Good Omens 3 - Fanfic

Capítulo 2

Hacía 4 años atrás, en el inicio de la llegada de Aziraphale como arcángel, la vibra del lugar era fuerte y deprimente. Más nadie se percataba de aquella aura tan triste que abundaba dentro del cielo.

Aziraphale en un inicio parecía perdido, con una sonrisa aún más fingida de la que tendría años después, y siempre miraba su reflejo en las ventanas del cielo, tocando sus labios seriamente. Al inicio de su llegada, sus pláticas con Metatron era seguidas, siempre a su lado.

No faltó mucho para que dejara de hacer aquello y comenzará a actuar de una manera similar a Gabriel,exceptuando la actitud ególatra que tenía el anterior arcángel, su vestimenta había cambiado a una que él en sus 4 sentidos no usaría realmente. Al siguiente año, Metatron ya no requería reunirse a menudo con Aziraphale, muy pocas veces requerían charlas las cuales nadie sabe que decían.

La voz de Aziraphale la reconocía cualquiera, una agradable, sutil y con un toque de poder el cuál el ángel estaba orgulloso de poseer, más nadie oía su voz dentro de él, la cual era apagada y melancólica. En un inicio era fuerte aquella voz y poco a poco dejó de sonar con tanta frecuencia, más aún existía.

Podría expresarse como aquel sentimiento que te hace sentir que no estás en el lugar correcto, que te hace sentir tanto en tu estómago que te mantiene con una mirada perdida la mayoría del tiempo

Y esa voz era la que mantenía aquella vibra apagada y vacía que tenía el cielo.

Regresando al presente.

Uriel caminaba rápidamente hacia donde se encontraba Aziraphale pensativo, al llegar se detuvo y activó una de sus pantallas - Encontramos en las cámaras de seguridad cuál fue el ángel que se fue - mostró un vídeo que mostraba como alguien se iba al elevador con tranquilidad, mirando hacia todos lados esperando que no lo vieran, se cerraron las puertas y la grabación terminó.

- ¿Quién es? - miró la imágen detenidamente, volteó a ver a Uriel y sonrió - No importa, el ángel que mandaste se encargará ¿No? - Uriel asintió y se retiró.

Aziraphale vió como ella se iba y volteó a ver la ventana, pensativo y por un instante sintió una punzada en su pecho, su sonrisa se retorció ligeramente, tomó un poco de aire, susurró algo, suspiró y continúo con su trabajo.

La noche se hacía más fría conforme iban pasando el campo que llevaba a la casa Crowley, no se veía nada y al parecer el demonio había cumplido lo dicho, no llevaría a Galadriel a la biblioteca.

Galadriel miraba por la ventana, viendo las plantas hasta que Crowley giró su auto y entraron a una zona amplia donde había una casa la cual parecía solitaria, el demonio se estacionó y suspiró - Bien, bájate de mi auto - abrió la puerta y volteó a ver al ángel de forma seria.

El ángel bajó y agitó su falda tranquilamente, Crowley caminó hacia su casa pero se detuvo al sentir que caminaban detrás de él - ¿Qué haces? - alzó una ceja.

- Te sigo -.

- ¡Oh! Claro - mostró una sonrisa sarcástica - No, no vas a entrar a mi casa, no tengo invitados y tú no serás la excepción - se inclinó hacia ella y mostró sus colmillos, caminó dando pasos largos y volteó a verla, ella se quedó parada en el mismo lugar. Firme y seria, Crowley hizo una mueca y cerró la puerta de un portazo.

Soltó bufidos mientras se acercaba a su habitación - ¿Qué clase de ángel se cree que puede entrar a mi casa como si nada?- se sentó en su cama quitándose los zapatos, la habitación quedó en silencio y movió la cabeza pensativo, se levantó y se dirigió a la entrada principal, al abrir la puerta vió que el ángel seguía ahí parado, quieto esperando algo del demonio.