Este es un omegaverse diferente, los omegas son la clase alta y los alfas lo más bajo de la cadena.
Hwang Hyunjin un alfa pobre con la inocencia de un niño no puede evitar observar al bonito omega de su clase Lee Felix, sabe que jamás lo tendrá o es...
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El tiempo pasa de prisa cuando te sientes protegido, así se sentía Felix en aquel sitio, por supuesto, no era ni la mitad de bello de lo que era su verdadero hogar, la cama era incómoda, las cobijas picaban, las paredes estaban sucias y había un olor a humedad, no es que Hyunjin fuese un chico sucio, solo era que el lugar era pobre y no importaba que tanto fuese limpiado, seguía teniendo ese aura apagado.
Pero Felix se sentía entre flores, en calma, recostado en el pecho del alfa, siendo mimado, nunca se había sentido así, nunca habría querido quedarse en un lugar tan diferente al suyo, comía lo que su hermano le enviaba con Jeongin y poco a poco se dió cuenta que el celo terminaba y tenía que volver.
Pero no quería.
Acarició el collar en su cuello y pensó en quitárselo para ser mordido, pero una decisión a la ligera podría empeorar las cosas y ahora ya no pensaba en él, si no en el bebé, Felix pensó que no quería sufrir más.
Acaricio su estómago que ahora mostraba los 2 meses de embarazo y suspiró “Oh Felix, eres un pequeño idiota”, se regañó, pues el plan era jugar un poco con el alfa antes del matrimonio, no enamorarse, no embarazarse, no ser un estúpido enamorado.
Pero finalmente se levantó de la cama, se vistió, acarició el cabello del alfa y se metió en la ducha.
—No hay agua tibia —le dijo el alfa apenado —, no tenemos derecho a eso —suspiró realmente molesto consigo mismo por no poder ofrecer algo mejor al hermoso omega.
—No hace frío, estaré bien —le dice buscando entre la ropa que su hermano le envió un suéter para taparse al salir —, no soy tan débil Hyunjin.
—No eres débil —le dice Hyunjin aún en la cama con la cobija sobre el rostro y Felix está que se ríe por el reproche que ha salido de sus labios.
No ha pasado mucho tiempo cuando ya vestidos están tomando jugo y mirando sus teléfonos, hay tantas llamadas perdidas de sus padres que Felix tiene dolor estomacal, pero no dice nada, está tan sereno como de costumbre, por otro lado Hyunjin está buscando información importante.
“¿Cuánto dura el embarazo del omega?.”
“¿Lastimo al bebé si se la meto al papá?.”
“¿Qué comen los omegas embarazados?.”
“Nombres de bebés.”
“¿Cuántos cachorros tiene un omega?.”
“¿Cuánto cuesta un parto?.”
“¿Alguien ayudaría a un alfa si embaraza al omega que ama?.”
Hyunjin no quiere ver las respuestas a la última búsqueda, pero se detiene en una foto de ropita de bebés y sonríe pensando en cómo lucirá su cachorro al nacer ¿tendrá los hermosos ojos almendrados de Felix?, le gustaría que fuese igual de bello que él, que no sea un alfa, para que jamás sufra, que jamás sea pateado en la escuela, ni bañado en agua de coladera, no quiere que lo corran de las tiendas por su olor, de solo pensarlo lleva su mano a la boca, su hijo debe ser un omega y de no ser así, matará a cualquiera que le toque o haga mal y pensando en eso arruga el ceño.
