Public Figure | Luar la L

PUF-052.

Narra Luar.

—¿Quieres que se vaya?

—Esa es tu decisión, Paris.—se quedó mirándome.

—Es él.

—¿El tipo por el cual estás portándote así la última semana?.—se apoyó en la pared.—Salen a pasear, te acompaña a recoger los pedidos de tu tienda, salen a comer en par de sitios a los que dijimos que iríamos juntos, a veces se duermen en el sofá, o haciéndose cariñitos, no estoy ciego y aún siéndolo con lo poco que se molestan en disimularlo me permitiría verlo.

—No pretendía.

—Pretendías y mucho.—nuestras miradas conectaron.—Y no sabes cuánto estoy soportando, porque ese tipo es mi pana, casi un hermano para mi y tengo que verlo tomándote la mano cuando debería ser yo, manejando el carro que te lleva a diario a revisar que todo esté correcto para el desfile cuando debería ser yo y un sinfín de cosas más.

—¿Y por qué?

—Porque te amo, ¿por qué más?.—sus ojos se aguaron.—Por más que quiera no tengo ni cómo reclamarte porque te fallé, ¿con qué cara te digo algo ah?.—me acerqué a ella.—¿Qué crees que sientes por él?

—Cariño.

—Agradecimiento, porque estuvo y yo no y quieres recordármelo una y otra vez aunque no quieras decirlo, quieres castigarme como yo lo hice contigo y está bien, te entiendo. Entiendo cada cosa que decidas hacer para abrir los ojos y darte cuenta que soy el hombre de tú vida y tú la mujer de la mía y que si no va a ser LARIS entonces no será nada.

—¿Por qué no será nada?

—Porque tu no quieres andar con nadie, Paris.—desvió la mirada.—En cada entrevista, en cada prueba de vestuario, en cada post dejas ver que seguimos juntos aunque estemos atravesando la peor crisis que hemos tenido en mucho tiempo.

—Para guardar las apariencias.

—Apariencias y un carajo, a ti nunca te ha importado eso.—llamaron a la puerta.—Porque confias en nosotros.

—Santos y yo...

—¿Quieres que caiga preso?.—negó con su cabeza.—Entonces no quiero saber lo que piensas que debo saber.

—Hemos decidido que es mejor estar alejados un tiempo.

—Van a darse un break, como si fueran novios y toda la cosa.—ella pareció darse cuenta.—Es injusto que te aproveches de esto.

—¿Aprovecharme?

—Te aprovechas de mi, te aprovechas de que te amo, te aprovechas de que soy el villano en tu historia que prefiere ver el mundo hecho pedazos y a ti sonriendo que el héroe que los salva a todos, te aprovechas de que sabes que estuve, estoy y siempre estaré a pesar de los rechazos, a pesar de que entregues lo que sólo debería ser para mi a otros y yo de pendejo me dejo.

—También te aprovechaste cuando iba a visitarte.

—¿Venganza, ahora nos hacemos eso?.—limpió torpemente sus mejillas.

—No voy a permitir que insinúes que no te amo, Luar. Te puso primero que a nuestro bebé así que no te atrevas a decirme algo así.

—No te puedo creer esto, Paris.

—¿Qué?, es la verdad.

—No hice más que pedirte que te quedes al margen.

—No iba a sentarme mientras acababa contigo.

—¿Ibas a dejarme sentarme a mi para ver como me arrebatan lo único que considero valioso para mi?.—se quedó callada, sentí mi corazón acelerándose porque este tema siempre conseguía alterarme y ponerme mal, imágenes de Paris en el hospital o en el suelo cuando ese tipo la disparó venían continuamente y estaba peleando demasiado con ellas para que desaparecieran.—Entiendo cada cosa que hagas para darte cuenta de que no estamos perdidos sino más fuertes.

—Deja de decir eso.

—¿Prefieres que te odie?

—No, yo...—me agaché junto a ella cuando se sentó en el suelo.—Luar, yo...—tosió.—No sé qué me está pasando, y...—

—Paris, respira...

—Santos estuvo cada vez que volví de la prisión, me consoló , hizo de la versión tuya que me enamoró por tanto tiempo que creo que...

—¿Y que descubriste?

—Nada.—fruncí el ceño.—Te veo a ti, te pienso a ti, te quiero a ti ...—sonreí.—Y necesitaba sacarte porque tú mismo pediste que me aleje.

—Solo quiero saber si aún me amas o si debo dejarte ir.

(...)

Narra Paris.

—Deberías tranq...— prefirió callarse tras la mirada que le echó Majo.—Es duro pero debes acostumbrarte, iba a ser el amor de tu vida o la ruptura más dolorosa de la his...

—Majo, amor , ¿quién te enseñó a consolar?, no había visto un fracaso igual en mucho tiempo.—comentó Bryan.—Me anda deprimiendo incluso a mi.

—Estoy bien.

—Si bien es tener los ojos más rojos que yo mis toallitas sanitarias cuando ando en mis días wow, sin duda estás perfectamente.—miré mal a Majo.

—Yo solo digo que ya estoy lidiando con demasiado drama y es más sencillo de lo que parece.

—Ilumíname.

—Lloras porque no quisiste decidirte, Luar no necesita espacio, no necesita nada, está dispuesto a retomarlo donde lo dejaron y fortalecer tras los errores que cometieron y ahora tu lloras porque te arrepentiste de lo que le hiciste pasar haciéndole espectador de tu efímero romance con su prácticamente hermano.

—Si que era simple.—se escucho la voz de Lala a tras de FaceTime.

—No son nada sin el otro, no consigues engañar a nadie y lo que sea que pasó con Santos si hasta ahora no se besaron...—miré a Bryan.—El tipo se regresa a PR y no te preocupa, toda tu atención va para Armando.¿Puedes decidirte de una buena vez?

Narra Santos.

—Mintió, si nos besamos y si no llegamos a la cama fue porque no se dió .—la mirada que me dedicó Armando si me asustó pero sentí satisfacción.—Y me voy antes de que no pueda seguir evitando sentir algo por Paris porque esa tipa es wow..

—No hace falta que me lo digas, estoy claro de la mujer que tengo al lado.

—Siento que las cosas hayan sido así.

—No "fueron así" me traicionaste y te metiste con la mujer de tu hermano.

—Ella e' otra cosa.

—¿Que pensabas que pasaría?

—¿Y quien dijo que no queda tiempo para que pase? No volveré a PR, pondré distancia, si pero...—sentí un fuerte dolor en mi mandíbula.—Llevabas tiempo deseando hacerlo.

—Lárgate.

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JAJAJAJAJAJAJ se prendió .