Capitulo 15: ⭑El verdadero rey⭑

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Hani miraba a través de la ventana polvorienta de su habitación con Dori descansando en su regazo

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Hani miraba a través de la ventana polvorienta de su habitación con Dori descansando en su regazo. La incómoda ropa de cuero se encontraba regada por el suelo hecha girones, donde ella la había arrojado después de quitársela con brusquedad al llegar a casa.

Se dejó caer en su sofá, abatida, luego de hundirse por horas dentro de la tina de baño con el agua limpiado su piel de la mugre y la tierra. El celular en la sala repiqueteaba incesante desde hacía unas horas, pero ella no tenía intención alguna de ir a tomarlo para responder las llamadas, sabía que debían tratarse de Seungmin o Jeha.

En ese momento no se sentía inclinada a redactar un reporte explicando detalladamente como golpeo con el puño al mejor amigo de su ex novio mentiroso que parecía, como él, haber regresado del más allá luego de abandonar a la que un día fue su mejor amiga.

Su vida se convirtió en un melodrama de televisión, incluso pensó con amargura que Seungmin sería excelente para interpretar algún papel dentro de la trama más desafortunada que pudiese haber sido inventada.

Estaba sumergida en sus pensamientos cuando Dori se recompuso de un salto, captando la atención de Hani que miró con incredulidad como el felino brincaba de sus piernas y abandonaba la habitación a paso veloz.

- ¿Tu también me dejarás? - Se quejó ella.

La puerta de la entrada repiqueteo al ser abierta y posteriormente cerrada. Hani escuchó la voz tensa de un muchacho saludando a Dori con ternura, Seungmin estaba en casa. Ahora entendía por que su gato salió disparado a la sala sin mirar atrás.

Se hundió todo lo que pudo en el sofá removiendo su cuerpo entre la pijama de felpa que la cubría del frio, el cabello rubio le caía en mechones empapados enmarcándole el rostro humedeciéndole la espalda y las mejillas, se apartó unos cuantos antes de que la conocida figura se asomara por el marco de la puerta contemplándola con seriedad.

Hani mordió su labio y apartó la mirada, enfocándose nuevamente en el reflejo de sus ojos en la ventana, lucía como un cascaron hueco desprovisto de color. Dori acudió a ella subiendo de un salto al brazo del sillón que lo recibió con el mullido terciopelo acariciando su pelaje. Se enroscó sobre este y dejó que la cola le bailoteara expectante.

- ¿No estas feliz de verme? - Masculló Seungmin.

- Si escucho a otra persona preguntar lo mismo juro que reventaré mis tímpanos.- Se quejó ella.

Ambos se mantuvieron serios por escasos segundos, antes de que se apartaran de sus lugares y salieran al encuentro del otro. El familiar abrazo llenó de energía el vacío corazón de Hani y alivió el pesar en los hombros de Seungmin, incluso Dori se vio lanzado contra ellos frotando y enredando su peludo cuerpo entre las piernas afelpadas de la pijama y la áspera tela de mezclilla. 

- Me alegra que hayas vuelto.- Murmuró Seungmin, separó su cuerpo ligeramente deshaciendo el abrazo. Hani pudo notar su mejilla sonrojada dónde su cabello mojado se encargó de humedecerle el rostro.

PIEZAS DE AJEDRÉZ ✥ Lee KnowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora