2. Distinto.

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Pov ____________:

Detuve mi caminata frente a la universidad de Queens con una mueca.

Descubrí que el departamento era habitado por una mujer de edad avanzada a la cual su familia decidió cuidar por lo que estaba disponible.

La mujer tenía ropa algo...pasada de moda y tuve que hacerle un par de cambios.

Ahora llevaba una minifalda negra algo entubada, una camisa blanca corta de enfrente pero larga de atrás, aún conservaba mis medias y botines de mi atuendo pasado así que había intentado replicar un buen outfit con ropa vieja.

Llevaba mi cabello negro atado en una coleta alta, pude sentir la mirada de algunos estudiantes sobre mi.

Ignoré sus miradas para caminar a la entrada pero antes de ello un chico de tez morena, cabello oscuro y estatura promedio se situó frente a mi.

—Hola, hermosa —alce una ceja—, soy Flash Thompson.

—_____________ Watson —respondí con una sonrisa falsa.

Pase por su lado y entre al lugar. Flash Thompson, creí que aquí no existía.

El Flash de mi...mundo es: alto, rubio, de piel blanca y ojos claros. Lo contrario al de aquí.

Seguí caminando hasta dar con la dirección.

—Señorita Watson —saludó el director—. Bienvenida, permítame acompañarla.

El timbre sonó, ambos salimos y caminamos por los pasillos ahora vacíos.

—La universidad de Queens es una de las mejores, queremos que los estudiantes aprendan lo necesario para el mundo empresarial —aquí eran muy serviciales.

En Queens eran muy antipáticos, algo egoístas. Del egoísmo de mi sociedad nació Electro.

—Señorita Watson —vi que el director había entrado a un aula, apresure mi paso e ingrese—. Jóvenes, quiero que reciban bien a su nueva compañera, estará con ustedes de ahora en adelante.

Analice al grupo hasta que vi a cierto castaño, me miraba sorprendido.

—Gracias, director —sonreí y el hombre asintió.

El profesor salió con el director.

—Oh —regresó—, Watson, toma asiento a un lado de Thompson.

—¡Aquí! —el moreno sacudió su mano y yo sonreí.

Camine hasta el pupitre que estaba vacío a lado de la ventana.

—Extrañamente siento que el destino te quiere a lado mío —entonó socarrón y reí.

—Ya lo creo —aseguré y me miro sorprendido—. Sabes, en mi mun... —guarde silencio—, en mi anterior universidad —corregí—, conocí a un chico que era igual de engreído que tú —sonreí boba al recordar a Flash—. Pero en el fondo era maravilloso, tenía un instinto protector y cariñoso —suspire.

—Estás enamorada de él —afirmo y lo mire.

—¿Qué?, ¡no! —me ruborice—, él no es...bueno, si es p-pero —trague saliva—, olvídalo.

Soltó a reírse, una risa sincera. Al parecer muy en el fondo él también tenía bondad.

—Seremos buenos amigos —susurré y dejo de reír.

—¿E-en serio? —sacudió su rostro ante su tartamudeo.

—¡Claro! —alce mi puño, el moreno sonrió y chocamos puños.

Finesse 《Peter Parker y tú》©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora