-- Mi hermoso dragón azul, eres lo único bueno que tengo en esta miserable vida, y tengo miedo de arruinarte-- el la miraba, sus manos se sujetan de su cintura mientras la acorralada por la pared.
Al día siguiente, después de una HERMOSA noche de bodas para nuestra pareja, cuál cuáles ahora tienen una sonrisa en sus caras mientras hablaban con sus hermanos, en el desayuno, donde todos estaban, Rheanys junto a su esposo Corlys cuáles decidieron pasar el desayuno junto a sus nietas-hijas antes de irse de nuevo a Marcaderiva.
Daemon estaba matando con la miraba a su sobrino-yerno, la razón?, los gritos y gemidos de su pequeña hija llegaban hasta su habitación y saber que ese tuerto de mierda tocó toda la noche a su hija, lo molestaba.
Aemond al notar aquella mirada del Targaryen no pidió evitar sonreír con burla y para hacerlo enojar más, besaba y le susurraba cosas al oído haciendo que Rhaelle se sonrojara.
--- Tío Daemon--- dijo Aemond llamando la atención del mencionado y de los chismosos de la mesa.
--- Que?--- le dice enojado el pleliblaco.
--- Te quedo bueno---- le dio una sonrisa traviesa.
--- Que me quedo bueno?--- le dice confundido.
--- Tu hija --- dijo Aemond descaradamente mirándolo.
Aegon se tapo la boca para no soltar una carcajada, al igual que Baela, pero después de darse cuenta de lo que estaba diciendo comenzó a matarlo con la mirada.
Alicent miro con reproche a su hijo, por la cosa tan descarada que dijo, pero por dentro estaba riendo a carcajadas por la cara de Daemon.
El cual estaba rojo de furia, sí no fuera porque Rheanyra lo agarró del brazo, no se pudo lanzar en sima de el.
--- ¡Aemond!--- le regaña Rhaelle a su esposo, el sonrojo sólo aumento ante las risas de Aegon.
El Rey sólo negó con la cabeza, con una sonrisa burlona, esto es el Karma de su hermano, y estaba feliz de ver aquello.
Viserys volteó a ver a su familia, Jacearys estaba con Helaena la cual reia tímidamente por lo que el le estaba diciendo.
Baela estaba regañando a Aegon, el cual no paraba de reír por lo ocurrido hace rato.
Rhaena y Lucerys sólo estaban hablando sin importancia de lo ocurrido hace rato.
El Rey Viserys estaba tranquilo y en paz, todo estaba bien, ya no había peligro de usurpación para el trono por que el destino cambió para bien.
En la noche, el Rey Viserys dio su último suspiró feliz por el destino de su familia, murió y se pudo encontrar con su amada.
Los días después del funeral del Rey, Rheanyra fue coronada como la nuevo Reina de los siete reinos, Daemon como su rey consorte, Jacearys como el nuevo heredero al trono.
Los meses pasaron y todo fue tranquilo y próspero.
Aemond con su esposa Rhaelle, fueron a Marcaderiva, para que Rhaelle pueda reclamar su lugar como heredada y señora de los mares.
Su hermana Baela se fue atrás de ella junto con Aegon, el cual sólo siguió a la mayor de las hermanas.
Rhaena y Lucerys, ellos se fueron a vivir a Rocadragon cuando se comprometieron.
Los años comenzaron a pasar en un abrir de ojos, muchas cosas pasaron, como el casamiento de Jacearys y Helaena y la espera de su tercer hijo.
La boda de Rhaena y Lucerys, y con la espera de su primer hijo.
En esos años, Daemon intentaba aún pedir el perdón des sus hijas, era tanto su rogar que las chicas dijeron que no lo perdonarán pero podrían tener un trató agradable y respetuoso.
Las nuevas generaciones de Targayen, crecerán sin prejuicios y maldad en su vida.
¿Fin?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
