Desesperación

204 22 4
                                    

Todos los universos, en mayor o menor medida, sintieron el temblor que se generó debido a la extorsión de energía por parte de un nuevo dios que nació a través de un mortal.

Cada destructor mostró incredulidad en su rostro, y aún más al percibir el poder desde sus distantes universos.

Si bien era un poder imponente, no estaba controlado ni refinado.

El Gran Sacerdote observó con interés y una leve sorpresa. ¿Cuándo había sido la última vez que presenció a un mortal ascender a tal nivel de divinidad? Después de reflexionar un poco, llegó a una conclusión obvia.

No tenía memoria de un incidente similar en el pasado, ya que esto jamás había ocurrido en la historia del multiverso.

El Gran Sacerdote observó por un momento al entretenido Rey de Todo mientras evaluaba la situación, y dejó escapar un suspiro.

Zen-o-Sama gritó emocionado: "¡Oohh!", expresando su característica voz y actitud. "¡Son Goku es increíble!", admitió, mostrando cierto grado de respeto.

"En efecto", comentó su asistente, fijando su atención en la figura de aquel mortal ahora convertido en un dios con una pizca de seriedad. "Tanto poder y furia descontrolada... Y su poder no se corrompe", susurró con notable interés, mientras sus ojos, brillantes debido a su ultra instinto, destellaban de manera misteriosa.

Bills abrió la boca para decir algo, "Co...", pero fue desmaterializado del lugar por el extremadamente poderoso golpe del báculo sagrado del Saiyajin Dios Dragón.

Son Goku, sin pronunciar palabra, se lanzó a gran velocidad para alcanzar a Bills, quien seguía volando a velocidades varias veces superiores a la de la luz por el espacio. Un rugido estremecedor resonó una vez más en el séptimo universo.

Bills se recuperó y, con una furia renovada alimentada por el dolor del golpe anterior, se lanzó para interceptar a Goku. Comenzó así un frenético intercambio de golpes a una velocidad absurda.

Cada impacto desviaba sistemas interplanetarios de sus órbitas previstas, y los planetas cercanos se convertían en polvo cósmico.

Tras recibir un poderoso golpe que detuvo con su antebrazo, Bills respondió con una poderosa patada en hacha que envió a Goku volando por el universo. Ahora, Bills cargaba una esfera concentrada de Hakai.

A los pocos segundos, el saiyajin se recuperó y, al enfocar su mirada, observó con seriedad la esfera de energía que se dirigía velozmente hacia él. Flexionó sus piernas mientras agarraba su báculo sagrado con ambas manos, ganando impulso para aumentar la potencia. Comenzó a hinchar sus músculos y apuntó el báculo hacia atrás. Luego, arrastró ambos brazos conjuntamente con el arma hacia adelante, intentando batear esa energía.

Sin embargo, el resultado no fue el esperado, ya que la energía Hakai mantuvo un enfrentamiento por la supremacía contra el báculo sagrado.

En su estado de ssj4 con mi divino infundido, Son Goku gruñó levemente, potenciando su fuerza con un doble kaioken.

Tras este aumento, la esfera fue devuelta hacia Bills, quien con complicidad se apartó, revelando detrás de él un sistema planetario muy conocido para nuestro protagonista.

Son Goku abrió los ojos con sorpresa y urgencia al ver cómo la esfera de la destrucción se dirigía al sistema solar.

"¡No puede ser!" Gritó, lanzándose para intentar proteger su mundo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 12, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Son Goku el dios dragón de la facción EspectadoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora