8 Enfrente de tus narices

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Entramos al vivero y la verdad es que estamos embobadas, no sabía que había crecido tanto, además tiene mucha variedad

- Hay muchas plantas- dice con asombro mi sobrina

- Demasiadas- acepto y nos sonreímos

- Y todas son muy bonitas- asiento con la cabeza- iré a ver esas

- Vamos – tomo su manita y camino a su lado en lo que recorremos el lugar

- ¿Cómo se llama esta planta? – comienza a preguntar

- Peonia – respondo viendo la planta, esa podría ser una para la casa

- ¿Y esta? – señala otra

- Orquídea – comienza a señalar ya sin preguntar- crisantemo, verbena, violeta, begonia, ciclamen, jazmín – frunzo la nariz, siempre he pensado que su aroma es muy fuerte

- Con esa planta sale papá -señala una azulada

- Mmmmm- entonces si se la dio él- azulejo

- Esa quiero- suspiro

- ¿También te gusta? – asiente- ni que hacerle- musito

- ¡Ah! ¿ya te dignaste a trabajar a mi lado? – las dos volteamos no sabiendo quien habla y al verlo sonrío

- Aún no, pero si vengo a ver tus productos- saludo a mi colega Rubén- mira pequeña, él es mi amigo Rubén y nos va a vender las plantas de mejor calidad y sin que estén enfermas- lo veo entrecerrando los ojos en lo que mi amigo se ríe- Rubén, ella es mi sobrina Eliana

- Oh, pero que encanto de señorita, espero seas del equipo de tu tía- y yo casi me atraganto con mi saliva- de las que le gustan las plantas- agrega al ver la carita de mi sobrina y le guiña el ojo

- Si, me gustan- sonríe feliz- quiero esta- señala el azulejo

- ¿Lo van a poner adentro o afuera? – buena pregunta y con la mirada le pregunto a mi sobrina

- ¿En el jardincito? – me pregunta y le digo que si- y ¿podemos poner más plantas aparte de esas?

- Si, se puede- aunque ya me veo teniendo que cuidar bien esas plantas porque es más una jardinera que un jardín

- Si, quiero y las blancas que le gustan a mami- salta feliz

- Azulejos y margaritas- le aclaro a mi amigo que me ve con cara de no creer- ya idearé como ponerlas para que los azulejos no maten a las otras- se ríe- quiero también plantas para interior- se cruza a mi vista una pata de elefante – esa también la quiero- le señala y manda a un chalan para que ayude con lo que voy pidiendo- quiero dientes de león

- Siiiii, ¡se va a poder jugar con ellos! – mi sobrina es feliz

- También quiero de tu mejor tierra

- ¿Macetas no? – niego con la cabeza

- Mmmm, puede que una, quiero plantas en la cocina, ya sabes lo básico: albaca, estragón, eneldo, hierbabuena, cilantro, perejil, laurel, menta, tomillo, pero las quiero todas en- trato de explicarle

- Si, si, ya sé de cuales quieres, por acá hay para que escojan- suspira

- Ah, el otro día platiqué con un amigo de ingeniería hidráulico, me comentó de unos productos que facilitan mucho el riego, igual te puede servir a ti aquí- digo viendo a todos lados sin perder de vista a mi sobrina que no deja de danzar por todos lados

La razón por la que encontré la felicidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora