaba tiernamente al reírse.
—¿Puedo venir después contigo?— Pregunté dirigiendo mi mirada hacia Marck. Él asintió gustoso.
—Fue un placer conocerte Park Jimin— Su tono de voz me hacía ponerme nervioso.
—Igualmente señor Min— Reí viendo hacia otro lado para evitar mi vergüenza.
Después de aquel momento tan extraño, ya no encontrábamos con mamá en el restaurante. Su noticia era que había logrado más ventas por una colección nueva, los tres celebramos y mientras Marck y ella estaban en su burbuja de amor yo no dejaba de pensar en ese hombre.
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¡Holaaaa nuevamente!, Disculpen no saber cómo describir a Yoongi😭, soy lágrimas, pero hice mi mejor intento. Imaginen que es como en la fotito de portada, o como ustedes gusten. Espero disfruten de los capítulos. Tomen agüita y coman bien.💗🍄
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The desire to be with you. [Yoonmin]✓
Romance"Siempre te amaré, no importa que pase después de esto." ¿Hasta dónde eres capaz de llegar para estar con la persona que más amas? El deseo te vuelve débil pero el amor te hace vulnerable. Jimin no podrá soportar mucho tiempo con ambos sentimientos...