Finesse 《Peter Parker y tú》©

12. Daily Bugle.

Pov _____________:

Lo primero que percibo es el olor a farmacos y cloro, en especial el cloro, mis demás sentidos comenzaron a sensibilizarse y abrí los ojos por inercia.

—Hey, ¿cómo te sientes? —su voz es lejana pero a su vez demasiado fuerte por lo que vuelvo a cerrar los ojos, un poco disgustada por el sonido—, lo siento —susurró avergonzada—. Soy la doctora Palmer.

Me hundo en la comodidad de la cama, suspiro aliviada y abro los ojos de nuevo.

Apreciando a la bella mujer que me atiende ahora mismo.

—Stephen ha estado preocupado por ti...algo raro en él —confesó con diversión, sonreí por instinto—. ¿Cómo te sientes?

—Un poco adolorida pero bien —asentí un poco—, no era necesario esto...

—Pasaste un día entero inconsciente —interrumpió con sutileza, el horror se ciñó en mi semblante, ¿un día?—. Por eso fue necesario tratarte de inmediato.

Comenzó con sus revisiones: ojos, olfato, oído, pulmones, pecho, presión, todo.

Me alimentó con una gelatina de limón y poca ensalada, me sentía como una niña pequeña pero no podía protestar ya que tenía demasiada hambre.

El resto del día la pase acostada, repitiendo en mi cabeza lo sucedido, ahora Peter sabía de Parker, ¿qué planeaba decirle?

"Hey Peter, sé que debí decirtelo desde un principio pero, ya sabes, tenía miedo de decirte que...vengo de otro universo"

Lleve una mano a mi frente, disgustada.

—Suena patético...

—¿Qué suena patético? —mire con pánico al hombre que ingreso al cuarto—, vine en cuanto Christine me informó que habías despertado.

El señor Strange camino a la cama hasta estar de pie frente a la misma con las manos dentro de los bolsillos.

—Decirle a Peter que soy de...

—No tienes de qué preocuparte, los hechizos son simples —mostró cierto egocentrismo.

Abrí los ojos sorprendida.

—¿Usted...?

—Nadie lo recuerda, solo tú y yo —alcanzó a responder antes de que la puerta fuera abierta.

—¡____________! —Harry, Flash y Peter ingresaron al cuarto con numerosos regalos, May entró detrás de ellos con una sonrisa.

—Los accidentes le ocurren a cualquiera, ¿no? —replicó Strange con negación—. Mi hija debe tener más cuidado.

—Casi nos mata del susto la noticia —alardeó Flash con seriedad—, pero, ¿cómo te sientes?

—Mejor, soy un poco...torpe.

—Debes tener cuidado, los accidentes en bicicleta son de todos los días pero debemos evitar algo peor —intervino la doctora Palmer quien estaba de brazos cruzados junto a el señor Strange—. ¿Me acompañas?, debes firmar el alta de tu hija.

—Si, claro —accedió el mayor—. Chicos, cuidenla.

—Claro que sí, señor Strange —accedieron a la par.

Ambos adultos marcharon y miré a mis amigos, en especial a Peter.

—Chicos, salgan para que ___________ pueda vestirse —hablo May con una sonrisa—, andando, afuera.

May echó a los tres mientras ellos se quejaban, contuve una risa y los despedí con un ademán. Cuando estuve sola me hundí en la cama, aturdida y confundida.