𝐁𝐔𝐒𝐂𝐀𝐍𝐃𝐎 𝐓𝐔 𝐏𝐄𝐑𝐃𝐎𝐍||𝐀.𝐆.[✔︎]

xɪɪɪ

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ʙᴜsᴄᴀɴᴅᴏ ᴛᴜ ᴘᴇʀᴅóɴ
ᴀɪᴅᴀɴ ɢᴀʟʟᴀɢʜᴇʀ

ᴄᴀᴘíᴛᴜʟᴏ: xɪɪɪ

ʙʏ ᴄᴇʟᴇsᴛᴇʜᴀʀɢʀᴇᴇᴠᴇs_

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6 de junio de 2019
Los Ángeles, CA.

—¿Ahora por qué estás de buen humor, eh? — inquirió mi madre con diversión mientras terminaba de cocinar.

—Es que... volví a hablar con _______— dije con una sonrisa.

Ella me miró sorprendida.

—¿En serio?

Asentí lleno de emoción.

Ella me sonrió ampliamente.

—Me alegra que hayan arreglado las cosas— confesó mientras volvía a centrarse en la comida.

Me quedé sonriendo como tonto al recordarte.

—Por cierto, ¿y Ángela? —preguntó con curiosidad —hace rato que no veo que hables con ella.

Mi sonrisa se borró y solté un suspiro.

—Ángela y yo ya no somos amigos— hice una mueca.

—¿Por qué no arreglas las cosas con ella? Ella es muy importante para ti— dijo mi madre.

—Ya no hay remedio mamá— la miré —ella confesó que tenía sentimientos por mí y la rechacé.

Ella sólo me miró y no soltó ninguna palabra. Ella vio mi mirada de súplicas para ya no hablar más de ella y mi madre entendió.

—Ve y lávate las manos, vamos a comer— sonrió —y ayúdame a poner la mesa.

Asentí levemente y fui al baño de mi habitación.

Pero, antes de entrar, vi que mi teléfono vibró.

Lo agarré y me sorprendí al ver que eras tú.

Contesté como si mi vida dependiera de ello y aclaré mi garganta para ahuyentar los nervios.

—Hola, ________— dije tratando de sonar calmado.

—Hola, Aidan— escuché tu voz —¿cómo estás?

—Bien, ¿y tú? — pregunté.

—Excelente— comentaste —¿estás ocupado? — inquiriste.

—No, para nada— reí levemente —¿a qué debo tu llamada?

—Bueno, los amigos de Brandon organizaron una fiesta para la próxima semana, y, me gustaría invitarte— informaste —¿quisieras venir?

Aquello hizo que, inconscientemente, una sonrisa se formara en mi rostro.

—Claro, me encantaría— solté sin pensarlo dos veces.

—De acuerdo— dijiste con alegría —en un rato te envío la dirección y la hora.

—Por supuesto— apreté mis labios.

Hubo un silencio algo incómodo.

—Ah... por cierto— dije con nervios —¿te gustaría ir por un café conmigo? — me rasqué mi nuca —en plan de amigos, claro— me adelanté.

—Está bien— dijiste después de unos segundos —me gustaría, Aidan.

Formé un puño con mi mano y doblé el codo en forma de victoria. Susurré un "sí", evitando que ella escuchara.

—Perfecto— traté de sonar lo más normal posible —paso por ti a tu casa el viernes en la tarde, ¿te parece?

—Claro, está bien— te escuché con una leve emoción por tu tono de voz.

—¡Aidan! — escuché la voz de mi madre.

Tapé el micrófono de mi teléfono con la palma de mi mano y lo alejé de mi oreja.

—¡Ya voy, mamá! — grité de vuelta.

Destapé el micrófono de mi teléfono y me lo volví a pegar a la oreja.

—Oye, ya debo irme— dije con una leve tristeza, pues aún quería escuchar tu voz —nos vemos mañana.

—Está bien, nos vemos mañana— te escuché.

En seguida, colgué y suspiré como tonto. Una leve sonrisa se escapó de mis labios, pero luego la borré al recordar que estabas con Brandon.

Negué levemente para disipar aquellos sentimientos de amor hacia ti. No podía arruinar la amistad que estábamos formando sólo porque seguía enamorado de ti.

Decidí lavarme las manos con rapidez y me dirigí a la cocina para ayudar a mi madre a poner la mesa.

A.G.

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𝐆𝐫𝐚𝐜𝐢𝐚𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐥𝐞𝐞𝐫 <3
¡¡𝐍𝐨 𝐨𝐥𝐯𝐢𝐝𝐞𝐧 𝐯𝐨𝐭𝐚𝐫!!

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