𝑴𝒊 𝑸𝒖𝒆𝒓𝒊𝒅𝒐 𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂 | 𝑯𝒚𝒖𝒏𝒍𝒊𝒙 ⁽ᵒᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉ⁾

Padre.

Christopher entró en la casa y miro el lúgubre rostro de su esposo, había un olor peculiar en el aire que hizo que su corazón diese un vuelco y corrió a abrazarle con ternura.

—¿Desde cuándo estás embarazado? —preguntó emocionado, pero Changbin no contestó, en cambio le miró con preocupación.

—Tenemos que hablar —dijo el otro sentándose en la mesa, donde Seungmin estaba sentado con una cara peor que la de su padre.

—Habla de una vez, me estás asustando —dijo el padre de la casa desconcertado ¿había algo mal con su cachorro?.

—No soy yo el que está emitiendo ese aroma —habló.

—Si no eres tú entonces... —Christopher abrió los ojos tan grande como nunca en su vida, miró a Changbin y luego a Seungmin para comprobar aquella situación.

—No puede ser verdad, mi niño no haría una cosa así —dijo incrédulo, aunque el aroma suave y cálido pero a la vez melancólico se lo confirmaba.

—Pero lo hizo —habló Seungmin al fin —, lo hizo con ese beta que siempre le está rondando —escupió molesto.

Chris miró a su esposo y su silencio lo dijo todo.

—Felix me va a escuchar, no lo crié para que le abriera las piernas a cualquiera y menos para cometer un error a esa edad, por dios ¡¿es por eso que pidió tiempo con Jeongin?!, esos idiotas ya habían planeado todo —dijo mordiéndose el labio.

Subió apresurado a la habitación, sin importar las palabras de Changbin a su espalda, subió aceleradamente y abrió la puerta sin delicadeza.

Entonces fue empapado con una sensación de melancolía, tan grande que las lágrimas cayeron en sus mejillas.

—¿Papá? —dijo una voz en algún lugar del cuarto.

—Yo bebé, ¿qué pasa? ¿por qué demonios estás haciendo esto?, tu dolor es tan grande que es palpable —dice el beta, recordando la vez que se fue de viaje durante el embarazo de Changbin y como al volver, el omega se encontraba en una situación parecida.

“Apego emocional”.

El médico había indicado a Christopher no alejarse de su esposo, estar presente o al menos dejar prendas con su aroma a su lado, de tal modo que el omega no se sintiese desprotegido, ya que, si la cosa empeoraba, el bebé podría morir.

Chris miró a su hijo, claramente era la luz de sus días, así que no dudo ni un segundo en llamar al supuesto padre del bebé, no estaba nada contento con la situación, el matrimonio de Felix le había asegurado un lugar en la cima, pero no iba a sacrificar a su hijo y aunque abortar era una opción, no sabia que tan dispuesto estaba su hijo, ni que tan peligroso podía ser, debido al aroma tan triste que el joven emitía.

No era tan malo, después de todo, Jisung era un beta de buena cuna.