Capítulo 2.

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El viaje ya era un hecho. De alguna manera reuniste la determinación y valentía necesaria para hacer tu equipaje, abordar un taxi y llegar a dónde te encontrabas ahora mismo, el aereopuerto.

— ¿En serio haré esto? — cuestionaste mirando tu al rededor. El nerviosismo se apoderó de ti y comenzaste a prepararte para todos los escenarios posibles que fueras a encontrar. ¿Aún te recordaría?, ¿tendría pareja?, ¿cómo te acercarás a él?, ¿realmente estás lista para la peor situación?

— ¡Hey, Tn! — exclamó una voz masculina acercándose a ti.

— Dylan. — dijiste abrazándolo.

Después de recibir el regalo de Arleth te dirigiste a tu habitación, no estabas convencida de emprender el viaje, le diste vueltas al asunto hasta que llamaste al único hombre con el que mantenías una gran relación, Dylan.

Se conocieron en la universidad, Dylan era un chico muy carismático y agradable, pero un terrible estudiante. Él estaba enamorado de ti y el mejor pretexto para acercarse fue pedirte ayuda para estudiar después de clases.

Nunca se atrevió a confesar sus sentimientos porque le preocupaba perder tu amistad, pero se animó en la graduación. Claro, lo rechazaste. Dylan entendió cuando escuchó tus motivos y lejos de separarse, se volvieron más unidos que nunca. Su amistad perduró hasta la actualidad.

— Gracias por venir, no quería irme sin despedirme. — le dijiste tomando sus manos. Lo apreciabas mucho y él a ti. Te demostró de tantas formas que podías contar con él.

— Aún no puedo creerlo, ¿Corea del Sur? — respondió incrédulo. Siempre le contabas tus planes y pedías su opinión; así que, le sorprendió mucho cuando lo llamaste para decirle que te irías de viaje pero querías verlo antes. — ¿Estás segura de que esto resolverá el problema? — añadió.

— Debe hacerlo, solo él puede terminar este sentimiento.

Dylan te miró preocupado, conocía su historia y deseaba que fueras feliz pero imaginar que podrían herirte, lo dejaba intranquilo.

— Cuídate mucho, no dudes en llamar si algo sucede. Tomaré el primer vuelo disponible. — dijo acariciando tu cabello.

— Estaré bien, te lo prometo.

.   .   .

Gritos llenos de euforia, miles de mensajes de personas por todo el mundo, alabaciones, escenario tras escenario, es algo a lo que Christopher ya estaba acostumbrado desde que se convirtió en Idol. Si no hubiese sacrificado todo aquello que era parte de él, tal vez no estaría en la cima del éxito.

Por supuesto, detrás existen situaciones inimaginables por las que tuvo que pasar y aguantar, pero que aprendió a resolver para lograr uno de sus tantos propósitos. Era un chico ambicioso y siempre se esforzaba por ser una mejor versión de sí mismo, cada minuto, cada día.

Christopher estaba agradecido con la vida por todo lo que le ha dado desde un principio. Es verdad, sus primeros momenos en Corea fueron duros, se sentía solo, con ganas de retroceder y regresar a casa; sin embargo, con el tiempo se hizo de amigos dentro su agencia e incluso encontró una familia. Aquellos chicos fortalecieron su espirítu y le reafirmaron que su decisión fue la correcta.

Quizás dejó mucho, pero no estaba arrepentido. ¿Cierto?

"No me olvides tan pronto".

Un día más que despertaba con aquella frase en mente. En los últimos meses tenía sentimientos encontrados, sabía que tomó una buena decisión y que volvería a tomarla si tuviera la oportunidad de regresar el tiempo, pero inconscientemente se recriminaba por haberse ido de Australia.

── ‹ ˖͢⚝·᛫᭻ Soulmate ☇ ₍ Bangchan & T/n ˶ࣳۜۘۜꪶ♡͙۪۫ ..Donde viven las historias. Descúbrelo ahora