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Hoseok reposó con cuidado el cuerpo del menor a lo largo del escritorio en su oficina, el personal de primeros auxilios trató con Taehyung mientras él se retiraba en camino al hospital. Como encargados de ambos chicos, SeokJin decidió quedarse con Taehyung mientras despertaba y Hoseok encargarse del asunto de Yoongi.

Condujo rápido detrás de la ambulancia, corriendo dentro del lugar y mostrando la placa de detective para que nadie lo detuviera. La camilla donde Yoongi venía era empujada con velocidad, Hoseok nunca lo miró en persona, pero incluso si el chico fuese pálido, sabía que ese tono en su piel no podía significar vitalidad. Y sus sospechas se confirmaron cuando el médico le dio la noticia.

- Lo siento, era demasiado tarde. Fue un chico muy fuerte, resistir el VIH durante tanto tiempo sin tratamiento es digno de admirar... Pasó a mejor vida. -


...


Las caricias en su cabello eran suaves, cuidadosas. Si Taehyung hubiese sabido lo que es tener una madre podría haberlas descrito, hasta cierto punto, como maternales. Estas mismas lo condujeron al ensueño, y posterior sus ojos hinchados se abrieron, acostumbrándose a la luz y buscando al proveniente del consuelo.

La lastimera mirada de SeokJin lo recibió, el menor aún tenía las pulsaciones dolorosas en su pecho y luego de haber estado en el escritorio durante tanto tiempo su espalda era un martirio. El adulto lo ayudó a sentarse con los pies colgando al filo.

- ¿Dónde está Yoongi? - Fue lo primero que preguntó mientras tallaba sus ojos.

- En el hospital, uno de los oficiales lo acompañó. - Relató Jin, ignorante a la verdadera situación.

- ¿Podemos ir a ese lugar a verlo? -

- No lo creo pequeño, pero ten por seguro que estarás informado de su estado cuando el oficial Jung vuelva. Ahora dime, ¿Cómo te sientes? -

- Bien. Quiero ver a Yoongi. - Demandó. SeokJin agachó la mirada, alejándose del castaño para acercarse a la nevera.

- Estás bajo protección del estado, no puedes salir de aquí a menos de que un juez lo autorice, está noche la pasarás en una casa de asilo y mañana el trabajador social hará todo lo conveniente para tu traslado a Busan. - Taehyung no entendió más de la mitad de lo dicho, pero sabía lo que era un traslado, y no, eso no podía pasar.

- ¡Pero yo no puedo irme sin Yoongi! ¡Llévame con Yoongi! - Exigió con pánico y a punto de llorar, SeokJin había leído más de tres veces todo lo que Taehyung y Yoongi habían vivido, sabía que el expediente no estaba completo, solo lo dieron así porque era lo que los demás mayores habían relatado. En realidad, la comandancia no sabía cuantas cosas eran verdad y cuantas faltaban. Los niños no querían hablar sobre eso, y Jin lo entendía, mientras tanto, todo quedaba en especulaciones.

- Iré a traerte algo de comer, un médico te verá por la tarde y hará una evaluación de tus heridas. En lo que a mi corresponde, comenzaremos el resto de tu expediente mañana. -


...


Una vez seguridad social se encargo del cuerpo, Hoseok se retiró del lugar. Estaba perturbado, era inhumano la forma en la que se abusaron de tantas almas inocentes. La oficina estaba en silencio, el lugar donde Yoongi sufrió la hemorragia ya estaba siendo analizado por el peritaje. Muchos preguntaron del estado del chico, Hoseok no tuvo de otra que contar del grave estado que lo llevó a la muerte.

SeokJin no consideró tener la fuerza suficiente para encarar al pequeño y contarle la tragedia. Hoseok le pidió un almuerzo para Taehyung y así poderle conversar lo que pasó con Yoongi.

Fainting Spells .hopev.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora